Caso Asunta: Así fue el caso real que inspiró la serie | 13.cl
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Caso Asunta: Así fue el caso real que inspiró la serie

Caso Asunta: Así fue el caso real que inspiró la serie
Caso Asunta: Así fue el caso real que inspiró la serie
Por: Vania Ramos
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La nueva serie se basó en un crimen que estremeció a España.

El caso Asunta es una docuserie de seis capítulos que reconstruye el crimen que conmocionó a España en el año 2013. 

Se trata de Asunta Basterra, una niña de 12 años cuyo cadáver fue hallado en un área boscosa cerca de Santiago de Compostela. La pequeña era de origen Chino y fue dada en adopción cuando ella tenía un año a un matrimonio español compuesto por Alfonso Basterra y Rosario Porto.

Los padres adoptivos llamaron Asunta a la pequeña y la criaron en un entorno feliz, hasta que la investigación policial y judicial mostró una realidad completamente distinta.

Caso Asunta: Así fue el caso real que inspiró la serie
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Caso Asunta: El crimen que documenta la serie  

Si bien, la serie de Netflix se toma algunas licencias creativas, esta documenta los hechos que llevan a la muerte a la menor. Todo comenzó cuando en la noche del 21 de septiembre de 2013, Alfonso y Rosario acudieron a la policía para denunciar que su hija desapareció exactamente una semana antes de que cumpliera los 13 años.

Horas después, ya de madrugada, la niña apareció muerta junto a una carretera secundaria de una zona boscosa, varios kilómetros al sur de la ciudad de Santiago de Compostela.

Asunta estaba atada con cuerdas de color naranja, pero no presentó indicios de abuso sexual. La autopsia posteriormente confirmó que la niña murió de asfixia. 

Los padres de la niña colaboraron en la investigación, que se fue tornando contra ellos a medida que los agentes iban encontrando indicios y e inconsistencias en sus testimonios.

El principal de estos indicios fue el hallazgo de unas cuerdas de color naranja en una casa rural propiedad de la familia y cercana al lugar de los hechos en la localidad de Teo. Estas cuerdas eran similares a las usadas para atar el cuerpo de Asunta. 

Además, la autopsia reveló que la niña tenía en su organismo elevadas dosis de lorazepam, un tranquilizante y ansiolítico que solo se vende en España con prescripción médica. Tanto Rosario como Alfonso ofrecieron distintas versiones sobre sus movimientos la tarde del sábado en que ocurrió la desaparición y muerte de la pequeña. 

Rosario fue detenida e investigada por homicidio el 24 de septiembre y Alfonso el día 25.

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El juicio del caso Asunta

Una vez que la noticia se dio a conocer en España, toda la nación quedó en consternación. El juicio del caso Asunta hacia sus padres adoptivos estuvo marcado por la atención mediática y la búsqueda de respuestas sobre qué llevó a los padres adoptivos a cometer tan atroz crimen.

Durante el proceso judicial, se revelaron detalles turbios sobre la relación del matrimonio y su hija adoptiva. El año anterior a la muerte de Asunta estuvo marcado por la infidelidad de Rosario, el divorcio inminente y un intento de estrangulamiento a la niña por un intruso enmascarado, del cual no se presentó denuncia.

Según la investigación, Asunta había mostrado síntomas de somnolencia durante sus clases de música, y confesó a la profesora que su madre daba unos polvos que la hacían dormir. El informe policial reveló que Alfonso compró varias cajas de lorazepam, tanto en julio como en septiembre, unos días antes de la muerte de la menor. 

Finalmente, el jurado declaró culpables a Rosario Porto y Alfonso Basterra. Se determinó que Rosario había asfixiado a Asunta con la complicidad de su exmarido. Ambos fueron condenados a 18 años de prisión por asesinato con agravante de parentesco y abuso de autoridad.

Sin embargo, el motivo del crimen no se ha podido aclarar. Se han explorado varias teorías, desde problemas en la relación de los padres adoptivos hasta posibles motivos económicos o sexuales, pero ninguna ha sido concluyente.

Rosario se suicidó en 2020, mientras que Alfonso sigue con su condena. En una carta escrita desde la cárcel, Alfonso Basterra mantuvo su inocencia y expresó su dolor por no poder proteger a su hija cuando más lo necesitaba.

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