El Deportivo tiene este domingo la oportunidad de cerrar ante el Barça Atlètic un círculo que estuvo a unos minutos de no empezar siquiera a trazarse. Porque el punto de partida sucedió en el duelo que enfrentaba a ambos en la primera vuelta. Concretamente en el descuento de ese partido en el Johan Cruyff, donde Davo corría una asistencia de Lucas para batir a Vidal, salvar la cabeza de Imanol Idiakez y comenzar, todavía sin saberlo en ese momento, el inicio de una reacción con números de récord que tienen al equipo blanquiazul a un paso de regresar al fútbol profesional.
Cinco meses han pasado desde entonces. Tiempo en el que ambos equipos han sufrido grandes transformaciones para, curiosamente, recorrer el mismo camino de excelencia desde que arrancó 2024. Pocos lo hubieran sospechado al final de la primera vuelta, cuando tanto blanquiazules como azulgranas miraban con envidia a la zona de privilegio mientras ambos se rearmaban para una escalada que por aquel entonces parecía utópica.
Mañana se enfrentan de nuevo como los dos únicos equipos que ya tienen opciones de ganar la liga mientras al resto de rivales no les ha quedado más remedio que arrojar la toalla. En este trayecto, tanto el Deportivo como el Barça Atlètic han cambiado mucho y para ello no hace falta más que echar un vistazo a las alineaciones de aquella tarde de diciembre y a los posibles onces que han venido utilizando tanto Idiakez como Márquez recientemente
Por parte del equipo herculino, Salva Sevilla y Davo se habían consolidado debido a las bajas y han pasado a tener un papel testimonial en la segunda vuelta, sobre todo en el caso del veterano centrocampista. Yeremay jugaba su primer partido de inicio tras la lesión de peroné y Mella estaba regresando de una rotura fibrilar que lo apartó un mes del verde tras el partido de Copa ante el Covadonga. No estaban Barbero ni Ximo tampoco.
No es menor la metamorfosis que ha sufrido el filial culé. Astralaga se ha hecho con la portería, mientras que ya no queda rastro reciente de varios de los jugadores que estaban entonces recién llegados del Mundial Sub-17. Entre ellos Cubarsí, gran esperanza del primer equipo, o Héctor Fort, que en principio no jugará mañana tampoco. Mbacke tampoco estará por lesión y otros muchos jóvenes se han ido abriendo paso como ha sido el caso de Bernal, Unai (suplente en diciembre), Marc Guiu o el cadete, sí, cadete, Guillermo Fernández. Repetirá eso sí, Pau Víctor, que ante el Dépor logró uno de los 17 tantos que le permiten ser hasta ahora el máximo goleador del grupo.
