Una recopilación de frases de uno de los filósofos y economistas más influyentes de la historia; Karl Marx
Karl Marx fue un escritor, economista y filósofo alemán, especialmente conocido por ser el ideólogo del comunismo y por su lucha contra el capitalismo. Junto a Friedrich Engels escribió el Manifiesto del Partido Comunista, donde defendía la ideología de los comunistas.
Las ideas de Marx han tenido una gran influencia en países como Cuba y China, y en la ya desaparecida Unión Soviética, además de en los principios de los partidos políticos cuyas ideas se acercan más al socialismo y al comunismo.
Las mejores frases de Marx
En esta lista de frases de Marx podrás observar sus ideas sobre la economía, sobre las relaciones, sus teorías, las clases sociales, el dinero, la educación, entre otros temas. Están tomadas de sus obras, especialmente del Manifiesto comunista y de El capital.
La producción de demasiadas cosas útiles deviene en demasiadas personas inútiles.
El sistema capitalista intenta crear una condición de necesidad en las personas, haciendo que quieran comprar todo el tiempo cosas que no necesitan.
Dale un pescado a un hombre y él comerá por un día. Enséñale a pescar y arruinarás una gran oportunidad de negocio.
Marx explica la función del capitalismo, el cual, en vez de ayudar a las personas, hace que estas sigan necesitando de su asistencia para seguir viviendo.
La historia de la sociedad, hasta ahora, es la historia de las luchas de clase.
En toda la historia de la humanidad, siempre unos grupos han luchado con otros grupos de personas para obtener mejores condiciones de vida.
La ignorancia aún no ha ayudado a nadie.
Siempre debemos prepararnos y conocer más sobre lo que nos interesa.
Las ideas predominantes de cada época han sido siempre las ideas de las clases dominantes.
Los que comandan los destinos del mundo son siempre las personas que tienen mayor poder, y estos siempre piensan en su beneficio personal antes del beneficio del pueblo.
La teoría del comunismo se puede resumir en una simple frase: Abolición de la propiedad privada.
La principal tarea del comunismo era la de repartir las tierras de forma equitativa entre todos los habitantes de una sociedad, para que todos contaran con las mismas oportunidades.
Soy una máquina condenada a devorar libros.
Marx se consideraba a sí mismo como un asiduo lector.
La religión es el opio del pueblo.
La religión adormece a los más carenciados haciendo que se reconforten en sus palabras en vez de salir a luchar por sus derechos.
Como los individuos expresan su vida, así son.
Las personas son como aparentan ser.
El progreso social puede ser medido en la posición social del sexo femenino.
Las sociedades más avanzadas no hacen diferencias entre hombres y mujeres, todos tienen las mismas oportunidades.
El hombre crea su propia historia, pero no la hace con toda la tela; no la hace con las condiciones que él elige, sino con las que pueda encontrar.
La calidad de vida de una persona se encuentra condicionada por las condiciones y oportunidades que le brinda el entorno donde vive.
La sociedad como un todo, se está dividiendo cada vez más en dos grandes campos hostiles.
La brecha entre ricos y pobres es cada vez más pronunciada.
Rodéate de las personas que te hagan feliz, de las que te hagan reír y te ayuden cuando lo necesites.
Debemos elegir cuidadosamente a nuestros amigos, ya que son lo más importante que hay en nuestra vida.
La razón siempre ha existido, pero no siempre de una forma razonable.
Todos los hechos tienen una razón de fondo, aunque no siempre sea una que entendamos.
El primer requisito para la felicidad de las personas es la abolición de la religión.
Para Marx, la religión solo les causaba penas a las personas, ya que las hacía vivir bajo la presión de ser castigados al comportarse equivocadamente.
Los hombres forjan su propia historia, pero no como la desean.
Las vidas de las personas no son totalmente como éstas desearían que fueran, sino como les es posible hacerlas.
Dejemos que las clases dominantes tiemblen ante una revolución comunista.
La idea de Marx era que el proletariado, la clase trabajadora, se haga con el poder y gobierne de manera más justa para todos.
Para nosotros el problema no puede ser la alteración de la propiedad privada, sino su aniquilación.
La idea del comunismo era que nadie sea dueño de nada, solo el estado poseía y repartía las tierras.
Mientras que el avaro es simplemente un capitalista enloquecido, el capitalista es un avaro racional.
El capitalismo promulga la acumulación de bienes solo por el hecho de poseer más que los demás.
Cuando se le ponga fin a la explotación de un individuo por otro, también se pondrá fin a la explotación de una nación por otra.
