Iniciando la década del 70 apareció en el fútbol colombiano (Quindío) un joven tulueño con gran fortaleza en la definición, y a quien un par de temporadas después, cuando se puso la del Deportivo Cali, apodaron 'el Rifle'.
"El paso fue duro, porque llegué prácticamente de la calle, con un maletincito y me tocaba dormir donde fuera. Luego, me tocó demostrar que podía ser profesional y lo hice. Nosotros cogíamos un balón de arena, y le dábamos contra la pared, para fortalecer los cuádriceps. Yo terminaba los entrenos a las 11 de la mañana y me quedaba hasta las 12 ó 1 de la tarde, con Nivaldo (brasilero)", rememoró Andrade.
Además del Deportivo Cali y Quindío, jugó en el Pereira, Tolima, en el fútbol venezolano, Varta Caldas, y 'colgó su guayos' a los 32 años en el club en el que debutó.
Hoy a sus 59 abriles se desempeña como instructor de fútbol en la Universidad Libre en Cali, y el resto de su tiempo lo dedica a contribuir en el fortalecimiento mental y futbolístico de su hijo, quien asegura tener las siguientes cualidades:
"El cambio de ritmo, la velocidad, la habilidad, y levanto bien la cabeza para hacer el pase gol, cuando llevo el balón. En cada partido que uno entra, se le eriza la piel. Siempre he querido jugar en la profesional, salir, estar en la Selección Colombia, pero sé que tengo que seguir trabajando con humildad y con la ayuda de Dios".
Andrés Andrade (23 de febrero de 1989) es el futuro futbolístico del 'Rifle'. Juega como volante ofensivo. Realizó sus divisiones menores en el Deportivo Cali y también tuvo un corto paso por el balompié uruguayo (Nacional)
"Yo era hincha del Cali, y quería debutar allá; pero cuando uno va creciendo se va dando cuenta cómo son las cosas, y no se pudo por X o Y motivo. Ahora soy americano a morir", indicó 'el Rifle' junior.
Su padre le recalca que "tengo que tener más actitud y movilidad, y ya siento que he mejorado mucho. También me dice que practique mucho el tiro libre, y ahora que ya subí lo voy a practicar. En las inferiores pateaba bien. Tengo que insistir para volverle a coger el tiro".
Por su parte, Adolfo, además de querer ser testigo de la consagración de su hijo también desea que mantenga el sobrenombre que lo hizo singular en el balompié nacional.
"Quiero que sigan recordando al 'Rifle'. Que no le digan ni el 'riflecito', ni 'escopeta', ni 'misil'. Dios quiera que salga mejor que yo; aunque es muy difícil (risas). También hay que considerar que hoy en día la preparación es más difícil que antes. Antes uno jugaba sabroso, libre; hoy en día hay que correr y saber pararse", comentó Adolfo.
Andrés Andrade es una de las alternativas que tendrá Diego Edison Umaña para el torneo Finalización con América. El jugador ya ha demostrado sus buenas condiciones, en algunos compromisos amistosos y en la Copa Postobón.
"Cuando llegué de Uruguay, donde me ayudaron a fortalecerme físicamente, mis papeles todavía eran del Cali, y ellos no me los querían dar. Entonces, a mi papá le tocó presionar. Luego, mi papá habló con el profe Umaña. Empecé en la Copa Postobón y ahora gracias a Dios me ha dado la oportunidad acá arriba. El profe me dice que cuando juegue por fuera colabore más en la marca", detalló Andrade, hijo.
Héctor Fabio Gruesso
Especial para FUTBOLRED