Ederson Moraes fue uno de los grandes protagonistas del Tottenham-Manchester City. El portero abandonó el terreno de juego en el 69', varios minutos después de haber recibido un duro golpe en la cabeza. El Cuti Romero se lanzó a por un balón e impactó con el muslo en la testa del guardameta, que recibió las asistencias médicas de inmediato.
El encuentro estuvo detenido durante varios minutos, los que pasaron desde la acción hasta el intento de recuperación del brasileño. En el 62', el intento de remate de Romero acabó en un golpe que dio trabajo y preocupación a partes iguales a los servicios médicos. Las caras de los futbolistas, mientras los galenos hacían su trabajo, eran de poca tranquilidad por la salud de un 'citizen' que, sin embargo, empezó a recuperarse.
Ederson se levantó y comenzó a mostrar señales de recuperación poco a poco. Varios compañeros rodearon al '13' para darle ánimos y comprobar su estado, a la vez que los médicos se preocupaban por él y le daban instrucciones. Sin embargo, Pep Guardiola ya había mandado calentar a Steffen Ortega, el portero suplente, por si el meta titular no podía seguir.
Y así lo entendió el entrenador español, pero no el portero brasileño. Llegó a sacar la falta para reanudar el juego, pero no convencieron sus movimientos con la cabeza como intentando sacudirse. Y Pep ordenó el cambio. Ortega entró en el minuto 69 ante el inmeso enfado del meta sudamericano. Este fue frenado por el técnico, que intentó razonar, pero la rabia pudo con Ederson. Tras su pequeña charla con el catalán, pateó una nevera y arrojó el peto antes de sentarse en el banquillo.
El City, que se está jugando la Premier con el Arsenal, jugará el fin de semana ante el West Ham en la última jornada antes de medirse, el 25 de mayo, al Manchester United en la final de la FA Cup.
May 14, 2024