G�ler, ante Kubo.
Lleg� el Real Madrid a San Sebasti�n con la satisfacci�n de haber hecho los deberes y con la conciencia tranquila. De hecho, se pod�a permitir hasta el lujo de perder este partido, aunque todav�a no tenga los pelos de la burra en la mano, esto es, que mientras matem�ticamente no sea campe�n no se puede decir que lo sea. Que hasta el rabo todo es toro y que el f�tbol lo carga el diablo...a v
eces.
Sea como fuere,
Ancelotti
tambi�n deb�a ser de esta misma opini�n porque el once inicial fue lo nunca visto, como si el partido le diera un poco lo mismo. El caso es que la cosa le sali� bien. Dio toda la impresi�n de que el Madrid se trabaj� a fondo eso de que el rival no le hiciera ning�n gol, dado que apenas pis� el �rea de la
Real Sociedad
. Lo hizo una vez en el primer tiempo y meti� un gol. Y lo que son las cosas,
Arda G�ler
, que empez� jugando por la derecha, marc� cuando se fue a la izquierda. Y volvi� a dejar su sello. Siempre lo hace. Ante el
Celta
marc� en el minuto 94 cuando s�lo llevaba cinco minutos en el c�sped. Y en Pamplona, tambi�n en el minuto 94, estrell� un bal�n en el travesa�o desde el centro del campo. Es un caso parecido al de
Bellingham
. No est� en el equipo para hacer goles, pero los hace, as� como sin querer. El madridismo se lo agradece, aunque tambi�n le gustar�a verlo un poco m�s.
Fue lo del Madrid un ejercicio de resistencia impresionante, aunque me temo que si juega igual en
M�nich
el pr�ximo martes igual se lleva un disgusto.
Kepa
lo hizo bien bajo palos y tambi�n
Militao
cumpli� en su reaparici�n como titular, pese a tener un fallo peligroso en el primer tiempo. Claro que peor le fue el a�o pasado, cuando la Real gan� 2-0 con un fallo clamoroso suyo que permiti� a
Kubo
marcar a placer