NBA

Los New York Knicks de Brunson ya fueron finalistas de la NBA: Cómo eso sucedió hace 23 años

Author Photo
Allen Iverson

No, el título de este artículo no hace referencia a que un Jalen Brunson infante, de apenas 4 años, haya liderado a un equipo a las Finales NBA en 2001. Tampoco a que los New York Knicks hayan dicho presente en aquella definición, a sabiendas de que su última aparición en la serie decisiva fue en 1999, con derrota ante los Spurs.

En cambio, a lo que apunta es a la enorme similitud que este equipo de Tom Thibodeau guarda con los Philadelphia 76ers campeones del Este -y subcampeones de los Lakers- en la temporada 2000-2001. Similitudes estadísticas, de configuración y hasta espirituales, difíciles de encontrar en otros conjuntos que hayan tenido éxito en las últimas décadas.

La primera de esas semejanzas claramente está vinculada a las estrellas de uno y otro equipo. Jugadores pequeños pero con una capacidad ofensiva fenomenal, que cargan en sus espaldas con casi toda la responsabilidad anotadora de sus equipos. Allen Iverson en aquellos Sixers; Jalen Brunson en estos Knicks.

Aficionados en Estados Unidos, pueden ver los mejores partidos de la temporada 2023-2024 de la NBA en Sling TV. Regístrate haciendo click aquí.

Durante aquella postemporada del 2001, Iverson promedió 32.9 puntos. Antes del quinto partido entre Knicks y Pacers, ganado por New York por 121-91, Brunson promediaba 32.9 puntos en estos Playoffs. Cifra que mejoró con otra noche espectacular: 44 puntos para dejar a su equipo en ventaja de 3 a 2 a pesar de las lesiones.

Sin embargo, no se trata solamente de bases pequeños y anotadores, sino de todo un esquema general. Estos Knicks están construidos -especialmente desde la baja de Julius Randle- para rodear a Brunson con jugadores de rol, sin muchos puntos en las manos pero de enorme sacrificio defensivo y físico. De hecho, ningún otro jugador de New York supera los 16 puntos de media en estos Playoffs.

Suscríbete a NBA League Pass para ver todos los partidos: Estados Unidos | Resto del mundo

Con aquellos 76ers la historia era todavía más extrema: detrás de los casi 33 puntos de media de Iverson, nadie más pasaba de los 13 tantos, con el pequeño A.I. siendo acompañado por perros de presa como Dikembe Mutombo, Tyrone Hill, Aaron McKie o Eric Snow. Ninguno de los cuales fue confundido jamás con un gran anotador... Como tampoco lo serán los Josh Hart, Isaiah Hartenstein, Donte DiVincenzo o Miles McBride -todos titulares en el quinto juego ante Indiana-.

La carga de minutos entre Iverson y Brunson también es comparable: el base de los Knicks ya supera los 41 de promedio en esta postemporada. Lo de The Answer en 2001 fue todavía más exagerado: Larry Brown lo hizo jugar ¡46.2 minutos por partido! Prácticamente no descansó en toda la postemporada.

Incluso lo que sucede cada vez que estos anotadores fallan tiene puntos de comparación: si algo destaca a estos Knicks es su carga al rebote ofensivo. De hecho, lideran la temporada en ese aspecto, bajando el 29% de sus tiros fallados. ¿Aquel Philadelphia? Tomaba aún más tableros en ataque: 31% de sus fallos -2° mejor marca de ese año-.

Equipos guerreros, con un líder claro y un grupo de complementos que empujan desde atrás, sin nada más en mente que el éxito del equipo. El espíritu de los 76ers de Iverson vive en unos Knicks 2024 que, a pesar de sus bajas, avanzan a paso firme en los Playoffs.

Más información de NBA

Autor/es
Juan Estevez Photo

Juan es productor de contenido en las ediciones en español de The Sporting News.