Lewandowski, João Félix y Vitor Roque: medio ataque del Barça anda enfadado

Lewandowski, 8 veces sustituido en 5 meses

"Entiendo el enfado de Lewandowski. A mí tampoco me gustaba que me cambiasen y también me enfadaba". Xavi quiso ser conciliador con el delantero polaco, consciente de que tanto cambio (hasta ocho sustituciones en cinco meses, de enero a mayo), han minado su relación, justo ahora en que se debate si el Barça puede asumir la elevada carga salarial que le viene encima en el tercer año del contrato que debería cumplir la próxima temporada. El técnico apeló a razones puramente tácticas esquivando, en todo momento, el conflicto personal. "Lo entiendo, pero los entrenadores pensamos en el grupo. Necesitaba un poco más de intensidad en la presión. Por eso, saqué a Ferran, a Fermín, a Sergi…". Una intensidad que no le podía dar el polaco, quien cruzó un saludo frío con su entrenador cuando era sustituido en la segunda mitad. "Es un tema táctico y lo hago por el bien del equipo, no por un tema personal. No lo haré nunca”, subrayó con energía Xavi. Pero los datos ilustran el cambio que se ha obrado con el ‘nueve’. En su primera temporada solo fue sustituido seis veces: cinco de agosto a diciembre y una de enero a junio. Ahora, ya se acerca al doble. Son 11 cambios, ocho de ellos en estos cinco últimos meses donde Lewandowski ha perdido, y parece que de forma definitiva, la condición de intocable. Basta ver lo sucedido en el clásico del Bernabéu (sustituido en el minuto 64), en Montilivi (m. 79) o en Montjuïc con la Real (m.76).

Vitor Roque lleva un mes sin salir del banquillo

"Recibió un golpe muy fuerte en el entrenamiento de ayer y estaba entre algodones. Era duda hasta última hora. Por eso, ni ha calentado", argumentó Xavi para justificar su decisión de no sacar al joven delantero brasileño ante la Real Sociedad. Lo dejó en el banquillo. Ahí lleva cinco partidos consecutivos sin jugar ni un solo minuto. Prefirió el técnico colocar a Ferran Torres de ‘nueve’ que forzar la entrada del exjugador del Athletic Paranaense, por quien el Barça invirtió el invierno pasado 30 millones de euros más 31 en variables. Pero cada vez juega menos. Se habla mucho más de su caso y de su futuro que de su fútbol porque se ha convertido en un elemento marginal del equipo, transformado, muy a su pesar, en el sexto y último delantero en la rotación de Xavi. Vitor Roque se pone nervioso y André Cury, su agente, aún más, al punto de plantearle un pulso al club anunciando públicamente que no aceptarán una cesión la próxima temporada. O se queda, aunque sea sin jugar nada, o traspaso, sostuvo Cury. "No tengo porque decir nada y contestar a representantes mucho menos", afirmó el técnico, dolido, al igual que la directiva, porque ese asunto –la continuidad del brasileño- se haya trasladado a la esfera pública. Algo que irrita a Deco, el director deportivo, molesto por esas filtraciones sobre Vitor Roque porque, como recordó, solo hay tres personas que manejan esa información privilegiada: el presidente Joan Laporta, el entrenador Xavi Hernández y él mismo.

João Félix calienta, pero no juega

Por João Félix ya ni le preguntan a Xavi. No hay mayor castigo que el olvido Y el portugués, que vino al inicio de la temporada para ser una pieza clave del ataque azulgrana, se ha ido desfigurando con el paso del tiempo. Ante la Real, y con 1-0 en el marcador, el técnico le ordenó calentar en la tercera y última ronda de cambios junto a Oriol Romeu. En la primera, Xavi refrescó el centro del campo con Fermín por Pedri y Sergi Roberto por Christensen. En la segunda modificó el eje del ataque con Ferran Torres supliendo a Lewandowski. Y en la tercera, ya en el tiempo añadido, una vez transformado el penalti de VAR por Raphinha en el 2-0, Xavi puso a Oriol Romeu por Gündogan. Calentó en vano. Fue entonces cuando João Félix apretó con rabia el peto de suplente, mientras exhibía su enfado a distancia del entrenador, que solo tenía ojos para lo que sucedía en elc césped. No lo quería esconder el portugués. Ni tampoco tenía ganas de hacerlo, harto de estar alejado de los focos del campo. Ni pisó João Félix el césped de Montjuïc mientras el Barça medita si merece la pena continuar la próxima temporada con esta fórmula de la cesión procedente del Atlético de Madrid. Allí Simeone no lo quiere ver. Aquí, Xavi ha dejado de contar con él. En Champions, por ejemplo, tuvo un papel absolutamente marginal: cuatro minutos jugó en la ida de octavos en el estadio Diego Armando Maradona contra el Nápoles, nueve apenas en la vuelta. Más de lo mismo con el PSG: 29 minutos en el Parque de los Príncipes y ocho solo en Montjuïc.

A su llegada era titular. Sí o sí. Lo fue en 16 partidos de los 20 que podía jugar en el primer tramo. O sea, el 80%. Pero el ajustado triunfo con el Almería (3-2, 20 diciembre), en el que fue sustituido en el descanso, obró un cambio demoledor para João Félix, que ha desaparecido de la escena. Solo ha sido elegido siete veces en el once inicial de los 27 encuentros disputados desde enero hasta aquí. O sea, un mísero 31%, eclipsado como ha quedado el portugués por la deslumbrante aparición de Lamine Yamal y la confirmación de Raphinha.