Directora de Comunicación de Google: "No creo que la inteligencia artificial vaya a sustituir a los periodistas" - Superdeporte

Entrevista

Directora de Comunicación de Google: "No creo que la inteligencia artificial vaya a sustituir a los periodistas"

"La clave está en convivir, como se ha hecho toda la vida, con la tecnología", indica Anaïs Pérez Figueras

José Miguel L. Romero

Anaïs Pérez Figueras, directora de Comunicación y Asuntos Públicos de Google España y Portugal, es una de las ponentes en Formentera20, foro sobre el entorno digital que comienza este jueves y en el que mantendrá una conversación con María Jesús Espinosa de los Monteros, directora general de Prisa Audio "sobre el mundo del podcast y sobre la importancia de la comunicación en las empresas con los usuarios y periodistas, sociedad y gobiernos".

Para esta entrevista hice una prueba: usar el chatbot de su IA, Gemini, para elaborarla. Quiero que me prepares una entrevista periodística a Anaïs Pérez Figueras, le propuse. Respuesta: "No dispongo de suficiente información sobre esa persona para responder a tu petición". Luego lo intenté de otra manera: Quiero que me prepares una entrevista periodística con la directora de Comunicación y Asuntos Públicos de España y Portugal. No indiqué de quién se trataba, pero enseguida ató cabos y apareció el siguiente título: Entrevista a Anaïs Pérez Figueras, directora de Comunicación y Asuntos Públicos de Google España y Portugal. Parece el gato de Schrödinger: Gemini la conoce y no la conoce al mismo tiempo. 

Gemini es una herramienta de ayuda y de creatividad, pero no es el todo. Trabajamos para que cada vez sea más útil. Es verdad que, como tecnología, no es perfecta. Para cuando se le hacen preguntas concretas, se incluyó hace muy poco un botoncito, una G, porque consideramos que en esos casos es mejor ir directamente al buscador [de Google]. Gemini no está hecha tanto para responder a cosas específicas como para ayudar a desarrollar ideas, que es un concepto más evolutivo y más grande. Y también más complejo.

Pues Gemini me preparó una entrevista entera, con preguntas e incluso respuestas (de usted, o de su avatar). Hasta tenía una entradilla, muy elogiosa, que ni usted misma hubiera redactado mejor: "A lo largo de su trayectoria, ha sido clave en el acercamiento de Google a los medios de comunicación y en la construcción de una sólida reputación para la compañía en la región". ¡Wow! ¿La ha entrenado? 

Pues no tengo siquiera un artículo sobre mí en la Wikipedia. Hay gente que se desespera por tener artículos de sí misma, yo no. No, no la he entrenado. Me alegro de que sea eso, pero si no fueran tan positivas también sería interesante leerlas para saber si son verdad o no.

«Nunca vamos a desarrollar herramientas que sustituyan el trabajo de nadie»

Uy, de eso, de las trolas de la IA, hablaremos luego. Le iba a preguntar si la IA, como se teme en el mundo periodístico, podría llegar a sustituir a los periodistas, pero vista la entrevista de Gemini, temo que sí es posible, si bien creo que los lectores se aburrirían soberanamente. Falta el factor humano.

No creo que vaya a sustituir a los periodistas. El periodismo es un oficio y la inteligencia artificial es una herramienta. No son comparables. Se entiende que la IA puede crear retos, y no sólo en el mundo periodístico, sino en cualquier ámbito profesional. Es una herramienta que abre muchas posibilidades y muchos retos. Si nos centramos en el periodismo, hay dos áreas importantes. En la parte de redacción pura, la Inteligencia Artificial puede ayudar a los periodistas y a cualquier profesional (yo la uso también en mi día a día dentro del departamento) para cosas tan básicas como análisis de datos masivos, identificar patrones y tendencias. En las redacciones, cada vez hay más periodistas que no sólo elaboran la información a partir del conocimiento que tienen, sino que también se apoyan en los patrones estadísticos que genera la IA, que les ayudan e incluso pueden generar información. Son grandes volúmenes de datos que llevaría mucho tiempo analizar por el propio periodista. La IA puede ser una asistencia a la creación de contenido. Y eso no es baladí. A veces tienes claro un tema y unos enfoques, pero necesitas ideas frescas. Puede ayudar, dentro de lo que la propia herramienta puede analizar, a darte ángulos y perspectivas diferentes que a lo mejor no habías pensado. Pero la última palabra es la del propio periodista: él es el que decide, el que analiza y tiene el conocimiento, el sentimiento, y el control de editar esa información.

