El religioso José Luis Martínez Gil, perteneciente a la orden San Juan de Dios y originario de Villalba de la Lampreana, ha fallecido a la edad de 80 años. 

Martínez Gil estuvo gran parte de su vida en Roma, desempeñando un papel clave como responsable de la farmacia vaticana. Durante su estancia en la Ciudad del Vaticano, tuvo el honor de atender a dos pontífices, Juan Pablo II y Benedicto XVI, brindándoles su cuidado y apoyo en asuntos de salud.

Además de su labor en Roma, el religioso zamorano también dejó su huella como misionero en Latinoamérica, donde sirvió en países como Bolivia, Argentina y Perú. 

José Luis Martínez Gil también fue un prolífico autor, dejando un legado de numerosos libros que abordaban temas tanto espirituales como históricos. Su profundo conocimiento y compromiso con la difusión del saber lo llevaron a ser miembro destacado de la Real Academia de la Historia.