Carles me recomienda Coleen Rooney: la verdadera historia del caso Wagatha Christie. "Tremenda basura, pero s� que lo vas a apreciar", me escribe. Y, efectivamente, acierta. No he visto ni la mitad del primer episodio de esta miniserie documental de Disney+ y ya le respondo que "estoy dentr�simo". Dentr�simo de la vulgaridad de los Rooney, Wayne y Coleen. A ella alguien se la est� liando, filtrando a la prensa sensacionalista las publicaciones de su cuenta privada de Instagram. Lo mismo que estoy haciendo yo con Carles reproduciendo aqu� sus mensajes: "Espera al dos. Cuando se convierte en detective Pikachu". Eso hace Coleen. Y no se le da tan mal. Si aceptas la premisa de que Instagram es important�simo (as�, en general), la historia de Wagatha es de intriga; si el solo concepto WAG (acr�nimo Wifes And Girlfriends con el que en Reino Unido se designa a la subespecie de novias y mujeres de futbolistas) ya te da risa, la investigaci�n y posterior juicio de Coleen tambi�n te la dar�n. Rica y famosa sin dar un palo al agua, Coleen es la WAG arquet�pica: da igual de donde vengas, si te casas con un futbolista terminas operando en unos par�metros intelectuales y est�ticos muy limitados. Como ella: limitada.
Los responsables de Coleen Rooney: la verdadera historia del caso Wagatha Christie no se cortan un pelo: hasta el perezoso desenlace de la historia parece estar contado con una desidia intencionada, dejando claro que no deber�as darle m�s vueltas a la trifulca entre Coleen Rooney y Rebekah Vardy (otra WAG) porque las dos son bastante tontas. Y no pasa nada. Con el dinero que tienen podr�an tener el cerebro de un platelminto y seguir siendo igual de felices. Y aburrirse igual. Coleen Rooney: la verdadera historia del caso Wagatha Christie comienza record�ndonos el acceso a la fama de Wayne Rooney su novia. No eran ni mayores de edad y ya eran famos�simos. �l por su talento, ella por ser su chica. No es f�cil gestionar eso. Ni siquiera para una detective tan sagaz como Coleen. "No se la juegues a una chica que juega mejor que t�", public� ella en Instagram, cuando ya sab�a que alguien estaba exponiendo sus fotos privadas. Luego, cuando ya ten�a claro qui�n era la traidora, expuso su nombre en Twitter. Sus abogados (los de las dos) flipaban. Y al tiempo se forraban. Seg�n la serie, el juicio entre Coleen y Rebekah (les) cost� tres millones de libras. Cuando eres muy rica y muy burra, tus hobbies son muy raros. Y muy caros.