El hermano oculto del mafioso Al Capone: un sheriff fanático de la Ley Seca que se vestía de vaquero

El hermano oculto del mafioso Al Capone: un sheriff fanático de la Ley Seca que se vestía de vaquero

Vincenzo, el hermano mayor y católico, acabó siendo conocido como Richard Hart «Dos Pistolas», un temerario enemigo de la venta de licor en Nebraska que se presentaba como un fervoroso protestante. Le gustaba vestir de vaquero y sobre todo calzar botas con los dos corazones de su firma en ellas

Fotografía de Al Capone, el mafioso más mediático de la historia MPI/Getty Images)
César Cervera

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Alphonse Capone es un conocido muy desconocido. La historia del gángster más famoso de la historia está erosionada por datos exagerados, mentiras de la prensa más sensacionales y las grotescas representaciones que se han hecho del capo en el cine. Sin ir más lejos, los diarios del periodo le atribuyeron 600 asesinatos , pese a que las autoridades solo pudieron relacionarle con dos y, en cualquier caso, terminó encarcelado únicamente por delitos fiscales.

Consciente de la desinformación que rodea a Capone, Deirdre Bair acaba de publicar el libro « Al Capone Su vida, su legado y su leyenda » (Anagrama) para desmitificar las exageraciones más burdas y recorrer su vida a través de los testimonios de los descendientes aún vivos del capo. Un ejercicio que saca a la luz uno de los episodios más desconcertantes que vivió la familia Capone: la desaparición y reaparición de Vincenzo, el hermano mayor, que acabó siendo conocido como Richard Hart «Dos Pistolas» , un temerario enemigo de la venta de licor en Nebraska durante la Ley Seca . Le gustaba vestir de vaquero y sobre todo calzar botas con los dos corazones de su firma en ellas.

Una fuga de película

Antes de llamarse Richard Hart , el italiano había sido nada menos que el hermano mayor de la familia Capone. Con tres años, Vicenzo llegó a EE.UU. procedente de Nápoles junto a sus padres y su hermano menor Rafaele, de 17 meses. En Nueva York nacieron el resto de hijos, hasta seis, entre ellos Alphonse Capone , y todos adoptaron nombres americanizados. Vicenzo se hizo llamar Jimmy y creció fascinado por las cintas de vaqueros, sobre todo de aquellas películas protagonizadas por su héroe William S. Hart , actor, guionista y productor de cine mudo. Muy lejos de las Grandes Llanuras, se contentaba con ir a Coney Island a pasear junto a las cuadras de caballo que, dado la economía familiar, no se podía permitir.

Fotografía del actor William S. Hart Biblioteca del Congreso

Sin el liderazgo de sus hermanos y el talento para los números de Al, Vicenzo empezó a distanciarse de su familia cuando le alcanzó la adolescencia. Contribuía a la economía doméstica con trabajos de poca monta en granjas y cuadras de Staten Island , hasta que decidió cabalgar hacia el Oeste. En 1905 se fugó del domicilio familiar, con 13 años, para ir a Hollywood a protagonizar películas del Salvaje Oeste , pero no llegó tan lejos...

La familia no supo nada de él en 30 años. En ese tiempo, el imperio criminal de Al Capone tuvo tiempo de alcanzar su cima durante la Ley Seca y también de caer. En 1931, el mafioso más popular de su tiempo fue declarado culpable de evadir impuestos y sentenciado a 11 años de prisión. La irregularidades del proceso y la arbitraria decisión de enviarle a Alcatraz, en agosto de 1934, a pesar de que su condena no incluía delitos de sangre, enturbiaron un juicio que los ciudadanos honrados de Chicago aplaudieron como una gran victoria.

Estando en Alcatraz , Capone empezó a mostrar avanzados signos de demencia a causa de la sífilis, que los médicos de la penitenciaría no supieron tratar correctamente. Pasó gran parte de sus últimos años de reclusión en el hospital de la prisión y finalmente fue liberado el 16 de noviembre de 1939.

La forja de Richard Hart «Dos Pistolas»

La familia celebraba el retorno a casa de Al, cuando el otro hermano pródigo se dignó a volver con el mismo estrépito con la que se fue. En 1940, Vicenzo volvió y contó a los suyos qué había estado haciendo durante estos años, con tantas penalidades como alegrías. Según su relato, cuando se fugó de Nueva York se dirigió en tren hacia Hollywood y, tras parar la locomotora en Homer, Nebraska , para recoger carbón, decidió que el lugar cumplía con parte de su sueño vaquero.

