5 poemas de Alfredo Espino que todo salvadore�o debe conocer | Noticias de El Salvador - elsalvador.com

5 poemas de Alfredo Espino que todo salvadore�o debe conocer

El escritor ahuachapaneco, qui�n muri� a temprana edad, fue muy reconocido en el pa�s con su obra "J�caras Tristes". �Recuerda alguno de ellos?

descripci�n de la imagen
elsalvador.com

Por Karla Corvera

2016-03-21 7:00:00

�Es porque un pajarito de la monta�a ha hecho, en el hueco de un �rbol, su nido matinal�, as� inicia uno de los poemas m�s reconocidos del poeta Alfredo Espino, y que todo salvadore�o debe conocer.

Su obra �J�caras Tristes� ha sido de los libros m�s le�dos por alumnos de tercer ciclo y bachillerato, especialmente de la generaci�n de los 90.

El ahuachapaneco, que hablaba en sus poemas principalmente de la campi�a, muri� a los 28 a�os un 24 de mayo de 1928.

Alfredo Espino fue el autor de la obra �J�caras Tristes�, editada gracias a la decisi�n de su padre, don Alfonso Espino. �l tuvo el apoyo de Alberto Masferrer.

La historia relata que Alfredo escrib�a sus poemas y los dejaba en cualquier lugar de su cuarto. Fue don Alfonso quien descubri� el talento de su hijo, tras su muerte.

A continuaci�n le compartimos un fragmento de los cinco poemas m�s populares de este escritor. �Cu�l es su favorito? �Cu�l agregar�a?

Vea:

10 monumentos hist�ricos que todo salvadore�o debe conocer

Los monumentos son s�mbolos que sirven para homenajear a un personaje o para recordar acontecimientos que marcaron la historia del pa�s

1. El Nido

�Es porque un pajarito de la monta�a ha hecho,

en el hueco de un �rbol, su nido matinal,

que el �rbol amanece con m�sica en el pecho,

como que si tuviera coraz�n musical�.

2. Ascensi�n

��Dos alas!� �Qui�n tuviera dos alas para el vuelo?

Esta tarde, en la cumbre, casi las he tenido.

Desde aqu� veo el mar, tan azul, tan dormido,

que si no fuera un mar, �Bien ser�a otro cielo!��

Vea:

5 pel�culas que muestran El Salvador de anta�o

Revisa estas nost�lgicas filmaciones. �Cu�l agregar�as?

3. Un rancho y un lucero

�Un d�a �primero Dios!

has de quererme un poquito.

Yo levantar� el ranchito

en que vivamos los dos�.

4. �rbol De Fuego�

�Son tan vivos los rubores

de tus flores, raro amigo,

que yo a tus flores les digo:

�Corazones hechos flores�.

5. Los ojos de los bueyes

��Los he visto tan tristes, que me cuesta pensar

c�mo siendo tan tristes, nunca puedan llorar!�

Y siempre son as�: ya sea que la tarde

los bese con sus besos de suaves arreboles,

o que la noche clara los mire con sus soles,

o que la fronda alegre con su sombra los guarde��