'Chinatown', la última obra maestra del cine negro
Skip to Content

'Chinatown' y las 10 razones que hacen de ella la última gran obra maestra del cine negro

"Déjalo Jake, es Chinatown" y otras 9 claves de la creación de una obra maestra del noir 45 años después.

Por
Chinatownpinterest
Movie Poster Image Art//Getty Images

Hace ya 45 años que se estrenaba en Estados Unidos ‘Chinatown’, la película con la que Roman Polanski sumaba una nueva obra maestra bajo la etiqueta de cine negro en unos años en los que este género estaba ya agonizante. De la misma forma que ‘El halcón maltés’ transformó el cine de gánsters de los años treinta en lo que los críticos franceses denominaron noir, el enorme éxito de ‘El padrino’, estrenada dos años antes, mostraría a Hollywood el nuevo camino a seguir en las películas de crimen, la mafia.

Jack Nicholson, Faye Dunaway y John Huston fueron las cabezas de un reparto estelar que dio vida al libreto original de Robert Towne, uno de los mejores guiones jamás escritos. Solo él se llevó el Oscar a casa de las once nominaciones que obtuvo la película. Las razones por las que ‘Chinatown’ es, sin lugar a dudas, una de las grandes películas de la historia del cine son muchas. Sin embargo, podemos resumir en diez puntos (y alguna que otra curiosidad) lo que hace que esta, en cierto modo, anacrónica película sigue tan viva hoy como seguirá siempre.

1

El último gran noir

Jack Nicholson y Polanski en Chinatown corte de nariz
Herbert Dorfman//Getty Images

Películas como ‘Puro vicio’ (Paul Thomas Anderson, 2014) o incluso el tributo referencial y kitsch que es ‘L. A. Confidential’ (Curtis Hanson, 1997) han logrado demostrar que el cine negro no es solo cosa del pasado. Sin embargo, como con el western, hablamos de un género tan codificado por clásicos sobradamente conocidos que ha tenido que reducir a mínimos su frecuencia, con tal de no repetirse en exceso.

Estrenada en 1974, ‘Chinatown’ es la última película capaz de articular las obligadas referencias al género dentro de un discurso propio, mirar a los clásicos convirtiéndose en uno. Ir más allá de sus referentes sin parodiarlos pero también sin diferenciarse radicalmente. La historia de un carismático detective metiendo sus narices en las conspiraciones del poder, topándose con una atrayente femme fatale que oculta más que muestra, y acabando en un amargo desenlace bien podría ser la sinopsis de todo clásico del género que se precie. Pero como en todas las buenas películas, a pesar de que en ‘Chinatown’ se respira mucho cine que huele a otras películas, es la suma de todos los elementos lo que la hace absolutamente única.

Publicidad - Sigue leyendo debajo
2

Roman Polanski, el director

Roman Polanski en 'Chinatown'
Photoshot//Getty Images

Aunque se ha repetido en numerosas ocasiones que el corte en la nariz que Polanski le hace a Nicholson en la película fue real, lo cierto es que solo es una leyenda urbana. Ambos se cansaron tanto de explicar el mecanismo para falsear el corte que decidieron decir que era todo real. Leyendas urbanas aparte, Polanski afrontó con ‘Chinatown’ la que sería su última película en Estados Unidos debido al delito de pederastia por el que aún se mantiene en Francia, pendiente de extradición.

Lo cierto es que el toque de Polanski a la hora de llevar a imágenes el guion de Towne no solo se limitó a su extraordinaria habilidad para crear un sutil sentir de paranoia en la historia. El toque europeo que buscaban en él los productores se transformó en una película que, respetando los cánones del género, viró hacia un punto mucho más personal de lo que se ve a simple vista. El cineasta polaco eliminó la voz en off del guion para llevar al espectador en todo momento física y visualmente junto con el personaje principal. Como en las novelas de Raymond Chandler, el principal referente literario del género, el detective protagonista está presente en todas y cada una de las escenas del largometraje. Polanski fue el culpable de que la perspectiva de Gittes fuese totalmente la del espectador. Pero su paseo por Los Ángeles vista como una ciudad árida, violenta y deshumanizada, así como los oscuros recuerdos pasados del protagonista con una mujer, remiten también al propio director. Fue la última película que Polanski filmó en la ciudad que había sido el escenario cuatro años antes de la violenta muerte de su mujer embarazada, Sharon Tate. Fue ese sentimiento el que le llevó a reescribir el hoy mítico final del guion que, originalmente, era feliz. El protagonista acabaría con la misma trágica sensación que él tras el terrible suceso.

