Rey de Polonia (1575-1586). Pr�ncipe de Transilvania (1571-1575). La nobleza polaca lo eligi� por la enemistad de su familia con los Habsburgo. Luch� contra Iv�n IV el Terrible y se asegur� el poder sobre Livonia y Polock (1582). Combati� a sus rivales dentro de la nobleza polaca y apoy� la Contrarreforma
(Esztergom, actual Hungr�a, h. 975-Buda, id., 1038) Duque (997-1000) y primer rey de Hungr�a (1001-1038). Hijo del duque magiar G�za e introductor del cristianismo en tierras h�ngaras, fue bautizado en el 985, al mismo tiempo que su padre, a quien sucedi� al frente de las tribus magiares en el 997.
Poco despu�s, Esteban I fund� el obispado de Esztergom y emprendi� la cristianizaci�n de Hungr�a con la ayuda de numerosos misioneros benedictinos llegados del exterior. La evangelizaci�n, impuesta por el joven duque y realizada con gran rapidez, levant� sin embargo una fuerte oposici�n en un amplio sector de la poblaci�n magiar, que se tradujo en una revuelta de algunos caudillos locales, que fue sofocada en la batalla de Veszpr�m (998).
El papa Silvestre y Esteban I el Santo
Ardiente defensor del Papado, en 1001 fue proclamado rey de Hungr�a por el pont�fice Silvestre II, quien le ofreci� la corona llamada �de San Esteban�, que con el tiempo habr�a de convertirse en el s�mbolo de la independencia h�ngara. Bajo la influencia del modelo administrativo de los soberanos carolingios, el monarca magiar dividi� en condados y obispados el pa�s, que qued� estructurado como un Estado feudal.
Tras la muerte de Esteban I, acaecida en el a�o 1038, Hungr�a entr� en un largo per�odo de luchas intestinas y anarqu�a, situaci�n que permiti� a buena parte de los magiares recuperar sus ancestrales creencias paganas. De hecho, no fue hasta finales del siglo XI, durante el reinado de Ladislao I (1077-1095), cuando la poblaci�n h�ngara abraz� el cristianismo, coincidiendo con el inicio de la reconstrucci�n del pa�s. Esteban I, fundador del Estado h�ngaro y de sus tradiciones cristianas, fue canonizado por el papa Gregorio VII en 1083, junto a su hijo Eimerico