La "topera", el último fenómeno 'paranormal' de los porteros contra el Real Madrid

El Real Madrid se volvió a ver favorecido de una concesión del portero rival en el partido contra el Bayern para iniciar la remontada que culminó con el billete a la final de la Champions. Un regalo que, en cualquier caso, no acabó directamente en gol, sino que el oportunismo de Joselu hizo el resto para acompañar el remate de Vinicius y batir a Neuer.

El guardameta alemán se equivocó de manera garrafal en el 1-1 de los blancos, si bien antes se había erigido en uno de los artífices, si no el que más, para que el conjunto bávaro mantuviera la portería a cero. Por ejemplo, había intervenido con acierto a un remate de Rodrygo, tras el de Vinicius al poste, en los compases iniciales, mientras que sacó una gran manopla a un disparo potente de Vinicius en el segundo tiempo. No pudo hacer lo propio al tiro de Vini en el minuto 87 y Neuer se justifica por ello en el micrófono de DAZN Alemania.

"Muy amargo para mí. Tengo que ser sincero y decir que esperaba el balón me viniera de otra manera, más hacia el pecho. Desgraciadamente, fue un poco más arriba. No esperaba que hubiera una topera en el terreno de juego y que la pelota acabara ahí. Por eso me resultó difícil atraparlo. Luego, Joselu llegó más rápido y era difícil de defender", lamentó tras el partido.

La topera a la que hace referencia Manuel Neuer va en la línea del discurso de Pep Guardiola tras el partido de ida de los cuartos de final, cuando aseguró que "ahora solo tienen que cuidar la hierba, solo tienen que mejorar esto. El próximo paso del que se tiene que preocupar Florentino es de hacer un buen campo, como el Madrid siempre lo había tenido", a la vez que, eso sí, elogiaba cómo había quedado la cubierta retráctil del Santiago Bernabéu. Sea una excusa o no lo de Neuer (Guardiola lo dijo tras el 3-3), se une a la lista de fenómenos paranormales con los porteros cuando se trata de medirse al Real Madrid en la UEFA Champions League.

El más sonado, lógicamente, es el de Loris Karius en la final de Kiev de 2018, por producirse en una final y ser fallos muy groseros en dos goles. El portero alemán, entonces en el Liverpool, ahora en el Newcastle, quedó mal parado en la fotografía del gol de Benzema, que puso el pie para interceptar el saque en corto del guardameta. Después, fue incapaz de blocar un disparo lejano de Gareth Bale. "Tuve una conmoción cerebral después de un golpe de Sergio Ramos que limitó mi visión", expuso tiempo después en Bild.

Este miércoles, en el Bernabéu, estuvo sentado en el banquillo un cancerbero, Sven Ulreich, que protagonizó otro fallo a favor de los intereses del Madrid. El alemán, habitualmente suplente, asumió la titularidad en las semifinales de la temporada 2017-18 debido a la lesión de Manuel Neuer. Tras el 1-2 de la ida en Múnich y con el encuentro de vuelta empatado a uno al descanso, Ulreich dudó qué hacer —no podía atrapar el esférico al ser un pase atrás de un compañero— y, ante la indecisión, dejó pasar un balón que aprovechó Benzema para marcar el 2-1 a puerta vacía. A la postre, el Bayern acabó marcando el 2-2, insuficiente para obtener la clasificación para la final. "Me dan el pase atrás y veo a Benzema adelantado, así que me intento colocar para un uno contra uno. Pero, al instante, pensé: 'Mierda, no puedo cogerla con la mano'. Entonces quise despejar con el pie y ya no pude...", confesó, también, en Bild.

Los errores forman parte del día a día de cualquier jugador, también de los porteros. Ahora bien, no se recuerdan fallos de tal magnitud en alturas tan avanzadas de la Champions de un guardameta que defendiese el escudo del Real Madrid. Del lado contrario, ya no solo Ulreich, Karius o Neuer, sino, también, Édouard Mendy o Gianluigi Donnarumma. El senegalés, que entonces militaba en el Chelsea, entregó el gol a Karim Benzema en el duelo de ida de cuartos de final de la Champions 2021-22 en Stamford Bridge. Un mes antes, en el cruce de octavos, el italiano del PSG apuró para despejar, Benzema se echó encima y propició una recuperación que culminó el propio francés a pase de Vinicius.

Hasta este miércoles, había un denominador común en los errores de los guardametas rivales, que Karim Benzema, de alguna u otra manera, o forzaba el fallo o se aprovechaba de él... o ambas. Ahora, sin él, el Madrid también es capaz de provocar las equivocaciones del meta adversario y, más importante, sacar provecho de ello. La "topera" de Neuer es el último fenómeno 'paranormal' dentro de un fenómeno recurrente como lo son las remontadas épicas del Madrid en Champions.