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0     May 14, 2024 - 2:43 pm

Hace unos días, en la pasada FILBo, una gran amiga me recomendó leer los libros de Maggie O´Farrell: “Hamnet” y “Retrato de casada”. Por supuesto que los había visto en librerías y había leído algo en el boletín que me envía por correo electrónico la Editorial “Libros del Asteroide”. Aún tengo pendiente por terminar “Retrato de casada”, así que, en esta ocasión, la reseña corre por cuenta de una obra maravillosa: “Hamnet” (Libros del Asteroide, 2020), con una bella traducción de Concha Cardenoso, ganadora del Premio de Ficción de la Mujer en 2020 y del National Book Critics Circle Award, y catalogada por el diario El País de España, como la mejor novela en 2021.

“Hamnet”, de Maggie O’Farrell, es una obra que combina ficción histórica y profundidad emocional para explorar la vida de una familia notable en la Inglaterra isabelina. La novela se centra en Hamnet, el hijo olvidado de William Shakespeare, cuya corta vida y muerte prematura se entrelazan con la de su famoso padre, aunque el nombre de Shakespeare nunca se menciona directamente en el libro.

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La trama se desarrolla principalmente en Stratford-Upon-Avon en la década de 1580 y se centra en la vida de Agnes (Anne Hathaway, en la historia real), esposa de Shakespeare. La historia avanza hacia el punto culminante trágico: la muerte de Hamnet, el hijo gemelo de once años, a causa de la peste bubónica. Este evento devastador es el núcleo emotivo de la novela, alrededor del cual O’Farrell teje una narrativa que explora el amor, el luto y la creatividad.

La autora, lejos de fijarse únicamente en los acontecimientos conocidos, reivindica con ternura las inolvidables figuras que habitan en los márgenes de la historia y ahonda en las pequeñas grandes cuestiones de cualquier existencia: la vida familiar, el afecto, las ausencias, el maltrato, el dolor y la pérdida.

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Agnes, una particular joven de espíritu libre, es el personaje más destacado de la novela; es retratada como una mujer de una inteligencia y sensibilidad excepcionales, dotada de una conexión casi mística con la naturaleza y una habilidad extraordinaria para la curación con plantas. Agnes conoce a un joven preceptor de latín, igual de extraordinario a ella, e intuye que es el hombre con el que está destinada a compartir su vida. Queda embarazada y contrae matrimonio, pero la estabilidad del vínculo se verá puesta a prueba, primero por sus parientes, los parientes de su familia política, la depresión de su esposo por su inutilidad laboral – lo que lo lleva a viajar a Londres-, y después por la inesperada muerte de Hamnet.

A pesar de las restricciones, Agnes muestra autonomía y resistencia, desafiando las expectativas sociales a través de su independencia, en la cual tiene mucho que ver su hermano, y sus habilidades no convencionales de sanación.

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Aunque la presencia del niño Hamnet es efímera, es el catalizador de toda la trama, representando la fragilidad de la vida. El padre, John, a quien se refieren como el “esposo ausente” o “el padre”, es una sombra en la vida de sus seres queridos, sumergido en su carrera teatral en Londres.

La Inglaterra isabelina del siglo XVI es excepcionalmente recreada por O’Farrell, desde las calles empedradas de Stratford hasta el bullicioso Londres. La sociedad está marcada por rígidas estructuras de género, enfermedades sin cura como la peste y un panorama religioso y político en constante cambio. La posición de la mujer, especialmente, es compleja; Agnes es marginada por su peculiaridad, tanto como respetada por sus habilidades de curación. Su propia madrastra, en un momento dado, inclusive se pone en su contra por dichas peculiaridades.

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O’Farrell ha declarado su fascinación por Shakespeare y la era isabelina. Sin embargo, más que centrarse en el dramaturgo, ella explora los espacios domésticos y las emociones que probablemente influenciaron su obra. La intertextualidad con las obras de Shakespeare es sutil pero profunda, especialmente en la conexión entre la muerte de Hamnet y la tragedia “Hamlet”.

La novela utiliza una estructura no lineal, alternando entre el presente de la muerte de Hamnet y flashbacks que construyen la relación entre Agnes y su esposo. La prosa de O’Farrell es lírica y sensorial, capturando tanto la belleza como la brutalidad de la vida cotidiana. Las voces narrativas varían, con un enfoque predominante en Agnes, pero también permitiendo que otros personajes y hasta el entorno, tomen la voz.

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“Hamnet” dialoga con “Hamlet” no solo en su título sino en su exploración del duelo y la pérdida. También hay ecos de novelas históricas contemporáneas como “Wolf Hall” de Hilary Mantel, en su intento de humanizar figuras históricas.

La novela es una obra rica y emocionalmente resonante que ilumina la vida de aquellos que orbitaron alrededor de uno de los más grandes dramaturgos de la historia, ofreciendo una visión fresca, al microdetalle, y profundamente humana de una época a menudo idealizada, con un final francamente conmovedor.

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De la autora:

Maggie O’Farrell es una destacada escritora británica nacida en Irlanda del Norte en 1972. Es conocida por su estilo narrativo profundo y emotivo, que a menudo explora las complejidades de las relaciones humanas y las experiencias vitales. O’Farrell creció en Gales y Escocia y estudió literatura Inglesa en la Universidad de Cambridge.

Su primera novela, “After you’d gone” (2000), recibió elogios inmediatos y ganó el Premio Betty Trask. Desde entonces, O’Farrell ha continuado escribiendo con gran éxito, publicando varias novelas que han sido aclamadas, tanto por la crítica como por los lectores.

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Entre los datos curiosos de su vida, Maggie O’Farrell ha compartido en entrevistas que es una ávida nadadora, disfrutando especialmente de nadar en aguas abiertas. También ha hablado abiertamente sobre su lucha con la dislexia, lo que no ha impedido que desarrolle una carrera literaria prolífica y respetada.

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O’Farrell también ha sido reconocida por su capacidad para tejer la historia y la ficción de manera magistral, mostrando un interés particular en las voces y perspectivas femeninas a lo largo de la historia. Su obra refleja un profundo interés en explorar las emociones y experiencias humanas desde múltiples ángulos, lo que la ha convertido en una de las voces literarias más resonantes de su generación.

*Las opiniones expresadas en este texto son responsabilidad exclusiva de su autor y no representan para nada la posición editorial de Pulzo.