Publicidad - Sigue leyendo debajo
3

El guion perfecto de Robert Towne

Jack Nicholson y Faye Dunaway en Chinatown
Sunset Boulevard//Getty Images

Como ya hemos dicho, el guion de la película fue lo único que acabó llevándose el Oscar. Su autor, Robert Towne rechazó una cuantiosa oferta para adaptar ‘El gran Gatsby’ a cambio de escribir su propia historia, uno de los mejores libretos originales del cine. Aunque ya hemos visto que sin Polanski el guion sería bastante diferente, cuando uno ve ‘Chinatown’ observa un gran trabajo de documentación, unos personajes carismáticos y unos diálogos precisos y contundentes que articulan con fluidez una historia base llena de peso y complejidad. En consecuencia, el guion de ‘Chinatown’, que originalmente tenía 180 páginas, se considera uno de los más perfectos jamás escritos y es una de las principales referencias de enseñanza en seminarios y cursos alrededor del mundo según IMDB.

Publicidad - Sigue leyendo debajo
4

Jack Nicholson, el detective

jack nicholson y faye dunaway en chinatown
Paramount

Cuando tu referente es Humphrey Bogart pocos actores no tendrían miedo al reto. Muchos menos conseguirían superar con éxito la hazaña. Quizás el principal secreto de la inmortalidad de ‘Chinatown’ es la imborrable presencia de Jack Nicholson como el detective Jack Gittes. En un papel de expresividad comedida para lo que nos tiene acostumbrados, Nicholson creó un personaje de pocos pero contundentes gestos. Gittes es carismático, justo, seductor, inteligente y honrado en su justa medida.

Hace años que es de dominio público que a Nicholson lo criaron sus abuelos. De hecho, se enteró de que su madre era la que él creía su hermana después de la filmación de esta película. Lo cierto es que la revelación del secreto de la película, que la mujer de la que se enamora el protagonista cuida a su hermana, que también es su hija, parece ser una pequeña broma del destino para Nicholson. Presente en todas y cada una de las escenas de la película, el personaje logra con éxito el principal reto del guion, cargar con un traumático pasado que apenas se intuye pero tiene que expresar. Una de las principales vías para conseguirlo es precisamente su relación con ella, Evelyn Mulwray. Su desconfianza hacia el personaje de Faye Dunaway y su negativa a pasar el resto de la noche con ella cuando esta se lo pide, pese a estar tan enamorado como para arriesgar su vida por ella, es el modo de expresión del pasado que marcó el carácter del protagonista. Recordemos además que hablamos de un hombre que dedica su vida a algo tan triste como descubrir infidelidades. Poca confianza en el amor le ha de quedar.

Publicidad - Sigue leyendo debajo
5

Faye Dunaway, la femma fatale

Faye Dunaway en 'Chinatown'
Archive Photos//Getty Images

De expresión helada, voz casi suspirada y ojos temerosos, el personaje de Faye Dunaway pasa en la película desde una dureza autoritaria de señora millonaria hasta una cálida debilidad de madre desesperada. Sus características cejas y labios fueron ideados por Polanski en recuerdo a como vestía su madre en los años treinta (murió poco más tarde presa de los nazis en Auschwitz).

Aunque la primera opción fue Ali MacGraw, mujer del productor, el rol llegó por suerte a Dunaway, la elección de Polanski. La razón fue muy prosaica, MacGraw dejó a su marido por Steve McQueen. La inolvidable Bonnie de ‘Bonnie & Clyde’ se entregó por completo a un papel en el que consiguió aunar carisma y ambigüedad hasta descomponerse revelando su terrible secreto. De hecho, en la escena donde le confiesa a Gittes que Katherine es a la vez su hija y su hermana, que su padre la violó, pidió a Nicholson que la abofeteara de verdad. Tras varias tomas insatisfactorias, fue la escena en la que Nicholson golpea realmente a Dunaway la que permaneció en la película. Por otro lado, se habla de que la actriz y el cineasta polaco no se llevaron nada bien. Si unas partes hablan de él como director autoritario y otras de ella como diva insufrible, ambas coinciden en recordar una anécdota como resumen de su relación durante el rodaje. Parece ser que la actriz orinó en una taza, tras denegarle Polanski el descanso para ir al baño, y le arrojó su contenido encima al director.

