En el exclusivo mundo de los cócteles, algunos destilan lujo y extravagancia, alcanzando precios que podrían parecer inimaginables para la mayoría.
Aquí te presentamos cinco de los cócteles más caros del mundo, cada uno con una historia única que justifica su impresionante etiqueta de precio.
1. Diamonds are Forever Martini – $19,000
Para comenzar con el más caro de todos, nos dirigimos al Ritz-Carlton en Tokio, donde se sirve el “Diamonds are Forever Martini“. Por aproximadamente $19,000, este cóctel incluye vodka Absolut Elyx y jugo de lima, pero su verdadera joya es un diamante de un quilate que reposa en la copa. Solo disponible en el hotel más alto de Tokio, este Martini ofrece una experiencia tan elevada como su ubicación.
2. Ono Champagne Cocktail – $10,000
En el hotel Encore Wynn de Las Vegas, el Ono Champagne Cocktail mezcla opulencia líquida y sólida. A un costo de $10,000, este cóctel incluye champán Charles Heidsieck de 1981 y coñac Louis XIII Black Pearl de $90,000 la botella, además de jugo de naranja, jugo de albaricoque y néctar de rosas. Se sirve en un vaso incrustado de joyas con un collar de oro de 18 quilates al lado, haciendo de cada sorbo una declaración de lujo.
3. Martini on the Rock – $10,000
¿Un Martini que necesita reserva con tres días de anticipación y una cita con un joyero? Así es el “Martini on the Rock” del Algonquin Hotel en Nueva York, que podría llegar a costar hasta $15,000. Este cóctel no solo es una bebida, sino una pieza de joyería personalizada, ideal para celebraciones únicas como compromisos o aniversarios.
4. L’Imperial – $5,000
Del Baccarat Hotel en Nueva York nos llega el L’Imperial, un cóctel de $5,000 que es una versión lujosa del clásico Last Word. Con ingredientes como la vintage Green Chartreuse de las décadas de 1920 y Nolet Reserve Gin, este cóctel también incluye un vaso de cristal Baccarat incrustado con diamantes, que los comensales pueden llevarse a casa.
Cada uno de estos cócteles no solo representa un pináculo de la mixología sino también una experiencia de lujo que va más allá del simple acto de beber. Son verdaderas obras de arte, diseñadas para ser disfrutadas tanto visual como gustativamente.
