La Segunda República Española: Reformas, Conflictos y Guerra Civil

La Segunda República Española: Reformas, Conflictos y Guerra Civil

Este es un texto histórico-político obtenido de una fuente primaria. Fue redactado por Manuel Azaña en 1939, al finalizar la Guerra Civil Española.
Azaña fue presidente del gobierno y presidente de la República. Su labor política consistía en modernizar España e instaurar una serie de reformas que consiguieran acabar con los problemas que tenía el país por ese entonces. Azaña conoció el exilio al final de la Guerra Civil y en él murió.
Las ideas fundamentales de este texto son el éxito de que con la República se esperaba la mejora tanto en la política como en la economía y sociedad españolas; y que además ésta reforzó la acción del Estado que era imposible aplazar para los obreros campesinos, ya que se sabía que existía una fuerte diferenciación económica entre las distintas clases y que las condiciones de los jornaleros en el campo eran pésimas.

La Década de 1920 y el Advenimiento de la República

Hacia 1928 comenzó la decadencia del régimen primorriverista debido a diversos factores como el gran número de opositores al régimen y la reaparición de los políticos socialistas.
Tras la renuncia de Primo de Rivera, el rey nombró jefe de gobierno al general Berenguer, y tras él, al gobierno Aznar, el cual convocó elecciones municipales.
Sorprendentemente los candidatos republicanos y socialistas triunfaron.
Sus resultados determinaron el derrumbamiento del régimen monárquico y finalmente, Alfonso XIII decidió abandonar España. El 14 de abril de 1931 era proclamada la II República.

El Entusiasmo Inicial y las Primeras Reformas

El nuevo régimen fue recibido por la población española con entusiasmo generalizado. Las primeras medidas fueron impulsadas por el gobierno provisional durante los meses posteriores a la proclamación de la República.
Después, los republicanos de izquierda y los socialistas formaron un nuevo gobierno que duró 2 años.
Durante el bienio republicano-socialista se impulsó un amplio programa de reformas entre las que destacaban la reforma religiosa, educativa, militar y sobre todo la agraria. Esta reforma pretendía reducir el paro en el campo.
Como el latifundismo y el elevado número de jornaleros que carecían de tierra seguían siendo los problemas más importantes, los 3 objetivos de la reforma agraria eran: la entrega de parcelas a los campesinos para evitar conflictos en las zonas rurales; en segundo lugar, la anulación del poder económico de los grandes terratenientes y, por último, el incremento de la producción total del sector agrario.

La Ley de Reforma Agraria de 1932

La Ley de Reforma Agraria fue aprobada por el Parlamento en 1932 tras largas y lentas discusiones a causa del obstruccionismo practicado por los partidos de derechas. Dentro del contenido de esta ley destacaban tres puntos:

  • Las tierras pertenecientes a los aristócratas más importantes quedaron expropiados sin indemnización
  • Todos los latifundios, las fincas arrendadas y los terrenos abandonados fueron declarados expropiables a cambio del pago de una indemnización por parte del Estado a sus propietarios
  • Las tierras expropiadas pasaban a propiedad estatal para ser destinadas al asentamiento de campesinos.

Su promulgación desató las más desmesuradas expectativas de mejora entre los jornaleros más pobres, pero provocó un gran desasosiego entre todos los propietarios agrarios. Sin embargo, la aplicación de esta ley y el ritmo de reparto de tierras fueron demasiado lentos.



En consecuencia a todas estas reformas tan radicales llevadas a cabo por los republicanos izquierdistas, en las siguientes elecciones salieron elegidos 6 los grupos de derecha. Durante el bienio radical progrecista se propusieron todas las contrarreformas a las reformas propuestas por los republicanos, entre ellas la contrarreforma agraria. Esto provocó un terrible descontento entre los grupos proletarios que en octubre de 1934 intentaron conquistar el poder por medio de una insurrección armada que fue duramente reprimida por el Ejército.
Tras ello en 1936 los republicanos de izquierda ganaron las elecciones y formaron el Frente Popular. Esta coalición tomó decisiones tan importantes como hacer una ley de amnistía y excarcelación de los presos detenidos tras los sucesos revolucionarios de octubre o acelerar la aplicación de la ley agraria pero también se enfrentó a graves dificultados como la agudización de los conflictos sociales, paro atentados, etc. Además hubo una enorme-o oposición por parte del Ejército y de los grandes grupos socioeconómicos que querían impedir el desarrollo de las reformas. El golpe del Ejército contra la República se produjo e11? de julio de 19361 los españoles se encontraban enfrentados por diversos motivos el comenzaba la Guerra Civil.

En conclusión se puede decir que tras el régimen dictatorial impuesto por Primo de Rivera la 11 República representaba una mejora y un cambio radical en la vida y las condiciones de los proletarios y los jornaleros. A pesar de ello duró muy poco y hubo un continuo enfrentamiento entre los grupos de derecha y los de izquierda lo que ocasionó finalmente que comenzara una larga y terrible guerra civil.

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