Venecia es famosa por su encanto y por su delicadeza. Construida sobre marismas parcialmente ganadas al mar, con edificios construidos directamente sobre el agua, la ciudad siempre ha estado amenazada y, a medida que el nivel del mar sube, esto sólo se hace más evidente. A pesar de ello, Venecia sigue luchando y protegiendo su ciudad con todo tipo de medidas, incluido un nuevo sistema de tasas y reservas para entrar en la ciudad que se introducirá a finales de este año.
Si desea planear unas vacaciones en Venecia y hacer una visita, podrá contemplar algunos lugares únicos de Venecia causados por su estructura y orígenes inusuales, como librerías medio inundadas que siguen funcionando como de costumbre y turistas tomando tazas de café mientras sus piernas se enfundan en botas de plástico protectoras y son bañadas por el agua. Aquellos que estén dispuestos a seguir literalmente la corriente y a aceptar todas las excentricidades y aventuras de unas vacaciones en Venecia tanto por lo que son como por las experiencias singulares que pueden ofrecer, se verán recompensados con la creación de algunos recuerdos bastante especiales. Sin embargo, también es motivo de constante preocupación y planificación, por supuesto, para la ciudad y todos sus habitantes.
Debido a estas preocupaciones y a la tendencia de los últimos años a que Venecia se este "inundando" a diario de una forma diferente -con turistas que desembarcan de enormes cruceros para pasar sólo unas horas en la ciudad antes de marcharse de nuevo-, se han considerado algunas medidas nuevas para ayudar a proteger la ciudad. 2022 es el año en que se introducirá una de las principales iniciativas entre estas medidas: el establecimiento de un sistema de tasas y reservas para quienes deseen entrar en la ciudad de Venecia, aunque todavía no se ha anunciado una fecha exacta.
La tasa será simbólica, de sólo 5 euros por persona, pero deberá pagarse al hacer la reserva y con antelación a la visita. No se permitirá la entrada sin el pago de esta tasa, salvo a los residentes de la ciudad, una vez que sea introducida en los próximos meses. De hecho, se están instalando expresamente más de 500 cámaras por toda la ciudad para evitar la entrada no autorizada. Aunque en principio pueda parecer un concepto un tanto extraño, la ciudad confía en que sirva para hacer frente al llamado turismo de "atropello" de los visitantes de cruceros, que a menudo aportan poco negocio a la ciudad y pueden ser muy perturbadores para la vida cotidiana y cultural de Venecia. También se limitará el número total de visitantes que pueden entrar en la ciudad cada día, ya que habrá un máximo permitido y, una vez alcanzado, no se permitirán más entradas.
Según Simone Venturini, teniente de alcalde de Turismo de Venecia, en declaraciones a Euronews, "el objetivo es desalentar el turismo de un día, el turismo de "visitas relánpago", que llega en un día y se va en el mismo día, cansando y estresando a la ciudad, y fomentar en cambio un turismo más lento". Así pues, para quienes hayan encontrado un alquiler de casa en Venecia y tengan previsto pasar la mayor parte de sus vacaciones en la ciudad, no debería haber muchos cambios.
Sin embargo, si se ha decidido por uno de nuestras casas de vacaciones en Venetoy estaba pensando en hacer una o dos excursiones de un día a la ciudad, entonces sólo tendrá que asegurarse de planificar y reservar con antelación si quiere ver la ciudad por sí mismo. Aunque, de nuevo, en este caso no debería ser demasiado inconveniente. Seguramente todos estaremos de acuerdo en que cualquier método para intentar proteger este lugar único y mágico de Italia durante el mayor tiempo posible es sin duda lo mejor.
