Damian Lillard, tras su brutal partido ante Indiana Pacers: "Para esto me trajeron"

El estadio retumbaba con la emoción cuando el base de los Milwaukee Bucks, Damian Lillard, dejó su marca en el primer partido de la serie contra los Indiana Pacers.

Faltando poco para que finalizara el primer cuarto, Lillard protagonizó un momento memorable al clavar un tiro de tres puntos desde 28 pies de distancia. Con un crossover magistral, creó espacio para sí mismo y lanzó un disparo que dejó boquiabiertos a los espectadores, desafiando la defensa extendida de T.J. McConnell de los Pacers. El sonido de la chicharra coincidió perfectamente con el balón atravesando la red, y el Fiserv Forum estalló en una ovación ensordecedora.

"¿Qué hora es?", preguntó el locutor.

"¡Es hora de Dame!", rugió la multitud en respuesta, demostrando su apoyo al nuevo ídolo de los Bucks.

"Para esto me trajeron aquí", exclamó Lillard con orgullo, mientras se golpeaba el pecho en señal de determinación.

A pesar de la ausencia de Giannis Antetokounmpo, el dos veces MVP de la NBA, debido a una lesión en la pantorrilla, Lillard emergió como el líder indiscutible de los Bucks en una victoria aplastante de 109-94 sobre los Pacers en el primer juego de la serie. El base estrella anotó un total de 35 puntos, todos ellos en la primera mitad del partido, estableciendo así el tono para Milwaukee y construyendo una ventaja que resultó insuperable para Indiana.

"En los playoffs, se trata de establecer el tono", explicó Lillard después del juego. "Quería salir y marcar el tono, especialmente en nuestra cancha".

Los 35 puntos de Lillard en la primera mitad lo colocaron en el segundo lugar en la lista de puntajes más altos en una primera mitad de un juego de playoffs en los últimos 25 años, solo detrás de la hazaña de Kevin Durant en 2019. Su destacada actuación estableció un nuevo récord personal en playoffs y superó el rendimiento de cualquier otro jugador de los Bucks en una primera mitad desde las Finales de la NBA de 2021.

El entrenador de los Bucks, Doc Rivers, no escatimó elogios para Lillard, reconociendo su papel crucial en la victoria del equipo. "Él nos llevó", afirmó Rivers. "Estuvo increíble".

Aunque Lillard no anotó en la segunda mitad, sus compañeros de equipo asumieron el relevo con Khris Middleton liderando la carga con 23 puntos y Bobby Portis contribuyendo con 15 puntos y 11 rebotes.

La victoria de los Bucks se vio respaldada por una defensa sólida que limitó a los Pacers a su puntaje más bajo en una mitad esta temporada, con solo 42 puntos. La ofensiva de Indiana luchó por encontrar su ritmo, fallando sus primeros 12 intentos de tiros de tres puntos.

Con esta victoria, los Bucks tomaron una ventaja de 1-0 en la serie, mostrando su capacidad para competir incluso sin Antetokounmpo en la alineación. La incertidumbre persiste sobre cuándo regresará Antetokounmpo, pero el desempeño dominante de Lillard ofrece un rayo de esperanza para Milwaukee.

Después de una temporada regular de altibajos, Lillard está decidido a hacer su marca en los playoffs y ayudar a los Bucks a alcanzar nuevas alturas. Su llegada al equipo ha revitalizado las esperanzas de un título, y su actuación en el Juego 1 es solo el comienzo de lo que promete ser una emocionante postemporada para Milwaukee y sus apasionados aficionados.