La Mejor película de Penn Badgley
Penn Badgley ha sido un rostro familiar en la pantalla, ofreciendo diversas actuaciones que van desde la comedia romántica hasta el thriller psicológico. Su capacidad para sumergirse en distintos personajes ha resonado en la audiencia a lo largo de los años. Sería injusto no reconocer su aportación a la industria, especialmente en las siguientes películas que marcaron su carrera.
3. The Stepfather (2009)
En este thriller que revoluciona el concepto de familia, Penn Badgley interpreta a Michael Harding, un adolescente que regresa a casa después de estar en la escuela militar y se encuentra con que su madre tiene un nuevo novio, David Harris (interpretado por Dylan Walsh). La película explora la desconfianza y el suspenso que nace cuando Michael comienza a sospechar que David tiene un pasado oscuro y peligroso. La intensidad del personaje de Badgley y su confrontación con la realidad aporta un elemento fundamental a esta tensa trama.
2. Easy A (2010)
Easy A nos brinda una refrescante versión de la comedia adolescente con un giro contemporáneo inspirado en «La Letra Escarlata». Badgley da vida a Woodchuck Todd, el interés amoroso del personaje de Emma Stone, Olive Penderghast. Su actuación, imbuida de un encanto natural y sutil humor, realza una historia que no solo entretiene, sino que también ofrece una crítica social sobre la reputación y los rumores en la era digital. La química en pantalla entre Badgley y Stone, así como la sátira inteligente que ofrece la película, convierten a Easy A en una pieza importante dentro de su filmografía.
1. Margin Call (2011)
Ubicada en el apogeo de la crisis financiera de 2008, Margin Call destaca no solo por su enfoque en un tema tan intrincado y relevante, sino también por el impresionante elenco que logra dar vida a este escenario caótico. Penn Badgley es parte de este conjunto estelar, tomado el papel de un joven analista de riesgos. A pesar de la presencia de pesos pesados como Kevin Spacey y Jeremy Irons, Badgley, en el rol de Seth Bregman, consigue transmitir la inminente amenaza de colapso económico con una actuación que combina la inocencia y la angustia palpable, de un empleado de bajo nivel ante la magnitud de la crisis.
Es esta capacidad de sostener su propia presencia en una narrativa intensa y llena de tensiones lo que eleva Margin Call al número uno en nuestra lista. La película no solo es un despliegue del talento dramático de Badgley, sino que también es un testimonio de su versatilidad y la capacidad de desempeñar papeles complejos en producciones de alto calibre.
