El pasado mes de febrero de este mismo año, el Palacio de Buckingham anunciaba de manera sorpresiva que, tras someterse a un examen de próstata, los sanitarios diagnosticaron cáncer al rey Carlos III. Desde entonces, los actos públicos del monarca se vieron reducidos drásticamente, pues sus apariciones han sido a cuentagotas.
El 'New York Post' sorprendía este viernes con una información en la que aseguraban que, debido al delicado estado de salud del rey, el Palacio de Buckingham se estaría preparando para un "funeral inminente". "Se encuentra realmente muy mal. Más de lo que dejan entrever", relataba una solvente fuente del entorno del rey al citado medio.
Una información que ha obligado a la Casa Real británica a emitir un comunicado de urgencia en el que desmiente la información: "Su Majestad regresará muy pronto a sus deberes públicos después de un período de tratamiento y recuperación tras su reciente diagnóstico de cáncer", reza el principio de este comunicado.
La casa real británica confirma que ha mejorado la salud de Carlos III y reaparecerá la próxima semana con su primer compromiso público: "Para marcar este hito, el Rey y la Reina realizarán una visita conjunta a un centro especializado en el tratamiento del cáncer el próximo martes, donde se reunirán con especialistas, médicos y pacientes. Será la primera de una serie de compromisos que su majestad asumirá en las próximas semanas".