Nueve mujeres acusan al productor francés Alain Sarde de abusos y violaciones - La Nueva España

Violencia sexual

Nueve mujeres acusan al productor francés Alain Sarde de abusos y violaciones

Acusan al productor de agresiones que tuvieron lugar entre 1980 y 1990, cuando algunas de ellas aún eran menores de edad

La actriz Juliette Binoch, una de las firmantes de un manifiesto pidiendo una ley contra la violencia sexual

La actriz Juliette Binoch, una de las firmantes de un manifiesto pidiendo una ley contra la violencia sexual / EP

Abril Rocamora

En pleno estallido de lo más tumultuoso del inicio del Festival de Cannes, la revista 'Elle' publicó este lunes nueve testimonios de actrices y mujeres vinculadas con el séptimo arte que acusan al productor Alain Sarde de agresión sexual y violación durante la década de 1980 y 1990. También fue acusado en 1997 por un caso de proxenetismo de lujo que involucraba a numerosas personalidades.

El acusado es un reputado productor francés que ha participado en doscientos largometrajes, cincuenta de ellos fueron seleccionados en la competición oficial de Cannes. Entre los títulos están películas como 'El adversario' de Nicole García, 'Esther Kahn' de Arnaud Desplechin, 'Mulholland Drive' de David Lynch o 'El pianista' de Roman Polanski, que ganó la Palma de Oro en 2002.

Estos nueve testimonios, algunos mantenidos en el anonimato, acusan al productor francés de utilizar su posición privilegiada para proferir comentarios fuera de tono, y de haberlas violado o agredido sexualmente cuando eran menores de edad o jóvenes actrices. Uno de los casos que publicaba el lunes la revista 'Elle' es el de Annelise Hesme, que cuenta como el productor "le ofreció trabajo de 'escort' en una cena con actores y distribuidores, me dijo que les gusta tener mujeres bonitas en la mesa, es de pago y si entre todos hay uno que te gusta, te toca a ti ganar más dinero por la noche".

Bajo el pretexto de encuentros profesionales y ofertas de papeles en sus largometrajes, las actrices describen un 'modus operandi' similar: el productor aprovechaba para acercarse a ellas, intentar seducirlas y agredirlas posteriormente.

Con el nombre ficticio de Elsa, esta actriz de series de televisión entre 1990 y 2000, habla de una tarde de 1985, cuando aun tenía 15 años, donde supuestamente fue a casa de Alain Sarde para conseguir un papel en una película del director Robin Davis. "Me dijo que el papel estaba hecho para mí". El productor tenía entonces 33 años. La llevó a una 'visita de obra', un dormitorio abierto al salón. "Inmediatamente quise irme, pero de repente me empujó sobre la cama y saltó sobre mí. Recuerdo muy bien sus labios, su boca asquerosa", relata esta actriz.

En la mayoría de estos casos, los testimonios denuncian que sus propios agentes, que las ponían en contacto con Sarde, no les ofrecieron el apoyo necesario y les restaron importancia a los actos del productor. "Escucha, es el mayor productor de París. Es su palabra contra la tuya. Acabas de empezar, si quieres que esto termine ahora, ¡adelante, ve a la policía!", relata Hesme la respuesta que obtuvo de su agente cuando le llamó tras su encuentro con Sarde.

"Era un sistema en el que hombres poderosos miraban lo que pasaba en el mercado, actrices jóvenes, y se ayudaban de la complicidad de nuestros agentes", añade en el reportaje una actriz muy conocida por el gran público que prefiere permanecer en el anonimato. Otra presunta víctima de Sarde que tenía 15 años en 1985 cuando conoció al productor en su casa para un papel, relata cómo sintió que caía en una "trampa" tras aceptar una invitacion del productor a su apartamento. “Muy rápidamente me explicó que si quería irrumpir en el cine tenía que ser amable con él. No tuve elección, me sentí paralizada. Me quedé paralizada por el miedo, aprovechó para violarme brutalmente por detrás. Me sentí culpable, como si fuera yo quien se había arrojado a la guarida del lobo», relata la víctima, que nunca denunció, "llena de vergüenza”.

Laurence Côte, César a la actriz revelación en 1997, explica en 'Elle' cómo era el clima social y profesional del cine en la Francia de los 80 y los 90: “Nosotras, las actrices, éramos carne fresca. Los productores tenían poder de vida o muerte sobre nosotros. Con un chasquido de dedos, elegían quién aparecería en una película o quién desaparecería de ella ». Una atmósfera tóxica que la llevó, al igual que a otra víctimas, a abandonar su carrera y alejarse del cine. "Nunca volví a actuar en ninguna de sus películas. Pensé que con un César lograría algo... Pero no me gustaba la seducción, no sabía nadar en aguas turbulentas, y es un mundo de tiburones. Realmente me quemó. Me mantuve alejada del cine".

Explica la revista 'Elle' que ninguna de estas nueve mujeres ha testificado jamás contra Alain Sarde ante ningún tribunal. Su abogada, Jacqueline Laffont, informada de la publicación de estas acusaciones por la propia revista, afirma que "Alain Sarde está indignado y devastado por estas acusaciones que califica como falsas, que le atribuyen comportamientos que condena y que le son completamente ajenos".

Sarde ya se vio afectado por un escándalo sexual en 1997. Luego se vio implicado en un caso de proxenetismo de lujo. Durante las investigaciones, dos mujeres acusaron al productor de haberlas violado. Alain Sarde fue acusado de violación e intento de violación el 8 de julio de 1997 y encarcelado en la prisión de La Santé. Según relata el artículo de 'Elle', el juez de instrucción encargado de la investigación, Frédéric N'Guyen, vio amontonarse sobre su escritorio las cartas de apoyo al productor enviadas por la élite del cine francés y fue sustituido por otra magistrada que dictó a favor del productor.