�Las 4 claves de la goleada del Sporting y del notable a Ram�rez�

�Las 4 claves de la goleada del Sporting y del notable a Ram�rez�

Dani Souto

SPORTING 1905

Miguel �ngel Ram�rez
Miguel �ngel Ram�rez LaLiga

Texto de an�lisis

12 may 2024 . Actualizado a las 11:47 h.

Victoria aplastante del Real Sporting de Gij�n ante el FC Andorra en un encuentro con varios altibajos en un carrusel de emociones marcadas sobre todo por el marcador. Los de Miguel �ngel Ram�rez�fueron contundentes para terminar disfrutando m�s que sufriendo reencontr�ndose con la victoria en El Molin�n y diversas sensaciones positivas. Analizamos en 4 claves los aspectos m�s destacados del partido en clave rojiblanca:

Efectividad diferencial a bal�n parado

El buen hacer en esta ocasi�n a bal�n parado marc� para bien el partido del Sporting. Los rojiblancos lograron ponerse 2-0 en la primera media hora de juego sin desplegar un f�tbol excesivamente peligroso en �rea rival. No le hizo falta, pues en dos acciones ensayadas, una en un c�rner y otra en una falta lateral, permitieron afrontar el partido a partir de una temprana ventaja en el marcador.

Hac�a tiempo que no se hac�a un partido tan completo en este sentido, siendo resolutivo en acciones de estrategia de distinta �ndole y adem�s siendo seguro en �rea propia en las que toc� defender, sirviendo incluso de pretexto para uno de los goles rojiblancos aprovechando los espacios a la contra que cedi� el Andorra tras una falta lateral a favor de los visitantes que se desarticul� de forma eficiente.

Problemas en la presi�n para contener las superioridades del Andorra

Las principales dificultades del Sporting en el partido se dieron especialmente en el primer tiempo, y m�s a partir del tempranero 1-0. Desde la falta de activaci�n en diferentes zonas del campo cuando tocaba replegar, sobre todo a la hora de realizar las ayudas defensivas, a las dificultades en presi�n para impedir el avance de un Andorra que no renunciar�a a salir jugando desde su primera l�nea. El Sporting plante� desde un sistema sobre el papel en forma de 1-4-2-3-1 una presi�n que igualaba los tres centrales andorranos igualando par a par juntando a los extremos (Gaspar y Otero) con el delantero centro (Mario) para obligar a jugar r�pido a los zagueros visitantes. Por detr�s, Fran Villalba har�a de hombre escoba tratando de tapar las l�neas de pase por dentro.

Los problemas aparecieron por fuera, cuando la presi�n no llegaba a tiempo sobre el central m�s escorado -de cualquiera de los lados- y este pod�a jugar con el carrilero, aprovechando que Ferran Costa busc� generar superioridades por fuera juntando hasta tres jugadores cerca de la cal. As�, el lateral del Sporting (Guille o Cote) ten�a que pensarse m�s si saltar y cu�ndo hacerlo para no desproteger en exceso su espalda, pero a la vez estando obligado a dificultar el avance por fuera. Esa primera batalla desde el planteamiento la gan� el Andorra, que buscar�a sacar provecho de algunos duelos individuales por los perfiles rojiblancos (Cote e Izquierdoz) tratando de encontrar situaciones de uno para uno. Cuesti�n que se corrigi� al descanso.

Ajuste en presi�n al descanso para equilibrar fuerzas

La intervenci�n del cuerpo t�cnico al descanso fue relevante en el desarrollo de la segunda mitad, sobre todo en lo que se refiere al problema anteriormente citado en la presi�n. Un simple ajuste, pasando a un 1-4-4-2, modific� la manera de presionar del Sporting y limit� la capacidad del Andorra de construir desde atr�s. El propio Ram�rez lo explic� en rueda de prensa tras el encuentro; en lugar de emparejar a los dos extremos con un delantero sobre sus 3 centrales, con los dos puntas (Otero + Mario) hizo que uno de los extremos acompa�ara presionando si la jugada iba por su lado, mientras el otro cerraba la l�nea de pase unos metros por detr�s. Tras bascular, era el otro extremo quien saltaba, los dos delanteros cambiaban su marca tapando el pase por dentro en su recorrido y el otro extremo iba hacia dentro para cerrar ese pase.

As�, la opci�n de avanzar por fuera se sell� con las buenas basculaciones rojiblancas a la par que mantuvo controlada la posible salida por dentro. Un ajuste a primera vista muy simple, pero que fue igualmente efectivo y decisivo para que el Andorra sumara muchas m�s p�rdidas por errores forzados y que el Sporting consiguiera recuperar m�s veces con ventaja y espacios en la divisoria.

Decisivos y resolutivos en transici�n

Con esos espacios que el propio Sporting provoc� -como se explica en el anterior punto-, adem�s de un contexto de partido que obligaba al Andorra a asumir riesgos y a los rojiblancos a aguantar su renta y buscar posibilidades de da�ar en transici�n, una de sus especialidades, aparecieron posibilidades en transici�n ofensiva que los de Ram�rez no dudaron en aprovechar. Especialmente acertados, tanto en lo colectivo como en acciones individuales -el segundo gol de Otero con su definici�n y el gran pase previo de Mario son buena prueba de ello-, dejaron una versi�n letal del Sporting a la contra como hac�a tiempo que no se ve�a. Y fue de agradecer, porque as� termin� decant�ndose el partido en favor de los locales sin mayores sobresaltos a pesar de los intentos del Andorra por no verse demasiado lejos en el marcador.

Los cambios

Pablo Garc�a por Cote. Cambio acertado por varias circunstancias, empezando por las dificultades de Cote para frenar en el uno para uno a su par, un escurridizo �lvaro Mart�n, y continuando por la amarilla que arrastraba el de Roces que le pod�a condicionar en alguna acci�n puntual. Pablo cumpli� con su papel, proactivo en ataque como tocaba, y firme en defensa.

Queipo por Gaspar. Tocado por una varita, como tantas otras veces, Queipo logr� anotar un gol en su primera intervenci�n. M�s all� de eso, dio ese punto de verticalidad necesario en un contexto de partido tan concreto y que le beneficiaba m�s a �l por perfil que al propio Gaspar.

Mesa por Villalba. Mayor contenci�n en el centro del campo y control de bal�n a una altura inferior, cuestiones que consigui� aportar un Roque m�s atinado que en semanas recientes.

Rivera y Zarfino por Nacho M�ndez y Mario. Cambios en el tramo final sin mayor incidencia, si bien el uruguayo cerca estuvo de poder hacer un gol muy deseado por la afici�n presente en el estadio. No pudo ser.

Nota a Miguel �ngel Ram�rez y el resto del cuerpo t�cnico

Notable. La principal deficiencia, y de las pocas que se pueden encontrar en el partido, estuvo en la presi�n planteada desde un inicio, pero en virtud y favor del cuerpo t�cnico en esta ocasi�n se supo ver la deficiencia y corregirla con acierto sobre todo al descanso. Adem�s de eso, se estuvo acertado con los cambios y se marcaron diferencias a bal�n parado, en lo cual tienen su influencia, as� como en diferentes contextos de partido a los que se adaptaron y supieron sacar tajada.

Un partido bastante completo en l�neas generales de los rojiblancos que da buena fe del resultado final. El objetivo pasa por repetirlo en la medida de lo posible y de darle continuidad en las 3 finales que quedan para finalizar el campeonato, empezando por la visita a Legan�s.