La idea del comunismo es la de crear un mundo en el que todas las personas tengan las mismas oportunidades y no sean oprimidas por otras.
La abundancia de buenos amigos no lleva a una mejor filosofía.
Las conversaciones y discusiones con personas que piensan distinto a nosotros son las que más nos enriquecen intelectualmente, ya que nos muestran distintos puntos de vista que nosotros no contemplamos.
Los filósofos han interpretado al mundo desde ciertos puntos de vista. Sin embargo, el punto es cambiarlo.
Además de entender al mundo, el trabajo de un filósofo es mejorarlo.
El proletariado no tiene nada que perder, más que sus cadenas. Ellos tienen un mundo por conquistar.
La revolución comunista instaba a las clases trabajadoras a soltarse de sus cadenas y quitarle el poder a aquellos que los esclavizaban.
Las últimas palabras son para los tontos que no han dicho suficiente.
Nunca debemos dejar cosas sin decir.
No es la conciencia del hombre la que determina su ser, sino, por el contrario, su ser social determina su conciencia.
La sociedad en que vivimos nos transforma y convierte en lo que somos como individuos.
La religión es la impotencia de la mente humana para lidiar con las ocurrencias que no puede comprender.
Los humanos utilizan a la religión para dar respuesta a las preguntas que no les encontramos ninguna.
Si algo es cierto, es que yo no soy marxista. (Escrito en una carta sobre el particular marxismo surgido en Francia en 1882)
Marx no compartía la forma en la que querían implantar sus ideas los líderes del Partido de los Trabajadores Francés.
En pocas palabras, tú nos reprochas que intentemos deshacernos de tu propiedad. Efectivamente, eso es exactamente lo que pretendemos.
Una de las ideas de Marx era la del reparto igualitario de tierras, ya que una pequeña porción de la sociedad era dueña de gran parte de las tierras, dejando casi sin nada a la mayor parte de la población.
El trabajo cuya piel es blanca nunca puede ser liberado allí donde se estigmatiza el trabajo de piel negra.
Marx era un defensor de la abolición de la esclavitud y la igualdad de las personas.
El incremento en el valor del mundo de las cosas es directamente proporcional al decremento en el valor del mundo humano.
Mientras más caras sean las cosas, menos calidad tendrá la vida de las personas.
Llamamos al comunismo como el movimiento real que suprime el presente estado de las cosas.
Marx veía al comunismo como un movimiento mundial que mejoraría las condiciones de vida del proletariado y los oprimidos.
La educación de todos los niños, desde el momento en que puedan vivir sin el cuidado de sus madres, será hecha en instituciones del estado.
Todos los niños, sin excepción, deben recibir el mismo tipo de educación de calidad.
El capital es como un trabajo muerto, el cual vive como un vampiro, succionando trabajo vivo, y mientras más vive, más trabajo succiona.
El capitalismo necesita ir creando nuevos trabajos para ir creciendo y mantenerse con vida, pero siempre empeorando las condiciones de los trabajadores y consumiendo más recursos.
El comunismo no priva a nadie del poder de apropiarse de los productos de la sociedad. Los priva del poder de subyugar el trabajo de otros mediante tal apropiación.
El comunismo intentaba proteger a los trabajadores para que no sean sometidos por sus empleadores, sino que reciban un salario digno.
La sociedad no está formada por individuos, sino que expresa la suma de interrelaciones; las relaciones dentro de las cuales se encuentran estos individuos.
Las sociedades son el reflejo de las relaciones que existen entre sus integrantes, no de los integrantes por sí solos.
El dinero es la esencia alineada del trabajo y la vida del hombre, y esta esencia extraña lo domina mientras lo adora.
El hombre pierde la esencia de lo que es cuando se obsesiona con el dinero.
Ser radical es agarrar las cosas de raíz. Para los hombres, sin embargo, la raíz es el hombre mismo.
El verdadero cambio en la humanidad se dará cuando el hombre modifique su forma de pensar y actuar.
¡Las clases trabajadoras de todos los países unidas!
El manifiesto comunista instaba a todos los trabajadores a unirse a la lucha contra la clase gobernante que los oprimía.
¡Acumula, acumula! ¡Este es Moisés y los profetas!
Crítica de Marx al capitalismo que hace que las personas guarden más de lo que necesitan para vivir.
La necesidad es ciega hasta que se vuelve consciente. La libertad es la conciencia de la necesidad.
Las personas libres son las que pueden conocer verdaderamente sus necesidades.
