Por ahí dicen que los borrachos y los niños siempre dicen la verdad… o al menos la hacen mucho más interesante. Ese es el fin de Drunk History, programa de Comedy Central que hoy tiene tres versiones: la de EE.UU., la del Reino Unido, y la recientemente estrenada versión para México y Colombia.
Tengo que confesarles que no pensé que algo tan loco y que pueda parecer hasta estúpido en un inici, termine siendo algo tan GENIAL. Arranquemos por los antecedentes.
El programa nació gracias a una sección creada por Derek Waters para Funny Or Die, es decir, arrancó siendo una serie web. Comedy Central vio la enorme respuesta online y decidió producir el contenido para la televisión, sumando un buen presupuesto y, claro, grandes participaciones de reconocidos actores, músicos y cómicos.
El concepto es simple pero a la vez brillante. En el caso de la versión para los Estados Unidos, Derek Waters recorre el país y sale de fiesta en cada ciudad. Ahí literalmente ‘ahoga’ en alcohol al que será el responsable de contar la historia que será recreada por famosas personalidades; y normalmente el que cuenta la historia es un comediante local. Cada relato es sobre un acontecimiento notable de la ciudad donde transcurre el capítulo (por ejemplo, en Atlanta el programa fue sobre Martin Luther King y la Coca-Cola, ya que el activista y el refresco nacieron en esta ciudad). Son tres historias por episodio.
El otro día leía una crítica de René Franco para el Periódico Milenio de México, criticando el programa en su versión local por emborrachar demasiado a los que cuentan la historia y por exponerlos demasiado. René querido: ¡ese es el punto! 😛
El chiste es que los conductores luchen por controlar los efectos del alcohol a medida que cuentan una historia que finalmente es sincera y completamente desde el punto de vista del relator. Y sí, no hay censura. Si los borrachos en cuestión eructan, vomitan o se pierden en medio de la historia… es culpa del chupe.
El resultado es que las historias son recreadas por otros actores, doblando cada diálogo o cita que es dada por el relator ebrio en cuestión. ¿Cómo no se nos ocurrió ver algo así antes?
Las historias terminan siendo disparatadas, pero sí, fue lo que pasó hace muchos años (aunque claro, muchos diálogos son modificados por culpa de la cerveza, el mezcal o la cuba).
En cuanto a la versión de México es exactamente lo mismo, pero sin un host. Van directamente con los invitados que son debidamente embotellados por la producción del programa antes de contar sus versiones de varios momentos de nuestros personajes de la historia latinoamericana: Frida y Diego, El Che Guevara, El florero de Llorente, La espada de Bolívar… entre otros acontecimientos memorables.
Entiendo que NO es un concepto fácil, y simplemente lo amas o lo odias, pero siempre es bueno darle una oportunidad a una propuesta diferente y que está para lo que debe ser: Divertir, nada más que eso. Y lo mejor, a ti no te tocará sufrir la ‘cruda’ del día siguiente 🙂
Puedes ver los capítulos completos de Drunk History a través de la aplicación Comedy Central Play. Denle una oportunidad, y brinden por ello… de Hidalgo.
¡Salud!
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