Al ejercer y entregar su corazón en la licenciatura de enfermería especialista pediátrica, Jackie Casto tomó la decisión de tatuarse a un niño con cáncer en honor de todos los niños a los que ha atendido y entregado su cariño durante toda su carrera.

El diseño seleccionado representa a un niño muy sonriente que está luchando contra el cáncer infantil. Asimismo, con dicho tatuaje Jackie busca alentar a los pequeños, motivándolos en su día a día.

“Tratar con niños es sumamente complicado, pero a la vez es hermoso, en un adulto le podemos decir que tiene la enfermedad y explicarle el tratamiento, en cambio, en un niño no podemos hacer eso, necesitamos ganarnos su confianza para que nos permitan trabajar con ellos”, explicó Jackie, agregando que ellos como enfermeros sufren el duelo junto con los pequeños.

Dice que ella como enfermera constantemente forma un fuerte vínculo con los niños, además especificó que ella busca ser una buena enfermera para facilitar las quimioterapias de los pequeños y parte de esa misión es alegrarles sus días con películas, lentes y diademas locas, moños, calcamonías, pelucas, música y peluches.

Con una trayectoria mayor de 14 años Jackie ha vivido cientos de historias conmovedoras de diversos pacientes, sin embargo, fueron tres pacientes la que la marcaron recientemente, uno de ellos fue un pequeño que al perder la batalla contra el cáncer creó un gran duelo en Jackie debido a que acompañó al paciente y a su familia de inicio a fin, además en honor al pequeño en una forma de enfrentar su duelo decidió cortar su cabello.

La segunda fue una pequeña que soñaba con tener el pelo rojo y largo como la Sirenita, siendo Jackie la persona encargada de cumplir su sueño al comprarle una peluca y una corona de princesa.

Finalmente, está Carlos Emilio Carbajal, mejor conocido en el hospital como “Woody el Vaquerito”, un niño carismático con un gran corazón que desde el primer día fue ganándose el cariño de Jackie y sus compañeros con su inocencia y sus ocurrencias.

“Ser enfermera es increíble, pero sin duda alguna convivir con los niños es lo mejor del trabajo, yo siempre he dicho que para estar con ellos no podemos llegar con mala cara ni las vibras de la típica enfermera enojona del IMSS, nosotros debemos llegar alegres, listos para darles todo nuestro apoyo”, abundó orgullosa.

Cabe recalcar que el pasado 12 de mayo se conmemoró el Día Internacional a la Enfermería, como homenaje al natalicio de Florence Nightingale, enfermera formada en Inglaterra, a la que le atribuyen la creación de la enfermería profesional.

“Tratar con menores es sumamente complicado, necesitamos ganarnos su confianza para que nos permitan trabajar con ellos”, explicó Jackie