Es bien sabido como los monjes escribieron las tontas vidas de los santos católicos sobre los manuscritos donde se habían escrito las obras clásicas del antiguo paganismo.
La iglesia católica intentó destruir todo tipo de evidencia y recuerdo de las antiguas creencias de los pueblos.
La libertad de educación se disfrutará en las condiciones fijadas por la ley y bajo el control supremo del Estado.
Marx creía que todas las personas debían tener acceso gratuito a la educación, y que los contenidos que ésta dictara debían ser controlados por el Estado.
Debes darte cuenta de que la recompensa por el trabajo y la cantidad de trabajo son cosas desparejas.
Los salarios no representan la cantidad de esfuerzo que realizan los trabajadores, y no les alcanzan para vivir dignamente.
Bajo ningún pretexto deben entregarse las armas y las municiones; se debe frustrar cualquier intento por desarmar a los trabajadores.
Marx creía en la lucha armada de los trabajadores para llevar adelante la revolución.
El poder político, llamado propiamente, no es más que el poder organizado de una clase que oprime a otra.
La clase gobernante de las sociedades solamente piensa en sus propios beneficios, obteniéndolos a costa del sacrificio de la clase trabajadora.
El comunismo es el enigma de la historia resuelto, y sabe que es la solución.
Marx creía que el comunismo brindaba una mejor vida a todas las personas, con mayor igualdad y más oportunidades de desarrollarse.
Así como el hombre es gobernado en la religión por el producto de su propio cerebro, es gobernado por la producción capitalista por el producto de sus manos.
Las personas son esclavas de sus propias creaciones, de lo que ellos mismos construyen, dentro del sistema capitalista.
El lenguaje, como la conciencia, solo aparece cuando surge la necesidad de interactuar con otra persona.
Los seres humanos desarrollamos el lenguaje para poder comunicar nuestras necesidades a las demás personas.
La tradición de todas las generaciones muertas pesa como una pesadilla en el cerebro de los vivos.
Muchas veces, seguimos haciendo las cosas de cierta manera porque siempre se han hecho así, y no somos capaces de buscar una mejora para ello.
Las diferencias meramente cuantitativas, después de cierto punto, pasan a ser cambios cualitativos.
Algunas diferencias de valores significan grandes cambios en la calidad de algo, como puede ser el incremento de la cantidad de habitantes, puede disminuir la calidad de vida de los mismos.
En la historia como en la naturaleza, el deterioro es el laboratorio de la vida.
Debemos aprender de las cosas que nos han pasado en el pasado, para poder mejorarlas en el futuro.
La exigencia de abandonar la ilusión sobre su condición, es la exigencia por abandonar la condición que necesita ilusión.
Los grandes poderes no quieren que las personas piensen que pueden vivir mejor de lo que lo hacen, para que estas no se revelen ante ellos y las puedan seguir oprimiendo.
Toda ciencia sería innecesaria si la apariencia exterior y la esencia de las cosas coincidieran.
La ciencia es la que se encarga de descubrir los misterios de las cosas que no comprendemos.
Ateísmo… me recuerda a los niños, asegurándole a todo el que esté listo para oírlos que no le temen al hombre del saco.
Las personas que no creen en la religión no viven con el miedo a ser castigados que esta impone a sus fieles.
Yo recibo toda opinión basada en críticas científicas.
Para discutir debemos tener fundamentos válidos, no conjeturas y especulaciones.
La estructura económica de la sociedad capitalista ha crecido de la estructura económica del feudalismo; la disolución de este, sentó las bases del anterior.
El capitalismo es una variación del feudalismo, la cual sigue esclavizando a las personas.
Los salarios son consecuencia directa del trabajo no deseado, y el trabajo no deseado es la causa directa de la propiedad privada.
A la gente se le paga por hacer trabajos que no desean, y estos trabajos le dan muchas ganancias a las personas que los dirigen, haciendo que sean cada vez más poderosos.
Lo sólido se derrite en el aire, lo sagrado es profano, y el hombre al fin se ve obligado a afrontar con sensatez sus condiciones reales de vida y sus relaciones con los de su especie.
Lo más importante en la vida es tener buenas relaciones con las personas que nos rodean. Lo material y lo religioso es efímero.
La verdadera ley de la economía es el azar, y hemos aprendido que la gente aprovecha arbitrariamente unos momentos y los establece como leyes.
Las leyes de la economía se van formando con los movimientos económicos que se dan en el mundo, y están basadas en estos.
La maquinaria que no es utilizada no es capital.
