¿Cuál fue el origen de los demonios?

Por: H. Wayne House

Este artículo forma parte de la serie «Respuestas a preguntas sobre ángeles y demonios«

Originariamente, los demonios fueron ángeles buenos. Según Génesis 1:31, al final de los seis días de la creación, “vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera”. Entonces, en el versículo siguiente, leemos: “Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo el ejército de ellos” (2:1). Por lo tanto, en algún momento anterior a ese, fueron creados los ángeles. Según Job 38:7, los ángeles fueron testigos de la creación del mundo y se regocijaron en ella.

La caída de algunos ángeles llegó entre el momento de Génesis 1:31 y Génesis 3:1, cuando Satanás se disfrazó de serpiente y tentó a Eva.

Los demonios no son los espíritus incorpóreos de los muertos. Según Salmos 9:17, Lucas 16:23 y Apocalipsis 20:13, los muertos no redimidos están confinados en el tormento, esperando el juicio final e incapaces de moverse por el mundo. (Esto también contradice el concepto de los fantasmas como espíritus de los muertos; estas apariciones son engaños satánicos, no fantasmas).

Los demonios tampoco son la descendencia de los humanos y los “hijos de Dios” de los que se  habla en Génesis 6:1-4. Defender esta idea exige que entendamos “hijos de Dios”como ángeles (una opinión que nos parece probable) y que la descendencia no fuese humana (algo que rechazamos). Significa que esa descendencia fue destruida durante el diluvio de Noé, y que de alguna manera los espíritus de esos descendientes se convirtieron en demonios que siguen rondando por el mundo. Por último, los demonios no son los espíritus incorpóreos de una raza preadánica que fue destruida antes del relato de la creación en Génesis 1. Este es un punto de vista que defendieron algunos cristianos a principios del siglo XX, pero en la Biblia no encontramos un respaldo textual para semejante idea, como no lo hay para sostener que los demonios son espíritus incorpóreos, algo que este punto de vista también exige.

Los demonios son ángeles caídos que no son eternos, fueron creados por Dios como ángeles santos y eligieron rebelarse teniendo a Satanás como líder. En el momento de su rebelión y del juicio de Dios que les apartó de su presencia y de su santidad, adquirieron la condición de ángeles caídos, también llamados demonios.

El término demonio se basa en la palabra griega daimon, que se refiere a un espíritu benevolente o malévolo entre los dioses y los humanos. Los autores del Nuevo Testamento lo utilizan solo en el sentido negativo.

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Fuente: Respuestas a preguntas sobre ángeles y demonios © 2013 por Editorial Portavoz, filial de Kregel Publications, Grand Rapids, Michigan 49501.