Anafi, una pequeña perla de las Cícladas
Hasta hace poco tiempo, Anafi era un destino ignorado de las Cícladas. Con el tiempo, ha ganado más y más popularidad, y hoy es sinónimo de paz y belleza. Esta pequeña isla con una interesante historia ofrece, desde lo alto de sus acantilados, hermosas y sorprendentes vistas sobre el terreno circundante.
Aunque resulte paradójico, muchas veces las vacaciones son momento de descubrimiento, para conocer infinidad de lugares y realizar miles de actividades que, al fin y al cabo, nos dejan exhaustos. Para una temporada de verdadero relax y descanso (o para recuperar las energías después de las vacaciones), Anafi es el sitio perfecto. No obstante, os recomiendo que Anafi la toméis como una excursión desde cualquiera de las otras islas, y que por ello os busquéis el alojamiento en destinos más conocidos y turísticos como Santorini o Mykonos.
Una vida nocturna tranquila pero activa se desarrolla en la capital, Chora. Cafés y tabernas tradicionales, y pequeños bares con vistas a la costa, son las opciones para cuando baja el sol.
Sin embargo, durante el día varios lugares antiguos son buenos destinos para caminatas relajadas. Numerosas capillas de distintos estilos fueron construidas a lo largo del tiempo.
Con pésimas rutas y pocas ofertas en materia de alquiler de coches, Anafi es una isla para caminar. El Monasterio de Moni Kalamiotissas, a 6 kilómetros de la capital, se encuentra en el extremo oriental de la isla. Cerca de allí, están las ruinas del santuario de Apolo.
Situado a unos 470 kilómetros, el Monasterio de la Roca es la formación rocosa más alta de la costa mediterránea. Otra magnífica vista se obtiene en el castillo veneciano en Kastelli, al este de la capital.
Kastelli es un asentamiento histórico del siglo IX antes de Cristo. En el siglo XV de nuestra era, los venecianos construyeron allí su ciudadela, en lo alto del terreno. Hoy, sus ruinas son un sitio verdaderamente mágico.
El monasterio de Zoodochou Pigis, dedicado a la Virgen María, es otro de los lugares imperdibles de Anafi. Generalmente no está abierto al público, pero en caso de que lo esté, hay que recordar vestirse apropiadamente (pantalones o falda larga, y hombros cubiertos en el caso de las mujeres) para ingresar.
Foto Vía: Dhmoi
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