En la primera escena de Reina Charlotte: Una historia de Bridgerton, Charlotte (India Amarteifio) está de mal humor en un carruaje camino a casarse con el rey Jorge. Su hermano bromea diciendo que ella no se ha movido en seis horas.
Charlotte frunce el ceño y responde: “El vestido se asienta sobre un soporte hecho a medida con ballena. El problema con la ballena es que es bastante afilada. Estoy a la altura de la moda, por lo que este corsé me queda bastante ajustado. Si me muevo demasiado, mi ropa interior podría cortarme y apuñalarme hasta la muerte. Estoy enojado y no puedo respirar. Dale la vuelta a este carruaje o rebotaré. Me empalaré con este ridículo corsé y me desangraré hasta morir”.
Este monólogo es excelente para establecer la lucha de Charlotte. Pero Charlotte está muy mal informada sobre su propia ropa interior. En la década de 1760, las mujeres europeas llamaban a su ropa interior estructurada “corsés” y no “corsés”. Las estancias no se hacían con huesos de ballenas sino con barbas de sus bocas. Los ojales de metal no se inventarían hasta dentro de 60 años, por lo que las cuerdas no podrían haberse tensado lo suficiente como para restringir la respiración de Charlotte durante seis horas. Definitivamente podía moverse, porque 18th Las mujeres del siglo XIX cultivaban, bailaban y montaban a caballo en estancias.
Entonces, para que los restos de Charlotte la maten, tendría que hacer mucho más que «rebotar». Su amenaza es el equivalente a saltar sobre un sostén hasta que se suelte el aro, deslizarse a través de un camisón de algodón y luego empujarla hasta que se desangre hasta morir. Es posible que Charlotte necesite volver a la mesa de dibujo para elaborar su plan de escape.
Este tropo es familiar para los obsesivos del drama de época. Estamos acostumbrados a que las heroínas sollocen mientras las figuras paternas dominantes insisten en que les aprietan más los corsés. Piense en la Prudencia en BridgertonJinny en Los bucanerosMaría en Abadía de Downton o rosa en Titánico, todo el camino de regreso a Scarlett O'Hara en Lo que el viento se llevó. Los corsés son desagradables dispositivos de tortura que las mujeres de antaño se veían obligadas a usar para estar más delgadas ante la mirada masculina, ¿verdad?
No precisamente. Gran parte de lo que nos enseñaron el cine y la televisión sobre los corsés es incorrecto. Los historiadores de la moda cuentan Guarida de frikis cuál de nuestros programas favoritos hace bien con los corsés y por qué el cine está tan obsesionado con las mujeres llorando por su ropa interior.
Pirata y prejuicio
Las mujeres occidentales usaban corpiños rígidos desde el siglo XVI en adelante y los llamaban «cuerpos» o «correspondientes». Los tirantes distribuyen el peso de las faldas pesadas a lo largo del torso del usuario y le ayudan a evitar dolores musculares. Lucir a la moda no era tan simple como verse flaco. Si visitas una galería de arte y estudias los retratos de gente pija, verás que la mujer ideal de la sociedad tenía una figura diferente en cada década.
Piratas del Caribe: La maldición de la Perla Negra está ambientado aproximadamente en la década de 1740 (los monos fantasmales y los hombres pulpo zombis y todo eso hacen que sea difícil determinar un año exacto). El padre de Elizabeth Swan quiere un pretendiente que le guste. Él le regala un corsé e insiste: «¡Es la última moda en Londres!». Elizabeth sisea: «Las mujeres en Londres deben haber aprendido a no respirar». Más tarde, el corsé está tan apretado que Elizabeth se desmaya por un acantilado. Jack Sparrow la resucita cortando la prenda.
Según la Dra. Hilary Doda, historiadora de la moda y autora de La vestimenta en el mundo atlántico 1650-1750no hay mucha evidencia histórica de que Johnny Depp necesitara arrancarle la ropa interior a Keira Knightley.
«Es una completa tontería», dice Doda, «tienen que impedir que arroje almohadas a la pantalla».
Elizabeth es 50 años demasiado temprana para la palabra «corsé». Este artículo es un par de corsés, y tanto ella como los niños pequeños los habrían usado desde que tenían dos años. Su padre lleva tres siglos de retraso en “la última moda en Londres”.
“Apretar la cintura no era en realidad parte del diseño de 17th y 18th pares de estancias del siglo”, dice Doda.
Asumir que todas las mujeres querían verse lo más delgadas posible es proyectar 21calle los estándares de belleza del siglo pasado. Parece bastante improbable que un «corsé» hiciera que Elizabeth cayera al océano. ¿Quizás simplemente le apetecía nadar?
El vizconde que me ató
Bridgerton comienza con Lady Featherington gritando «¡más fuerte!» mientras un ejército de doncellas tira de los cordones del corsé de su hija Prudence. Su hermana Penélope observa horrorizada. —¿Debe respirar, mamá? El corsé de Prudence está tan ajustado que luego se desmaya a los pies de la Reina.
Esta escena no tiene sentido, porque el vestido de Prudence oculta su estómago. La tendencia en la década de 1810 eran esos vestidos de cintura imperio que se ven en las adaptaciones de Jane Austen, donde la falda comienza debajo del busto. Las mujeres de esta época usaban principalmente corsés cortos que se parecen más a los bralettes modernos que a los corsés de Elizabeth Swan.
Cassidy Percoco es historiadora de la moda y autora de Vestido Regencia de Mujer. Ella dice: «Los corsés en Bridgerton no cree una figura de Regencia precisa. La redondez natural del busto fue de gran importancia para la moda. Cada uno fue empujado hacia arriba y hacia afuera. El Bridgerton Los corsés tienden a aplanar los bustos de quienes los usan para producir una línea de escote clara en la mitad del pecho, que es lo que actualmente se considera el colmo de la sensualidad”.
