Hablamos con Alex Fischel, la última contratación de Spoon luego que se tomaran un receso de casi cuatro años. Nos habla de la gira y el onceavo disco de la banda, mientras se derrite con 37 grados de calor en Los Angeles.

Spoon debutará en Santiago el próximo martes 20 de octubre en un mes lleno de buenos conciertos. Para ellos, eso sí, la gira ya se está acabando, tomando en cuenta que su último y onceavo disco They want my soul (Loma Vista Recordings) fue publicado en julio del año pasado. “La gira ha estado muy entretenida, ha sido grandioso tocar estas nuevas canciones. Ya estamos pensando en lo que viene, ¿sabes?

—¿Ya están grabando algo nuevo?
Ese es el plan, estamos empezando a hablar un poco de eso y ver qué pasa. Hay una nueva canción que hemos estado tocando un poco (“Satellite”). Fue escrita un poco después que saliera They want my soul. Ha sido entretenido. Hay algunas versiones en Youtube, así que la gente conoce las notas de haberla visto ahí. Así que eso es como cool.

Spoon se metió no en uno sino que en varios estudios para registrar su último disco a comienzos del 2014. Pasaron por Los Ángeles, Austin y finalmente estuvieron en las afueras de Buffalo, lo más al norte que se puede ir en el estado de Nueva York, en la frontera con Canadá, en medio del invierno y nevando todo el tiempo.

—¿Por qué se fueron para allá?
Hay un productor que graba ahí que se llama Dave Friedman (Mercury Rev, Flaming Lips) y realmente queríamos trabajar con él, y ahí está su estudio. Es un tipo brillante. En verdad valió la pena, fue muy entretenido pese al clima. Yo nací y crecí aquí en Los Ángeles. Nunca viví algo así antes. Estaba congelado, tan, tan frío. Adentro había calefacción, pero cuando íbamos afuera a fumar un cigarrillo teníamos que hacer ejercicio extra para mantenernos tibios. Nos poníamos muchas frazadas.

—¿Pero eso les dio algún tipo de inspiración?
Sí, definitivamente estábamos atrapados en el estudio con la nieve. Nos recordó a El resplandor un poco. Así que la vimos ahí. Tal vez no fue la mejor idea, pero teníamos que verla y lo pasamos bien.

—Al final ustedes salieron con un disco, mientras que el tipo de la película no escribió nada.
(Risas), sí, creo que tuvimos una mejor situación.

El chico nuevo

Entre los discos Transference (2010) y They want my soul (2014), Britt Daniel estuvo en el grupo Divine Fits. Con ellos alcanzó a hacer un disco A thing called Divine Fits (2012) y una gira. Fue en ese grupo donde conoció a Alex Fischel.  El cantante le ofreció si quería estar en el próximo álbum de Spoon. “No había nada más que yo quisiera hacer”.

—Leyendo algunas reseñas del disco y escuchándolo vi que le diste un nuevo sonido a la banda.
Eso es halagador.

—Suena diferente pero todavía muy Spoon.
Es cool escuchar eso. Yo era fan de la banda antes de conocer a Britt. Me encantaban sus canciones, tienen grandes álbumes. Traté de traer un poco de mí al proyecto sin pisarle los pies a nadie. La estética y la dinámica de la banda están establecidas por un largo tiempo. Por eso traté de encajar en eso y agregar algo.

—¿Participaste en la composición de las canciones?
En verdad funciona así: Britt trae una canción, a veces es un demo que graba solo. La mayoría de las veces es un demo muy sólido, entonces tratamos de aprenderlo y ver qué podemos hacer. Por ejemplo en “Inside out” estaba originalmente en piano, pero como Britt había estado escuchando canciones del disco 2001 de Dr. Dre  y dijo que tal vez podríamos hacer algo así con la canción. Así que tratamos de hacer algo de rap a lo Dr. Dre. Fue una colaboración entretenida.

Spoonfly

Live in Levi’s presenta: SPOON en Ciclo Levi’s S.U.E.N.A
Ex Oz (Chucre Manzur, galpón 6)
Martes 20 de Octubre, 21:00 horas.
Entradas a la venta en sistema Puntoticket y sin recargo en tiendas Levi’s (Costanera Center y Parque Arauco).
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