Psicología cognitiva y la importancia del enfoque cognitivo conductual

Explora las profundidades de la psicología cognitiva, desde sus principios y características, así como las razones por las cuales deberías conocer en qué ayuda el tratamiento cognitivo conductual.

¿Te has preguntado alguna vez cómo percibes el mundo que te rodea? ¿Cómo aprendes, recuerdas y tomas decisiones? La psicología cognitiva permite adentrarse en un fascinante viaje para desentrañar los enigmas del pensamiento humano, y descubrir cómo los procesos mentales moldean la realidad. Desde Latinoamérica, esta área del conocimiento ha ganado relevancia, adaptándose y respondiendo a los desafíos culturales y sociales específicos de la región.

Para entender el campo de acción de la psicología cognitiva hay que conocer el enfoque cognitivo conductual. Es una corriente psicológica que integra los principios de la psicología cognitiva y la psicología conductual. Se refiere a cómo los procesos cognitivos (pensamientos, emociones y recuerdos) interactúan con el comportamiento. Esto es fundamental para entender cómo los pensamientos y las creencias pueden afectar las acciones de los individuos, y cómo se pueden modificar esos patrones para mejorar su bienestar​, por medio de la terapia cognitivo conductual.

¿Qué es la psicología cognitiva?

Es una subdisciplina que se enfoca en estudiar cómo las personas procesan la información, resuelven problemas y desarrollan patrones de pensamiento. Su enfoque se centra en comprender los procesos mentales internos como la percepción, la memoria, el lenguaje y el razonamiento​. Así, la psicología cognitiva se dedica a entender cómo se desarrolla la capacidad para percibir, aprender, recordar, pensar y resolver problemas que manifiestan los individuos.

Si bien el término de psicología cognitiva se acuñó en la década de 1960 con la publicación del libro Cognitive Psychology de Ulric Neisser, sus raíces se remontan a varias figuras y escuelas de pensamiento que sentaron las bases para comprender el funcionamiento de la mente humana. Este es el caso de Wilhelm Wundt (1832-1920), fundador del primer laboratorio de psicología experimental, en donde comenzó a estudiar la conciencia y la percepción inmediata.

En Latinoamérica, la psicología cognitiva ha tenido un gran desarrollo en las últimas décadas, con importantes contribuciones de investigadores y profesionales de la región, como el experto en memoria y atención Eduardo Brickenmayer (Chile), la Investigadora en cognición social y toma de decisiones Alicia Pifano (Argentina), y el especialista en psicología del lenguaje y la comunicación José Antonio León (México). Además, se debe considerar a la pionera en el estudio del desarrollo cognitivo en niños Helena Chertkoff (Brasil).

Psicología cognitiva: características

Los principales rasgos de la psicología cognitiva incluyen el estudio del procesamiento de información, la atención selectiva, la formación y utilización de la memoria, así como la capacidad de resolver problemas y tomar decisiones. Esta rama considera que la conducta del ser humano es influenciada profundamente por estos procesos internos​. En este sentido, algunas de las características de la psicología cognitiva, son las siguientes:

• Énfasis en los procesos mentales. Se enfoca en cómo piensa, percibe, aprende y recuerda el ser humano, en lugar de solo observar las conductas.
• Enfoque científico. Emplea métodos científicos de investigación rigurosos para estudiar el funcionamiento de la mente humana.
• Considera la mente como un sistema activo. Reconoce que la mente no es un receptor pasivo de información, sino que participa activamente en su procesamiento.
• Relación con otras disciplinas. Integra conocimientos de diversas áreas como la neurociencia, la lingüística y la inteligencia artificial.

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Terapia cognitivo conductual: ¿de qué se trata?

La terapia cognitivo conductual es una manera de intervención o tipo de psicoterapia basada en el enfoque cognitivo conductual, la cual ayuda a las personas a identificar y cambiar pensamientos y comportamientos negativos o destructivos. De esta manera, y mediante técnicas específicas, los pacientes aprenden a desafiar sus patrones de pensamiento y a desarrollar respuestas más adaptativas y saludables​.