En el adelanto de Bridgerton En la temporada 3, las damas bailan con siluetas como las modelos de Hollister, no con retratos de Regency.
El Bridgerton Las chicas se desnudan mucho hasta quedarse en ropa interior, lo cual es útil para aquellos de nosotros que analizamos la historicidad de su ropa. Los corsés de Daphne y Kate tienen el largo correcto, pero se usan incorrectamente. Los corsés y corsés se diseñaron para cubrir un vestido recto ligero, llamado camisola. Daphne y Kate se saltan esta capa. Es el equivalente a salir a correr con zapatillas deportivas y sin calcetines: poco cómodo y muy sudoroso. No es de extrañar Bridgerton A las actrices se les pidió usar sujetadores en la temporada 3.
Lo que se llevó la cintura
serie de netflix La empresa sigue a Isabel de Austria en 1853. Isabel parece sentir náuseas mientras los hilos de su corsé se tensan cada vez más. «Por favor, detente ahora», jadea, «no puedo respirar». Su dama de honor se burla. «Entonces está bien».
Elisabeth está tan perturbada que sale corriendo al jardín.
Esta escena es una gran metáfora de la asfixiante corte de los Habsburgo. Pero en realidad, Elisabeth sorprendió a la corte de los Habsburgo al usar cordones ajustados para reducir su cintura a 40 centímetros. La película de 2022 Cuerpo describe esto muy bien.
El encaje apretado es cuando usas corsés tan compresivos que eventualmente tu cintura se vuelve más estrecha. La invención de los ojales de metal en la década de 1820 significó que los corsés podían ser más tensos. Los cordones ajustados se volvieron un poco más comunes en la época victoriana para lograr la moderna figura de curvas. No es demasiado irreal para Lo que el viento se llevó'La ultramoderna Scarlett O'Hara se metió en un corsé estrecho para una fiesta en 1861.
Sin embargo, los estudios de esqueletos han demostrado que muy pocos remodelaron sus torsos con corsés, y quienes lo hicieron tuvieron una esperanza de vida normal. Scarlett O'Hara y Elisabeth de Austria son la excepción, no la regla.
¿Por qué los dramas de época hacen que los corsés se vean tan mal?
La Dra. Kate Strasdin es profesora titular en el Fashion and Textile Institute. Ella explica que “el movimiento feminista de la segunda ola utilizó la condición de mujer del siglo XIX como arco de progreso. Esto significó que durante décadas, el siglo XIX haya sido algo demonizado y visto como el pináculo de la opresión femenina. Esto era cierto en muchos sentidos, pero el corsé no era necesariamente uno de ellos”.
20th Los cineastas del siglo XIX solían seleccionar cosas extremas que los hombres victorianos decían sobre los corsés, en lugar de mirar más ampliamente lo que las mujeres decían sobre sus corsés.
Hilary dice que “había un género erótico bastante popular en el siglo XIX”.th siglo que se centró en la sexualidad de los apretados cordones. Se ha sugerido que había mucha más pornografía sobre el tema que mujeres reales haciéndolo, lo que, francamente, no me sorprende mucho”.
El Dr. Doda sospecha que la imagen de mujeres aferradas a los postes de la cama mientras les ajustan el corsé, como en Lo que el viento se llevó, Titanic o forastero, proviene de caricaturas del siglo XVIII. Estas imágenes estaban destinadas a burlarse de las mujeres aristocráticas, no a mostrar lo que hacían cada día.
Los corsés más extremos y llamativos se exponen en los museos. Los corsés suelen estar completamente atados a los maniquíes, aunque la mayoría de las mujeres los usaban con un espacio de dos pulgadas en la espalda.
Kate dice: «Es lo mismo que tomar un par de tacones de siete pulgadas de alto y usarlos dentro de cien años, para sugerir que las mujeres usaban esos zapatos todo el tiempo».
Bridgerton Simone Ashley, los grandes Elle Fanning y el favoritoEmma Stone se ha quejado recientemente de usar corsés en dramas de época. Pero sus experiencias en el televisor no son las mismas que las de las mujeres de hace siglos.
La diseñadora de vestuario de María Reina de Escocia le dijo a Page Six que “si tienes toda una corte llena de mujeres, no puedes hacer todos los corsés, por lo que terminas usando algunos corsés estándar y tal vez no te resulten cómodos. Pero un corsé hecho a medida debería ser realmente cómodo”.
Kate explica: “Es esencialmente una cuestión de presupuesto, no de comodidad. ¿Qué pasa con los dramas de época como Bridgerton es que tienen que utilizar apuntalamientos bursátiles y, por lo tanto, por supuesto, será un escenario único que no sirve para todos”.
¿Por qué preocuparse?
Sí, sabemos que el realismo no es la prioridad en piratas del Caribe. Vimos a Jack Sparrow practicando esquí acuático con tiburones zombis. Y lo entendemos Bridgerton Es entretenimiento, no un documental.
Pero cuando los dramas de época son la principal forma de relacionarnos con el pasado, es importante que comprobemos qué sucedió realmente en esa época. No queremos que se nos meta en la cabeza que las mujeres se obligaron unas a otras a utilizar dispositivos de tortura bordados durante 500 años. Corremos el riesgo de reducir a las mujeres a víctimas pasivas o tontas fanáticas de la moda, y eso no es justo para ellas.
Además, cuando te das un atracón Bridgerton Al prepararte para la temporada 3, tienes la satisfacción de decirles a tus amigos: «En realidad, leí un artículo sorprendentemente bien escrito en Guarida de frikis. Charlotte no podría morir desangrada rebotando en ropa interior”.
