La llegada de Lawrence Stroll como presidente de la empresa en 2020, y la inyecci�n de dinero que aport�, ha dado un giro de 180 grados a una compa��a que estaba un poco "oxidada". Por un lado, tenemos la divisi�n deportiva de la firma, con un equipo de F�rmula 1 que progresa de la mano de Alonso y de un staff t�cnico de primer nivel, absolutamente implicado para plantar cara a los intocables Red Bull y medirse ya de t� a t� con grandes nombres como Ferrari, McLaren o Mercedes. En un segundo nivel, sus modelos GT3 tambi�n han arrancado la temporada del Campeonato del Mundo de Resistencia y otras competiciones reservadas a turismos como unos de los favoritos en cualquier parrilla de salida.
La otra parte beneficiada en esta nueva era es la de veh�culos de producci�n en serie, que recibe un soplo de aire fresco y ha empezado la renovaci�n de la gama con modelos m�s que interesantes. El pasado a�o se presentaba el Aston Martin DB12 en versiones Coup� y Volante, y ahora le acaba de tocar el turno al coche clave de la familia, el Vantage. Las entregas de las primeras unidades comienzan en estas semanas y su precio para Espa�a es de 225.870 �.
Mucho m�s din�mico
Lo primero que hay que destacar es el enorme salto que ha dado en dinamismo. Hasta ahora, el Vantage era uno de los deportivos m�s bellos y elegantes del mercado, pero su rendimiento frente a una conducci�n exigente quedaba por detr�s de los aut�nticos atletas de la carretera. Era un GT con may�sculas, confortable, lujoso, r�pido... pero no un "purasangre" para rodar en circuito ni un devorador de kil�metros incansable cuando se apuraban los l�mites en un puerto de monta�a.
Pues bien, esta filosof�a ha cambiado por completo y en el nuevo Vantage ya no se echan de menos esas prestaciones que aceleran el pulso de los conductores m�s capaces. Y, todo ello, sin perder un �pice del estilo y la clase inconfundibles que enamoraban al mism�simo James Bond. Porque sus dise�adores, a pesar de verse obligados a exagerar algunos aspectos como las entradas de aire del frontal o los pasos de rueda para aumentar las aptitudes deportivas del veh�culo, han sabido preservar unas l�neas limpias y fluidas que siguen provocando suspiros de admiraci�n a su paso.
Una joya de motor
Incluso el motor, que era uno de los puntos sobresalientes en el modelo anterior, mejora en muchos peque�os detalles que lo hacen a�n m�s brillante, sin necesidad de ning�n tipo de hibridaci�n. Se trata de un V8 biturbo de cuatro litros de cilindrada construido por el especialista a AMG, que desarrolla 665 caballos de potencia y 800 Nm de par, lo que equivale nada menos que a 155 CV y 115 Nm m�s que en la versi�n precedente.
Esto se consigue gracias a unos perfiles de levas modificados, a relaciones de compresi�n optimizadas, a un mayor tama�o de los turbocompresores y al aumento de la refrigeraci�n, para lo que se ha tenido que agrandar un 38 % el tama�o de la parrilla frontal, de manera que el flujo de aire fr�o que llega a los radiadores se incrementa en un 50 %. La necesidad de una capacidad t�rmica superior ha exigido la instalaci�n de dos radiadores auxiliares.
Para engranar con �xito las prestaciones de esta mec�nica, la caja de cambio autom�tica ZF de ocho velocidades tambi�n ha sido afinada en su puesta a punto, incorporando una relaci�n de transmisi�n m�s corta y un calibrado espec�fico de cada marcha, con el objetivo de lograr una aceleraci�n superior y unos tiempos de cambio m�s r�pidos. El resultado: el nuevo Aston Martin Vantage acelera de 0 a 100 km/h en 3,5 segundos y alcanza una velocidad m�xima de 325 km/h.
Muchos detalles t�cnicos
Pero estas cifras son solo un anticipo de otros muchos avances. La carrocer�a de aluminio se ha reforzado para aumentar la rigidez torsional, con un travesa�o frontal desplazado hacia los puntos de anclaje de la elaborada suspensi�n de doble brazo, lo que tambi�n supone ganar en precisi�n de la direcci�n. Sendas barras entre las torretas de la suspensi�n delantera y la trasera redondean el trabajo de dar mayor solidez al conjunto.
Los amortiguadores adaptativos inteligentes y un diferencial autoblocante electr�nico para el eje posterior son fundamentales para que este chasis reforzado pueda absorber con precisi�n y control la enorme potencia que entrega el motor a la m�nima insinuaci�n sobre el pedal del acelerador.
