En toda actividad profesional existen personas que destacan, ya sea por el resultado de sus trabajo como por el talento con el que lo llevan a cabo. El profesional del que hablaremos hoy, el especialista en maquillaje y caracterización Rick Baker, no solo destaca por esas dos cosas, sino también por ser el más ganador del Óscar al mejor maquillaje. Nada mal, ¿no?
¿Quién es Rick Baker?
Nacido en Binghampton, Nueva York, en 1950, Baker es considerado uno de los mejores maquilladores de la historia del cine gracias a su capacidad de adaptación a los distintos trabajos y su intuición especial para diseñar nuevos dispositivos y materiales.
Su vida profesional comenzó con las producciones televisivas de Art Cloakey, pionero estadounidense de las animaciones stop motion, después de haber llamado la atención de quien sería su protector, el maquillador Dick Smith (de quien ya hablamos, junto con el propio Baker, en nuestro artículo dedicado a los mejores profesionales del maquillaje).
Poco después comenzó a colaborar con el cineasta John Landis. A principios de la década de 1970, después de formar parte del equipo que hizo los efectos especiales para El exorcista junto al propio Smith, la actividad de Rick Baker se dispara, trabajando cada vez en más y más películas. En una de estas películas tuvo uno de sus grandes retos profesionales: en 1976 tuvo la tarea de diseñar el enorme simio que el productor Dino de Laurentiis quería para su versión de King Kong.
Pero el momento más importante en la carrera de Rick Baker todavía no había llegado: en 1980 es llamado nuevamente por John Landis para realizar complicados efectos especiales en la película Un hombre lobo americano en Londres. Landis no quería que la metamorfosis del hombre lobo se recreara a través de efectos ópticos, por lo que Baker tuvo que idear un dispositivo complicado, inspirado en un sistema que había empleado anteriormente Dick Smith. Años más tarde, Landis y Baker se reunieron con un desafío similar, para hacer el videoclip de la canción Thriller, de Michael Jackson.
A partir de ahí, Baker siguió desarrollando destacados trabajos en cine en películas como La casa de los Horrores, Gremlins 2, Hombres de negro o El Grinch, entre muchas, muchas otras.
Las películas de Rick Baker ganadoras del Óscar al mejor maquillaje
Baker es el hombre récord de los Óscars, cuando hablamos de maquillaje. Con once nominaciones y siete estatuillas ganadas, no hay nadie cerca en el horizonte que haga creer que podrá superar a este genio de la caracterización (los más cercanos son Greg Cannom y Ve Neill, con tres).
Vamos a repasar cuáles fueron las películas ganadoras del Óscar al mejor maquillaje en las que participó Rick Baker.
Un hombre lobo americano en Londres
El trabajo icónico que llevo a cabo Baker en la película de Landis cambió las reglas del juego en lo referente a efectos especiales en monstruos. Es un logro sorprendente por derecho propio y un momento importante en la historia del cine, pero es aún más impresionante para una película de terror, un género tradicionalmente ignorado por los premios de prestigio.
Han pasado casi cuarenta años desde que se hiciera aquella película, y la realidad es que la transformación de hombre lobo que desarrolló Baker aún no tiene rival, y sus efectos sangrientos en el inquietante rostro de Jack Goodman resisten la prueba del tiempo con la misma belleza.
Curso de Maquillaje y Caracterización de Efectos Especiales
Bigfoot y los Hendersons
En este clásico de finales de los ochenta, Rick Baker marcó otro hito en su carrera al crear el adorable rostro animatrónico de Bigfoot.
Esta máscara animatrónica no solo resultaba realista por la gran cantidad de detalles que tenía a nivel maquillaje, sino también por la inmejorable expresividad que podía conseguir gracias al movimiento de unos motores internos, controlados por un mando a distancia, que manejaban las cejas y los labios.
En el siguiente vídeo podemos ver cómo operaba este rostro animatrónico
Ed Wood
En esta película, que cuenta la vida del famoso director Ed Wood (que tras su muerte fue considerado el peor director de la historia y actualmente es considerado “de culto”), el punto fuerte del trabajo de Baker (que fue, en opinión de muchos, lo que le valió el Óscar) fue la transformación del actor Martin Landau en Bela Lugosi, un afamado actor del Hollywood de los años veinte que supo ser la cara icónica de Drácula durante décadas.
El gran mérito de esta caracterización no solo es el resultado final (que es absolutamente destacable) sino el hecho de que la cara de Landau no se parecía absolutamente en nada a la de Lugosi.
El profesor chiflado
Según el propio Baker, este fue uno de los trabajos más difíciles a los que se tuvo que enfrentar. Muchos pensarán que si pudo hacer una de las mejores metamorfosis hombre-hombre lobo de la historia del cine, sería algo sencillo hacer que Eddie Murphy sea más gordo o que se convierta en una mujer, ¿no? Pues para Baker el pensamiento era distinto, ya que el pensaba que como la gente no puede ver personajes ficticios como un hombre lobo o un alien todos los días, es más fácil “engañarles”, pero que resultaba mucho más difícil cuando lo que se intentaba hacer era mostrar cómo una persona igual a la que ven todos los días se convertía en otra persona igual a la que ven todos los días.
En cualquier caso, Baker lo clavó en esta película en la que hizo que Eddie Murphy adoptara un sinfín de rostros y cuerpos para dar vida a una película que se llevó un más que merecido Óscar al mejor maquillaje.
Men in Black
Los efectos alienígenas en Hombres de Negro son una delicia de otro mundo. Es verdad que no son espeluznantes, pero son ingeniosos, coloridos y creativos.
Probablemente, el personaje más memorable de esa película en lo que a maquillaje y caracterización se refiere sea Chucky, el pequeño hombre extraterrestre que estaba dentro de una cabeza humana. No solo era tierno y gracioso, sino también absolutamente convincente a pesar de sus proporciones ínfimas.
Seguramente Men in Black es una película recordada por sus carismáticos protagonsitas y sus graciosos guiones, pero el trabajo de efectos especiales de Baker es algo, literalmente, de otro planeta.
El Grinch
No es tarea fácil dar vida a los coloridos personajes del Dr. Seuss en la pantalla grande, pero Baker lo hizo parecer fácil, convirtiendo a Jim Carrey en El Grinch.
El trabajo no fue sencillo, ya que a la tarea de conseguir convertir a Carrey en El Grinck sin quitarle la afamada expresividad al rostro del actor, se le sumó también el maquillaje de los Quién, los habitantes de Villaquién. Baker comentó una vez que había tres tipos distintos de Quién en la película: algunos usaban una máscara entera hecha con moldes, otros utilizaban maquillaje genérico y otros usaban una máscara solo del rostro.
El hombre lobo
Baker trabajó con diseños de lobos y criaturas peludas varias veces a lo largo de su carrera, pero su trabajo en El hombre lobo fue destacado y, sinceramente, no recibió suficientes elogios. Tal vez sea porque la película en sí misma fue un tanto ridiculizada, pero el trabajo de Baker merecía mucho más reconocimiento del que obtuvo (aunque, vale la pena también aclarar eso, mucho de ese trabajo se hizo innecesariamente con CGI).
Hasta aquí llega nuestro repaso por la carrera de Rick Baker, el mago del maquillaje y la caracterización. Esperamos que te haya gustado y te recordamos que, si te atrae todo lo relacionado con el maquillaje FX y quieres formarte profesionalmente en este sector, en 35mm tenemos un Curso de Maquillaje Profesional y Caracterización con el que aprenderás todo lo que debes saber para formar parte de esta apasionante profesión.
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