Publicidad - Sigue leyendo debajo
6

John Huston, el maestro

John Huston en 'Chinatown'
Paramount

La simple presencia de John Huston invoca el noir. Con su ópera prima consiguió sentar las estrictas bases que cambiaron el género criminal para siempre, códigos visuales que admitieron con enorme éxito las historias que tanto hacían triunfar a la novela negra. Suyo es ‘El halcón maltés’ (1941) pero también ‘El honor de los Prizzi’ (1985), otra película de Jack Nicholson que bien podría actuar como punto y final, testamento destructor, de un género que el mismo creó cuatro décadas antes.

Lo cierto es que al maestro le ofrecieron la dirección de la película antes que a Polanski, pero declinó hacerla. Su Noah Cross consiguió aunar como pocos antes la figura del poder del mal, del dinero sucio y de la corrupción en una figura carismática que necesita pocos minutos para marcar la película.

Además de su incapacidad para pronunciar correctamente Gittes, el apellido del protagonista, por lo que se tuvo que incluir una línea al respecto, Huston tenía una complicada relación con Nicholson en aquel momento. El actor había comenzado a salir con su hija Anjelica. Ella solo visitó el rodaje en una ocasión y fue precisamente cuando se filmó la escena en que el personaje de Huston le pregunta al protagonista “¿Señor Gittes, se acuesta con mi hija?”.

Publicidad - Sigue leyendo debajo
7

La música de Jerry Goldsmith

youtubeView full post on Youtube

Entre el jazz y la música clásica, oímos solos de trompeta junto a pianos, harpas, cuerdas y percusión. Jerry Goldsmith creó la música de ‘Chinatown’ en solo diez días. Había sido Phillip Lambro el designado para componerla pero su trabajó no gustó y dejó a su sustituto solo una decena de días para hacer el trabajo. Hay veces que la prisa no es impedimento sí la inspiración es buena. El genio David Lynch ha declarado repetidamente que esta se trata de su banda sonora favorita y no cuesta ver por qué. Más que acompañar una situación o crear un ambiente tenso y criminal, la música refuerza y exhibe las emociones de los protagonistas, la oscuridad de un mundo sucio donde el amor al final del todo no logra sobrevivir.

Poco antes de su muerte en 2004, preguntaron a Goldsmith por el sentido temporal de la música, y cómo esta situaba la historia en los años treinta. El músico respondió “No lo creo, ya ves eso en la pantalla, ¿Por qué hacerlo también en la música? ... Las emociones son atemporales”.

Publicidad - Sigue leyendo debajo
8

La ciudad de Los Ángeles

jack nicholson y faye dunaway en chinatown
Paramount

El clásico blanco y negro del género se transforma aquí en un continuo color ocaso, ocre, naranja, marrón y violeta apagado. Los callejones y la bruma de las alcantarillas se sustituyen por grandes casas blancas, jardines y enormes desiertos. Sin duda, Los Ángeles en el cine negro es Los Ángeles en ‘Chinatown’.

El desastre del Van der Lip al que se refieren en la película es en realidad el colapso de la presa San Francis en 1928, que acabó con la vida de al menos cuatrocientas cincuenta personas. Así entendemos como ‘Chinatown’ centra la oscuridad, la putrefacción de la sociedad angelina en algo como el agua. Cuando hablamos de la luminosa ciudad de Los Ángeles lo hacemos de algo que se erigió en medio del desierto. Eso tuvo un costé difícil de afrontar, tal como pasa en la película, donde el agua es el arma del poder. ¿Por qué no han hecho un remake de 'Chinatown' en Murcia?

Publicidad - Sigue leyendo debajo
9

"Es Chinatown"

Jack Nicholson y Faye Dunaway en Chinatown
Paramount

Quizás todo lo que tiene que ver con Chinatown sea el mayor acierto de la película homónima. Aunque en el guion original, recordemos que con otro final, ninguna escena estaba situada en dicho barrio. Pero en la película todo desemboca en el recordado final y la famosa última frase “olvídalo Jake, es Chinatown’. Es entonces cuando nos damos cuenta de que, contándonos el presente, nos estaban narrando también ese pasado oculto del protagonista. Que lo que hemos visto a lo largo de toda la película es muy similar, al menos en el aspecto emocional, a lo que le ocurrió a Jake Gittes en Chinatown años antes y que le marcó como para dejar la policía. Una historia que cuenta dos, aunque en realidad sean la misma. Chinatown se convierte así en algo metafórico, en el resumen del mal social que un solo individuo no puede cambiar y que ha de ignorar para conseguir vivir feliz, dentro de lo que cabe. En la película, Chinatown toma la forma de la corrupción invisible que pudre a la sociedad, ese lugar en donde “no puedes siempre decir que está pasando”.