¿Y la otra área que afecta al periodismo?

La IA también está para la parte más empresarial. Hay un tema importante: cómo hacer sostenibles los modelos de negocio del periodismo. Creo que la IA puede ayudar a tareas más o menos sencillas, como crear campañas publicitarias y sistemas de suscripción para llegar a un público más amplio, algo que hasta entonces a lo mejor hacía una sola persona pero que la IA ayuda a hacerlo escalable. También ayuda en mejoras de eficiencias de flujos de trabajo de producción, de creación, de administración, de tareas… Y sirve, asimismo, de ayuda para crear y desarrollar productos para adaptarse a las necesidades de la audiencia. Es decir, no hay que ver la IA como una herramienta que me vaya a sustituir. También podría pensar yo que podría sustituir a los directores de los departamentos de comunicación, pero sería un poco irracional que la IA tomara las decisiones en una junta directiva que estudiara cómo abordar una crisis. Lo razonable es que frente a una situación de crisis o frente a una campaña que hay que desarrollar yo me pueda ayudar de la IA para analizar determinados patrones que me permitan tomar la mejor decisión. Ahí está la clave, en convivir, como se ha hecho toda la vida, con la tecnología.

Publicado en un medio respetable: "Google habría firmado un acuerdo con algunos editores de medios pequeños para publicar artículos generados por IA en sus sitios web". ¿Es cierto?

Que yo sepa, no. Nosotros nunca hemos trabajado en acuerdos para eso. Nosotros trabajamos con los medios de comunicación para ayudarles en dos grandes frentes. El primero es cómo hacemos que las noticias sean de fácil acceso para todos los usuarios y que sean de calidad, que es muy importante para nosotros en el ecosistema que convive en Internet. Y luego, a desarrollar herramientas que permitan modelos de negocio sostenibles, a aumentar suscripciones, como el de suscripción con Google, y en la parte formativa: cómo ayudamos a las redacciones a formarse en el conocimiento de herramientas que les puedan facilitar su trabajo. Pero nunca vamos a desarrollar herramientas que sustituyan el trabajo de nadie. Ese no es nuestro objetivo, sino facilitar herramientas para que el trabajo del periodista sea más eficiente y de mayor calidad.

Los medios se quejan de que sus cambios de algoritmos en el buscador les provoca caídas de audiencias, un fuerte impacto. ¿Qué les mueve a hacer esos cambios?

El buscador evoluciona en función de muchas necesidades. Se producen cambios de algoritmos para mejorar la experiencia del usuario en cuanto a la necesidad que este tiene de encontrar información. Podemos llegar a hacer hasta 500 cambios al año dentro del algoritmo. Nuestro objetivo es adaptarnos a esos cambios de búsqueda que tiene el propio usuario. Hace muchos años implementamos que se priorizaran páginas web cuya carga en el móvil fuera rápida, pues el usuario había modificado su modo de búsqueda: ya no estaba tanto tiempo delante de su ordenador de sobremesa y buscaba información cuando iba en el autobús. No modificamos el buscador para hacerlo más complejo, sino para adaptarlo a los cambios que requiere la sociedad. Y hacemos esos cambios de manera transparente, sobre todo a nivel de desarrollo. Los desarrolladores de los medios de comunicación acceden a esos cambios para saber cómo adaptar la información que están sirviendo a esas modificaciones. A veces son complejos y pueden influir en cómo está posicionado el medio, pero el objetivo final es que mejore la experiencia y la navegabilidad del usuario en la plataforma.

Volvamos a la entrevista de Gemini: ¿Cómo ve el papel de Google en la era digital y qué medidas se están tomando desde la compañía para garantizar un uso responsable de la tecnología? Una de sus respuestas es «combatir la desinformación mediante iniciativas que fomentan el pensamiento crítico y la verificación de información». ¿Está de acuerdo con su avatar? 