Prueba a fondo
�ltimamente, en Aston Martin se habla espa�ol. La llegada de Fernando Alonso al equipo de F�rmula 1 ha supuesto un revulsivo para toda la empresa, que siente admiraci�n por �l, y por eso no es de extra�ar que el lugar elegido para presentar este modelo haya sido la zona sur de nuestro pa�s. Primero en las carreteras de Huelva y Sevilla y, posteriormente, en el circuito de Monteblanco, tuvimos absoluta libertad para exprimir a fondo las posibilidades del Vantage en las condiciones m�s duras que uno pueda exigir.
Empezamos conduciendo por un recorrido muy variado, de algo m�s de 150 kil�metros, en el que encontramos autov�a, tramos de carretera en buen estado y zonas de muchas curvas enlazadas, algunas muy r�pidas y otras que se cerraban de repente, obligando a frenadas fuertes y constantes.
De inmediato nos sorprenden dos cosas, el extraordinario rendimiento del motor, con un derroche de potencia descomunal a cualquier r�gimen de giro, y la eficacia de los frenos, que aguantaron un uso muy intenso sin desfallecer. La unidad que probamos estaba equipada con la opci�n de los frenos carbonocer�micos, mucho m�s resistentes a la fatiga y que ahorran 27 kilogramos de peso en masas no suspendidas, una ventaja que tambi�n lo es de cara al comportamiento.
Eficaz en carretera...
La siguiente impresi�n positiva, despu�s de unos cuantos kil�metros, fue el comportamiento deportivo de este Vantage, muy mejorado respecto al anterior que, en esas mismas condiciones no hubiera permitido un ritmo tan elevado y con tanta seguridad. La direcci�n el�ctrica es precisa y "comunicativa", lo que transmite una agradable sensaci�n de control sobre el coche.
Si el asfalto est� en buen estado, es recomendable seleccionar el modo sport +, con una amortiguaci�n m�s firme y una direcci�n m�s dura que ayudan a mantener el veh�culo en el trazado elegido. Si, por el contrario, los baches hacen acto de presencia, es m�s f�cil el guiado con la suspensi�n en una configuraci�n no tan agresiva, que permite ir deprisa con menos estr�s y m�s confort.
... y r�pido en circuito
La prueba de fuego definitiva lleg� al entrar en el circuito de Monteblanco. Aqu�, es dif�cil camuflar peque�os problemas de construcci�n y de puesta a punto, porque rodando a un l�mite que en carretera no se puede conseguir, los fallos se detectan enseguida.
Por ejemplo, la capacidad de frenada va perdiendo esa consistencia que vimos anteriormente, pero es algo l�gico, pues ning�n coche con unas pastillas de freno de serie, dise�adas tambi�n para no hacer ruido y mantener un tacto c�modo sobre el pedal, es capaz de soportar el maltrato continuado en una pista. Solo el hecho de frenar a fondo en final de recta, cuando llegas a 270 km/h y en pocos metros reduces a menos de 100 km/h para afrontar la primera curva, somete a discos y pastillas a temperaturas elevad�simas que nunca alcanzaremos en la calle.
Manos expertas
Quitando ese punto absolutamente normal para cualquier coche de producci�n, el Aston Martin Vantage se desenvuelve con una soltura sobre el asfalto de Monteblanco digna de un deportivo de verdad. Para graduar la experiencia al gusto y nivel de pilotaje de cada uno, el control de estabilidad se puede regular en ocho posiciones o desconectar por completo. En la posici�n de m�xima intervenci�n, no se nota una actuaci�n demasiado intrusiva, pero s� lo suficiente para ayudar a manejar la potencia salvaje de este motor V8 que cautivar� a cualquiera.
A medida que pasamos a posiciones con menor intervenci�n del control de estabilidad, la conducci�n se va complicando y llega un momento en que es muy delicado pisar a fondo el acelerador a la salida de una curva si el veh�culo no est� totalmente recto. A partir de cierto punto, los coletazos del tren trasero, incluso en las zonas m�s r�pidas, exigen unas manos demasiado expertas para no asustarse y hacer buenos tiempos por vuelta. El consejo, que cada uno vaya probando hasta donde sea capaz de sentirse seguro, pero no desconectar por completo el ESP para que el coraz�n no sufra.
Elegancia y deportividad
La conclusi�n es que el nuevo Aston Martin Vantage ha dado un paso de gigante en cuanto a deportividad y ahora transmite sensaciones que antes no estaban a su alcance. Pero lo bueno de esta transformaci�n es que se consigue manteniendo el confort, la elegancia y el cuidad�simo lujo del interior que siempre ha distinguido a los modelos de la marca brit�nica. Materiales de gran calidad, un sistema de informaci�n y entretenimiento de �ltima generaci�n con la m�xima conectividad, un dise�o del salpicadero donde lo digital se combina con el buen gusto y, en definitiva, un ambiente exquisito es lo que destaca al acceder al habit�culo del coche.