Como explica Deirdre Bair en el mencionado libro, algunos descendientes de Vicenzo apuntan que la elección de Nebraska obedeció a su admiración por el general «Black Jack» Pershing (creía que era de este estado, aunque en verdad era de Missouri). Esta suposición se basa en la afirmación, sin demostración documental, de que el mayor de los Capone sirvió en la Primera Guerra Mundial y aprendió allí a admirar a aquel monumento del Ejército de los EE.UU.

El caso es que Vicenzo se quedó más tiempo de lo previsto en Homer, donde se hizo llamar Richard Hart. Se casó con una muchacha del lugar, Kathleen Winch , hija de un tendero, después de que, junto a otros, la salvara durante una inundación. Con ella tuvo cuatro hijos y vivió su propio wéstern. Le gustaba llevar sombrero de ala ancha, un cinto con dos revólveres y botas camperas hechas a mano con la grabación de dos corazones.

Su trabajo como supervisor de la Oficina de Asuntos Indios en estados occidentales justificó que un «espagueti» de Nueva York se vistiera de aquella guisa. Era bien recibido por los nativos gracias a su conocimiento de varios idiomas indios y su trato cordial. No obstante, se granjeó cierto nombre no por defender a los indios, sino como espada de aquellos que incumplían la ley seca en las reservas. En esta cruzada, no dudó en actuar con brutalidad y como un fiscal caprichoso y corrupto.

Agentes del gobierno en el acto de confiscar y desechar bebidas clandestinas (Chicago, 1921).

Cuando rompió relaciones con la Oficina de Asuntos Indios , Richard Hart «Dos Pistolas» fue nombrado sheriff local en Homer. Aquí siguió vistiendo igual, actuando con la misma rigurosidad contra las destilerías ilegales. Su buen nombre quedó manchado solo por las acusaciones de que robaba comida en tiendas locales valiéndose de la llave maestra que todo sheriff tenía de los establecimientos de la población. En medio de la Gran Depresión , Hart habría recurrido a estos robos cuando el hambre aporreó la choza en la que malvivía su familia junto al río, donde pescaban para llevarse algo a la boca.

Su buen nombre quedó manchado por las acusaciones de que robaba comida en tiendas locales valiéndose de la llave maestra

Las acusaciones contra Richard Hart no se pudieron probar, pero justo en esas fechas Vincenzo viajó a reencontrarse con sus familiares, repartidos entre Miami y Chicago , huyendo de la indigencia. Todos se alegraron de su retorno, incluida su madre, que aún vivía, a excepción de Mafalda, que siempre le guardó rencor por su apoyo a la Prohibición . Al Capone también seguía vivo en aquellas fechas, pero su edad mental balanceaba entre los siete y los quince años según el día. Celebró tener otro hermano al que abrazar, pero apenas fue consciente de quién era a causa de la neurosífilis.

Se fue vaquero y regresó italiano

Ralph Capone, la nueva cabeza de familia, tardó algo más en creerse que aquel vaquero fuera su hermano mayor desaparecido. Desde la encarcelación y demencia de Al, el rudo Ralph cargaba con la responsabilidad de traer nuevos ingresos a la familia y de arrancar algo de dinero de la Organización que su hermano había levantado en Chicago. No obstante, cuando al fin se convenció de que sí era el hermano desaparecido hace 30 años se encargó de sacar a la familia Vincenzo de la indigencia. De vuelta a Homer, sus vecinos quedaron asombrados al ver sus caros trajes y el fajo de billetes que le acompañaban siempre, tanto como su familia, protestantes conservadores del Medio Oeste, al descubrir su verdadera identidad de católico italiano.

Teresa, madre de los Capone, con el pequeño Al

Richard Hart «Dos Pistolas» se fue disfrazado de vaquero y volvió a casa vestido de gángster. Aunque muchos amigos y familiares le dieron momentáneamente la espalda, agradecieron que Hart hubiera logrado traer algo de dinero a casa. Ralph ayudó a su familiar desaparecido, pero no dudó en usarlo para sus chanchullos. Investigado de nuevo por la Agencia Tributaria a principios de 1951, el gánster pidió al antiguo sheriff que declarara bajo juramento que el comprador y vendedor de una de las empresas de Ralph había sido él, a pesar de que la transacción había tenido lugar mucho antes de su reaparición.

Dos Pistolas mantuvo en una declaración de casi cinco horas ante un gran jurado que había comprado la empresa con un dinero que le había dado su madre. Afortunadamente para los Capone, la investigación no fue más lejos. Aquello no hubiera sido difícil de desmontar

Por entonces, Vincenzo sufría diabetes y estaba tan gordo que no podía ya montar a caballo o caminar cuando acudió a Chicago a declarar. Su mujer y él aparentaba más años de los que tenía en realidad. Solo un año después del juicio, en octubre de 1952, murió a los 60 años debido a un paro cardiaco .

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación