La intrigante nueva vida del ex del Valencia Simone Zaza en un pueblo de 1.000 habitantes: "Ni retirado ni en activo..." | Relevo
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La intrigante nueva vida del ex del Valencia Simone Zaza en un pueblo de 1.000 habitantes: "Ni retirado ni en activo..."

El exvalencianista lleva más de dos años sin jugar, aunque no ha anunciado oficialmente que se retira del fútbol.

Simone Zaza, durante un partido del Valencia./EFE/Kai Försterling
Simone Zaza, durante un partido del Valencia. EFE/Kai Försterling
Julio Ocampo

Julio Ocampo

Durante la noche de San Valentín 2016 sucedieron cosas extrañas en el Juventus Stadium: la Vecchia Signora se impuso 1-0 al Nápoles gracias al gol de Simone Zaza- desviado por Albiol- en el minuto 88. En la grada estaba un Mario Mandzukic atónito que no lo podía creer. En el verde, fue todo el banquillo a abrazarle, con Barzagli in primis. Esa victoria final le daba medio Scudetto al armazón de Allegri, que pese a llevar quince victorias consecutivas sólo ahí -tras el golazo imperfecto de un Zaza que había entrado por Morata- obtuvo el sorpasso definitivo ante los de Sarri. Era la primera vez que sucedía en toda la temporada, y lógicamente ya no lo soltó.

Hasta entonces, Zaza venía de cuajar notables temporadas en el Sassuolo. Era un delantero rápido, con carácter y personalidad. Iba bien de cabeza y tenía una zurda que, además, no estaba exenta de calidad.

Así las cosas, tras esa noche de los enamorados no se sabía muy bien si el delantero de Basilicata (sur de Italia) llegaba definitivamente para afianzarse o bien decía adiós una vez más para después volver, y así sucesivamente. "Yo me ocupo de la actualidad del Torino, que fue su último equipo. Rescindió el contrato el 31 de agosto de 2022. Desde entonces no tengo noticias. Sinceramente, no sé si se ha retirado o sigue en activo", explica la periodista Elena Rossin.

Lo mejor es recapitular: Zaza ganó su primera y última liga ese 2016. Después, el entonces seleccionador (Antonio Conte) se lo llevó a la Eurocopa. Esa Italia obrera -con Ghiaccherini, Chiellini, Pellè, De Sciglio, Parolo, Eder y Simone Z.- fue quizás el bloque más interesante del torneo. Se impuso con solvencia a España y cayó en cuartos contra la todopoderosa Alemania en penaltis. Zaza lo falló. Esto confesó a los micrófonos de Fox Sports un año después, cuando ya era jugador del Valencia. "Ese maldito lanzamiento me quitó el sueño, aunque es cierto que no pedí tirarlo. Fue el peor momento de mi carrera deportiva, que lo superé gracias a mi familia".

Lo que vino después, tras un periplo negro en el West Ham, fue un maravilloso y tonificante paso por Mestalla en las filas del Valencia, donde anotó veinte goles en 59 partidos. Pura complicidad con los che… Fue el penúltimo capítulo de un talento que colgó las botas sin hacerlo con tan solo treinta años. No se apagó para siempre, porque en realidad nunca estuvo encendido del todo, y probablemente fue perfecto así. La herida que se recrudece constantemente con la sal, y el dolor que le recuerda estar muy vivo.

Final en el Toro

Hoy Simone Zaza vive, retirado de todo, en la región de Basilicata. Concretamente en Metaponto, cerca de su Polidoro natal. No ha comunicado oficialmente su retirada del fútbol, aunque es también notorio que rechazó ofertas. Como la del Bari, en Serie B. Así lo confirmó en su día Ciro Polito, director deportivo: "Intenté persuadirle para que volviera al fútbol, pero no lo conseguí".

Ha pasado mucho tiempo, quizás demasiado, desde que el atacante italiano abandonara la Liga española para volver a Turín, en este caso con los colores del Toro. El objetivo, entre otros, era hacer las paces con la regularidad para activar al radar de la Nazionale. Lejos de la realidad, siguió siendo él: un verso libre sin rima, un sónar que no emite localización submarina, una fiesta a punto de terminar o de comenzar, no se sabe bien. Perfecto en sus infinitas imperfecciones técnicas o de carácter, a Simone le definen su golazo con desviación de Albiol y la carrerilla de culto delante de Neuer antes de chutar con las vísceras.

"Estábamos ilusionados cuando llegó al Torino, pero desilusionó. Era el 17 de agosto de 2018. El Toro pagó dos millones de euros por la cesión, que incluía una compra obligatoria fijada en doce. Le hizo un contrato hasta 2023 con 1,8 millones por temporada. En teoría, el bomber haría dupla con Belotti, pero nunca terminaron de congeniar". Así lo recuerda Elena Rossin, una vida entera escribiendo para Torinogranata.it. "Todo era una noria. Sí, el 11 de marzo de 2021 le hizo un doblete al Sassuolo, luego puso en jaque a la defensa de la Roma, pero no estuvo a la altura de los esperado".

La jerarquía de Zaza jamás entró en simbiosis con Mihajlovic, Mazzarri, Longo, Giampaolo, Nicola o Juric, actual técnico granata, quien de hecho se trajo a Sanabria nada más llegar para jugar solo con un punta. Esto dijo el director deportivo del club -Davide Bagnati- en su despedida, un año antes de lo estipulado: "Agradezco a Simone Zaza que haya dejado la entidad, pero también por todo lo que hizo por nosotros. Por todo lo que ha significado no durante la última temporada sino la precedente. Le deseo todo lo mejor".

Dicen los psicólogos que las certezas son necesarias para evitar cortocircuitos en el ser humano. Son necesarias, incluso negativas. Simone Zaza es una obra de arte incompleta, incierta. No se sabe muy bien si el genio la debe terminar o ya la está destruyendo porque no le gusta. Lo mejor para todos es que le delataron siempre sus goles, metáforas de su dolor, su genio, la rabia iracunda de un boxeador en espera de hacer las paces con la vida. Soberbio y completo en el área cuando estaba bien, más que un premio, suponían una liberación, un alivio. Quién sabe sin el Zaza de las polaridades pretendía, sufría por ser el mejor solo por miedo a creerse que verdaderamente podía ser todo lo contrario. Quien sabe el porqué de tantas emociones contenidas, cuántos retos y duelos tanto en el césped como en las profundidades del alma.

"Mira, si llamas esta tarde igual me pillas con él y te lo paso". Esta ha sido, generalizando, la respuesta que el padre de Zaza -Antonio- ha dado a Relevo durante los últimos cuatro meses. Leyendo entre líneas no parece dispuesto a dar la entrevista, aunque bien podría ser todo lo contrario. Ya se sabe lo del insoportable peso de la ambigüedad. Por eso tuvo que nacer este artículo. Para mitigar, ligeramente, la duda.