Como curiosidad, la frase “Forget it, it’s Chinatown” se ha convertido en una expresión usual dentro del mundo del espectáculo para referirse a aquellos asuntos que es mejor olvidar que afrontar por miedo a armar escándalo. Vamos, que esperamos que con el movimiento #MeToo este uso de la frase desaparezca.

Publicidad - Sigue leyendo debajo
10

Segundas partes...

Jack Nicholson dirigiendo 'Los dos Jakes'
Getty Images//Getty Images

…Nunca fueron buenas. Al menos no lo fue la de ‘Chinatown’ y es que mucha gente ni sabe de la existencia de esta secuela. Con Polanski fuera del proyecto, Jack Nicholson se puso a los mandos de la dirección de esta película que volvió a contar con guion de Robert Towne. Ni la vuelta de Nicholson como Jake Gettis ni la presencia de Harvey Keitel fue suficiente para que la película de 1990, titulada ‘Los dos Jakes’, pasase a la historia junto con la anterior aventura del detective. Llegaron a decir que Towne y Nicholson querían convertir a Jake Gettis en protagonista de una trilogía. Lógicamente, tras el discreto papel de esta segunda entrega, una tercera nunca llegó a producirse. De hecho, Nicholson nunca volvió a dirigir. Menos mal que siempre podemos volver a ver una y otra vez la película de 1974. Y es que por mucho que nos lo digan, nosotros, como Jake Gettis, nunca podremos olvidar ‘Chinatown’.

Headshot of Rafael Sánchez Casademont
Rafael Sánchez Casademont

Rafael es experto en cine, series y videojuegos. Lo suyo es el cine clásico y de autor, aunque no se pierda una de Marvel o el éxito del momento en Netflix por deformación profesional. También tiene su lado friki, como prueba su especialización en el anime, el k-pop y todo lo relacionado con la cultura asiática.

Por generación, a veces le toca escribir de éxitos musicales del momento, desde Bizarrap hasta Blackpink. Incluso tiene su lado erótico, pero limitado, lamentablemente, a seleccionarnos lo mejor de series y películas eróticas. Pero no se limita ahí, ya que también le gusta escribir de gastronomía, viajes, humor y memes.

Tras 5 años escribiendo en Fotogramas y Esquire lo cierto es que ya ha hecho un poco de todo, desde entrevistas a estrellas internacionales hasta presentaciones de móviles o catas de aceite, insectos y, sí, con suerte, vino. 

Se formó en Comunicación Audiovisual en la Universidad de Murcia. Después siguió en la Universidad Carlos III de Madrid con un Máster en Investigación en Medios de Comunicación. Además de comenzar un doctorado sobre la representación sexual en el cine de autor (que nunca acabó), también estudió un Master en crítica de cine, tanto en la ECAM como en la Escuela de Escritores. Antes, se curtió escribiendo en el blog Cinealacarbonara, siguió en medios como Amanecemetropolis, Culturamas o Revista Magnolia, y le dedicó todos sus esfuerzos a Revista Mutaciones desde su fundación. 

Llegó a Hearst en 2018 años y logró hacerse un hueco en las redacciones de Fotogramas y Esquire, con las que sigue escribiendo de todo lo que le gusta y le mandan (a menudo coincide). Su buen o mal gusto (según se mire) le llevó también a meterse en el mundo de la gastronomía y los videojuegos. Vamos, que le gusta entretenerse.   

VER VÍDEO
 
preview for Dynamic FOTOGRAMAS SPAIN list

Cine de Hollywood

Publicidad - Sigue leyendo debajo
Publicidad - Sigue leyendo debajo
Logo
youtube
facebook
instagram
Hearst Editorial - Fotogramas, marca perteneciente al grupo Hearst Magazines International

Fotogramas, marca perteneciente al grupo Hearst Magazines International

Fotogramas participa en varios programas de afiliación de marketing, lo que significa que Fotogramas recibe comisiones de las compras hechas a través de los links a sitios de los vendedores.

©2024 Hearst España S.L. Todos los derechos sobre las marcas, imágenes y contenidos están protegidos.

Aviso de privacidadPolítica de cookiesAviso LegalSitemapIniciar Sesión en Content Pass
Ajuste de Cookies