Las máquinas que no son utilizadas en la producción de algo, no forman parte del capital.
Toda emancipación es una restauración del mundo humano y de las relaciones humanas entre las personas.
Cuando las personas logran liberarse de la opresión que sufren, mejora su calidad de vida, la de su entorno y las relaciones entre ellas.
La centralización de los medios de producción y la socialización del trabajo finalmente llegan a un punto en el que se vuelven incompatibles con su tejido capitalista.
El capitalismo, al crear una fuerza de trabajadores cada vez más grande y más organizada, finalmente se verá derrocada por los propios obreros que solicitan mejores condiciones y oportunidades.
Nadie, ni siquiera un músico del futuro, puede vivir de productos futuros.
Las cosas se necesitan en el presente, de nada sirven las promesas a cumplir.
Todos los misterios cuya teoría principal es llevada al misticismo, encuentran su respuesta racional en la práctica humana y en la comprensión de dicha práctica.
Todo tiene una explicación lógica y racional, nada ocurre mágicamente.
Un espectro acecha a Europa, el espectro del comunismo.
Marx veía que sus ideas cada vez cobraban mayor notoriedad en el viejo continente, y se hacían cada vez más fuertes.
Una sociedad completa, una nación, o todas las sociedades juntas, no son las dueñas del planeta. Solo son sus poseedores, sus beneficiarios, y deben dejarlo en mejores condiciones para las futuras generaciones.
Los seres humanos no somos los dueños del mundo, es por eso que debemos cuidarlo y proteger sus recursos para las generaciones que vendrán.
La filosofía y el estudio del mundo real tienen la misma relación que la masturbación y el sexo.
Para Marx, la filosofía era superficial y no cumplía con el objetivo de ayudar a las personas.
El arma de la crítica, obviamente, no reemplaza la crítica de las armas. Las fuerzas materiales deben ser derrocadas por fuerzas materiales.
Los verdaderos cambios no se logran hasta que no se pelea físicamente por ellos.
Cualquiera que sepa algo sobre historia, también sabe que las grandes revoluciones sociales son imposibles de lograr sin el fermento femenino.
Las mujeres siempre han sido parte importante de todas las revoluciones en la historia de la humanidad, por más que se trate de disminuir su participación.
Solamente en comunidad con otros, cada individuo tiene los medios de cultivar sus dones en cualquier dirección.
La contención que brinda la vida en comunidad hace que las personas sean libres de desarrollar las habilidades que más le satisfagan hacer.
Todas nuestras relaciones con la naturaleza y los hombres deben ser una expresión definida de nuestra vida real e individual.
Siempre debemos ser sinceros y mostrarnos tal cual somos, sin segundas intenciones ocultas.
Mi método dialéctico no solo es diferente del Hegeliano, sino que es directamente opuesto.
Marx se diferenciaba de los pensamientos de Hegel.
El último capitalista que colguemos debe ser el mismo que nos vendió la soga.
Marx no creía en el capitalismo y se oponía fervientemente a sus ideas.
Lo que determina el valor de cada artículo es la cantidad de trabajo social necesario, o el tiempo de trabajo socialmente necesario para su producción.
El precio de los artículos se encuentra dado por la cantidad de tiempo utilizado para su elaboración.
El molino de viento te da una sociedad feudal; el molino a vapor te da una sociedad capitalista industrial.
Marx trazaba un paralelismo entre la sociedad feudal y la capitalista. Creía que ninguna de las dos beneficiaba al pueblo.
Esta clase siempre tendrá que sacrificar una parte de sí misma para no ser destruida.
El capitalismo hace que una parte de la sociedad no sea tenida en cuenta y sea relegada, para que las altas esferas puedan vivir bien.
Para el capitalista, todo lujo del trabajador lo encuentra reprobable.
El capitalismo no se interesa por el bienestar de la clase obrera y no cree que ésta merezca tener lujos.
Desde el punto de vista de una sociedad con una forma económica superior, la propiedad privada del mundo por algunos individuos es tan absurda como la propiedad privada de un hombre sobre otro hombre.
El planeta les pertenece a todos los seres humanos, y es absurdo que unas pocas personas sean las que aprovechen y saquen beneficios de sus frutos.
No se trata del mejoramiento de la sociedad existente, sino de la fundación de una nueva sociedad.
Las ideas del comunismo pretendían crear una nueva sociedad, más justa e igualitaria para todos, sin diferenciación de clases sociales.
Como valores de cambio, todos los productos son simplemente cantidades definidas de tiempo de trabajo.