Este enfoque busca identificar y modificar las conductas disfuncionales que generan daños emocionales y psicológicos. La terapia cognitivo conductual ha demostrado ser eficaz para el tratamiento de una amplia gama de problemas de salud mental, incluyendo la ansiedad, la depresión, los trastornos de la alimentación, el trastorno obsesivo-compulsivo y el trastorno de estrés postraumático.

Ejemplos del tratamiento cognitivo conductual

Es importante destacar que la psicología cognitiva es una disciplina en constante evolución, con nuevos descubrimientos e ideas que surgen continuamente. Sin embargo, existen algunas situaciones en las que los psicólogos cognitivos conductuales han logrado obtener beneficios relevantes, como se muestra en los siguientes ejemplos: 

Reestructuración cognitiva

Permite identificar y modificar patrones de pensamiento negativos o distorsionados que contribuyen al malestar emocional. Para lograr un cambio, la persona debe cumplir con el procedimiento de la terapia de reestructuración cognitiva que implica la identificación de pensamientos automáticos, la evaluación de la realidad, el desarrollo de pensamientos alternativos y la internalización de esos nuevos pensamientos.

Por ejemplo, un paciente con ansiedad social que teme hablar en público manifiesta el pensamiento automático de "voy a tartamudear y todos se reirán de mí". La terapia ayuda a que comience a pensar en "es normal sentir un poco de nerviosismo al hablar en público. Puedo concentrarme en mi mensaje y utilizar técnicas de respiración para controlar la ansiedad". 

Exposición gradual

Ayuda a superar diversos miedos y fobias, a través de una exposición gradual y controlada al objeto o situación temida. La exposición gradual contempla la elaboración de una jerarquía de miedos, la exposición gradual a la situación menos temida, las técnicas de afrontamiento y la prevención de recaídas, por medio de estrategias para mantener los logros obtenidos y prevenir la reaparición del miedo.

Por ejemplo, un paciente con acrofobia (miedo a las alturas) debe observar fotos de alturas desde diferentes distancias, subir una escalera, visitar un mirador bajo o subir a un edificio de pocos pisos, para luego avanzar gradualmente. Para ello, debe practicar la respiración profunda y la relajación muscular durante la exposición para controlar la ansiedad. 

Resolución de problemas

Enseña a desarrollar habilidades para identificar, analizar y solucionar problemas efectivamente. De esta manera, la resolución de problemas es posible cumpliendo con la definición de la situación, la identificación de posibles soluciones y su evaluación, la selección de la mejor solución, la implementación del plan y la valuación de los resultados para reevaluar las opciones y realizar los cambios necesarios.

Por ejemplo, a un estudiante con dificultades para organizar su tiempo para estudiar se le enseña cómo crear un horario de estudio y utilizar herramientas de planificación, analizando las ventajas y desventajas de cada opción. Después, puede elegir la solución que considere más adecuada y poner en marcha el plan de acción. Luego, se analiza si el plan ha logrado mejorar la organización del tiempo de estudio. 

Técnicas de relajación

Utiliza métodos de reestructuración cognitiva para disminuir los síntomas y cambiar la forma de pensar sobre situaciones estresantes o de ansiedad. Para aplicar las técnicas de relajación es necesario conocer sobre la respiración profunda, la relajación muscular progresiva, la visualización guiada y la meditación para desarrollar la atención plena y la conciencia del presente.

Por ejemplo, un paciente con trastorno de ansiedad generalizada debe realizar respiraciones diafragmáticas profundas de 5 a 10 minutos, varias veces al día. Además, necesita tensar y relajar cada grupo muscular de 5 a 10 segundos, siguiendo una secuencia desde los pies hasta la cabeza. Mientras tanto, debe imaginar un lugar tranquilo, utilizando todos sus sentidos para crear una experiencia vívida y relajante.

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La psicología cognitiva ofrece herramientas esenciales para entender y mejorar la condición humana. Por ello, el enfoque cognitivo conductual ha demostrado ser eficaz para la atención de diversos problemas de salud mental. Es así como el tratamiento cognitivo conductual, es determinante porque ofrece una amplia gama de técnicas efectivas para abordar una variedad de situaciones psicológicas.

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