Esa es una de las cosas que hacemos. Llevamos 20 años trabajando en la IA. Parece que estuviera en nuestras vidas desde hace un año y medio, pero no: su uso y desarrollo lleva muchos años en los productos de Google. Somos pioneros en cómo innovar usando la IA. En 2018 creamos un código ético sobre cómo hacer uso de la IA y aplicarla a nuestros productos y servicios. Sabemos que con la IA hay que ser audaces, pero también hay que ser responsables. Se crearon unos principios éticos que anteponen los beneficios y la seguridad de los usuarios frente a los potenciales abusos que se puedan cometer con esa tecnología. Somos plenamente conscientes de que esto es una carrera de largo recorrido y que para llegar al final hay que hacerlo bien. Nos tomamos muy en serio desarrollar la innovación con responsabilidad. Eso puede provocar que las innovaciones lleguen a veces más tarde al mercado, que las lancemos más tarde, pero que se consolide más en el tiempo.

«Las alucinaciones de la IA son parte de esas limitaciones del desarrollo de la propia tecnología»

Una vez consultamos a Chat GPT sobre Eivissa y nos contó, cosa que no sabíamos (modo ironía on), que la isla había sido un campo de concentración de austrohúngaros en la Primera Guerra Mundial, y que fue invadida por los alemanes en la segunda. ¿Gemini tiene también una imaginación tan desbordante? 

Las alucinaciones han convivido siempre con la IA. Y por eso nos empeñamos mucho, cuando hablamos de Gemini, en subrayar que no es una herramienta para proporcionar exactitud en la información. Para eso hay otras fuentes. Ayuda en una parte del proceso creativo y nunca hay que tomarlo como una información que hay que admitir al pie de la letra. Se supone que el usuario, el humano, desarrolla su pensamiento crítico y es conocedor de que la verdad no la proporciona una información que proviene de Gemini o de otro chat de IA. Nos tenemos que acostumbrar, como sociedad, a hacer un fact checking de esa información. La IA facilita desarrollos, pero tiene sus limitaciones, y las alucinaciones son parte de esas limitaciones del desarrollo de la propia tecnología.

Hay tantos libros creados con IA que Amazon ha puesto un límite: un autor sólo se puede publicar tres libros diarios en Amazon. Tres. ¿Han notado ese uso en Gemini? 

Las herramientas pueden ayudar a la creación, pero no es una creación en sí misma. Sigue siendo muy importante la labor de la persona y el criterio humano para decidir la calidad de un producto, un servicio o un resultado final, sea una novela o un desarrollo de software. Es necesario, eso sí, fomentar el pensamiento crítico para que todos los usuarios tengamos la capacidad de discernir el contenido de calidad o la veracidad de la información. En esta última se están realizando muchos desarrollos dentro de la tecnología que ya permiten a los usuarios identificar si unas imágenes han sido creadas con IA.

"Cuando no me comunico, estoy volando en parapente", dice en su currículo. ¿Es verdad o fantasea con eso?

Es verdad. Bueno, ahora no. Fui madre y desde hace dos años dejé de volar porque tengo otras prioridades. Lo hice durante siete años. Era mi deporte.

¿Qué escucha cuando se conecta a Youtube, que es de la ‘casa’ Google?

De todo. Me gusta mucho el flamenco, el pop, el rock… Lo que no escucho es el heavy metal. No me gusta la música ensordecedora. Es una tara que tengo. Y toco el saxofón desde hace muchos años.

¿A veces, cuando nadie la ve, usa un buscador diferente al de Google? 

Llevo utilizando Google toda mi vida, he crecido con él. Alguna vez he utilizado Bing, pero en raras ocasiones.

Uy como se enteren.

Qué va, en la compañía somos muy abiertos en eso, tanto para usar hardware como para probar productos y servicios de otras compañías para conocer sus capacidades.

¿Anaïs por Anaïs Nin?

Sí. Cuando decidieron el nombre mis padres, mi madre propuso uno si era niño, y mi padre dijo que si era chica sería Anaïs, porque entonces estaba leyendo sus diarios. No era muy utilizado en esa época.

Y si hubiera sido varón, ¿Henry Miller?

Alejandro es el nombre que quería mi madre. No sé por qué, quizás por Dumas. Siguen siendo muy aficionados a la lectura.