Cada producto se valoriza por la cantidad de tiempo invertido para construirlo.
La teoría puede volverse una fuerza material una vez que se ha apoderado de las masas.
Cuando las masas apoyan fuertemente una idea y luchan por ella, esto es más poderoso que cualquier arma.
La mitología domina y da forma a las fuerzas de la naturaleza a través de la imaginación; por lo tanto, desaparece cuando el hombre domina las fuerzas de la naturaleza.
Las religiones dan respuestas místicas a las situaciones que no llegan a ser comprendidas por el hombre; pero cuando este las devela, se da cuenta de que tenían explicación lógica.
La alineación del hombre apareció como el mal fundamental de la sociedad capitalista.
El capitalismo desmotiva y teme la unión de la clase trabajadora porque sabe que puede cambiar las cosas como están.
Son mis esclavos (refiriéndose a los libros y papeles) y deben servirme como a mí me plazca.
Debemos utilizar la lectura para ampliar nuestros conocimientos sobre las cosas.
El modo de producción de la vida materialista condiciona el proceso de la vida social, política e intelectual en general.
El sistema capitalista y su incentivación del materialismo, tiene influencias en el modo de pensar y razonar de las personas.
Lo que el trabajador vende no es directamente su trabajo, sino su fuerza de trabajo, cuya disposición temporal cede al capitalista.
Los trabajadores no venden un producto terminado, sino su tiempo y su fuerza para que la disponga como desee su empleador.
Ten a tu lado a personas que realmente se preocupen por ti, ellas son las que vale la pena que se queden a tu lado. El resto solo están de paso.
Siempre debemos cuidar nuestras amistades y dejar ir a esas personas que no se interesan realmente por nosotros.
Si trabaja únicamente para sí mismo, podrá convertirse en un erudito famoso, un sabio, un gran poeta, pero nunca será un hombre realmente grande.
El trabajo en equipo y la colaboración con los demás es lo que nos hace ser mejores personas.
Todos deberían poder atender sus necesidades religiosas y corporales sin que la policía se entrometa.
La vida privada de las personas no tiene por qué ser juzgada. Cada uno debe ser libre de hacer lo que sienta.
Sí, señores, la comuna intentaba abolir esa propiedad de clase que hace del trabajo de muchos la riqueza de pocos.
La Comuna de París fue un breve gobierno de la clase obrera francesa que intentó mejorar las pobres condiciones de los trabajadores, y desconcentrar las ganancias de la producción.
La clase trabajadora no tiene nación. No podemos arrebatarles algo que no tienen.
La toma de poder del comunismo no intentaba quitarle nada a los trabajadores, al contrario, intentaba ayudarle.
El conocimiento ensancha y multiplica nuestros deseos, y menos desea un hombre, más fácil sus necesidades son satisfechas.
Las clases sociales dominantes no quieren que las demás clases estudien, ya que pueden darse cuenta del sometimiento en el que viven y volverse en su contra.
El gobierno solo escucha su propia voz.
Los gobernantes únicamente escuchan a las clases poderosas, y no prestan atención al pueblo y sus necesidades.
No hay un camino real en la ciencia, y solo aquellos que no se atemorizan por la fatigante subida de sus senderos empinados tienen la oportunidad de obtener sus luminosas cumbres.
Para obtener avances científicos, el recorrido es muy largo y bastante complicado, pero al obtenerlos, la satisfacción es plena.
Empíricamente, el comunismo es posible solo como un acto de los pueblos dominantes todos juntos y en simultáneo.
Para que el comunismo funcione, todas las personas del mundo deben actuar en conjunto bajo la misma idea.
Las condiciones de este movimiento son el resultado de las premisas que hoy existen.
El comunismo nace como respuesta al capitalismo, el cual denigra a las clases trabajadoras y las esclaviza.
Lo que la burguesía produce, sobre todo, son a sus propios enterradores. Su caída y la victoria del proletariado son igualmente inevitables.
Las malas condiciones laborales que la burguesía impone al proletariado hacen que éste finalmente se canse y se una para derrocarla.
La insurrección es un arte como la guerra o cualquier otro, y está sujeto a ciertas reglas de procedimiento que, si no se siguen, producen la ruina de los que lo intentan.
La rebelión debe ser bien planeada, o no será posible.
Una casa puede ser grande o pequeña; mientras las casas circundantes sean iguales, esta logrará satisfacer las demandas sociales de una vivienda.
La igualdad de condiciones hace que las personas se contenten con lo que tienen y no envidien a otra gente por poseer más.