Acaba de cerrar el ordenador y apagar la cámara para retirarse a la “República Independiente de La Puebla de Valverde (Teruel)”, como suele bromear. Allí nació en 1960 y presume de vecindad e identidad. Una dilata trayectoria marcada por la televisión, con centenares de coberturas y narraciones de fútbol en Liga, Copa, Recopa, Uefa o Champions. Además, un Mundial, unos Juegos Olímpicos. Y, eso sí, los éxitos de su querido Club Voleibol Teruel, junto a otros muchos eventos de balonmano, boxeo, hockey sobre hielo, motor,… Añádanse los tiempos de radio, prensa escrita o redes sociales y obtendremos el cuaderno de ruta laboral de Vicente Catalán Ros.
Mucho trillado desde que en el Colegio Menor General Pizarro de Teruel tecleara en una Olivetti los primeros artículos sobre balonmano para el periódico del centro donde residía por estudios. En 1975, ya colabora en Radio Teruel Cadena nº1 de las Emisoras Sindicales, hablando de balonmano local, que, además, practica con éxito, en una época próspera de este deporte allí. A los 16 años, obtuvo el carné de árbitro para ir ascendiendo y, con apenas 20, llegó a primera división, segunda categoría nacional. Pero él siguió, sobre todo, colaborando con los medios, entonces, desde Radio Cadena Española, mientras arbitraba a míticos como Auserón, De Andrés, Melo, Perramón o un tal Urdangarín. Entonces conocería a un compañero algo mayor, Félix Brocate. El servicio militar le privó de un ascenso a División de Honor y la decisión de cerrar etapa.
Un tiempo y un lugar en el que tuvo que compatibilizar los medios con un trabajo a jornada completa. En 1984, Teruel inauguró Antena 3 Radio bajo la dirección de Antonio Clemente. La FM era una novedad y una apuesta incierta. Además de la información local, Vicente Catalán colaboraba con Daniel Llagüerri en las desconexiones para informar de la Tercera División de fútbol, donde estaba un combativo CD Teruel. Llegaron las Vueltas Ciclistas e incluso un Campeonato del Mundo Júnior de Basket en Teruel, con Ferrán Martínez o Antúnez, entre otros.
Con una pasión que se convertiría en profesión, llegó a Teruel Radio Heraldo, su siguiente estación en el dial. Sin una cadena de emisoras que lastrase los horarios, creció como la espuma con las retransmisiones de fútbol en Tercera y Segunda B. Además, relevó en las narraciones a Salvador Asensio cuando sus viajes no le permitían llegar a tiempo a los partidos del Real Zaragoza y del CAI Zaragoza: su debut fue en la cancha del Oximesa Granada, luego iría a Manresa, Vitoria o Barcelona. Ocurría lo mismo con el Peñas de Huesca, con Jaime Ferrer como pareja microfónica. Más Vueltas Ciclistas a Aragón y el Gran Premio de Alcañiz desde el Circuito Guadalope junto a las voces de Luis y Teresa Bruned. Con la desaparición de la emisora, recaló en Radio Minuto de la mano de Chema Tejerina, narrando la brillantez del CD Teruel en Segunda División B.
Paralelamente, se hizo cargo de la corresponsalía de ‘El Mundo Deportivo’ en Teruel, donde destacaron sus reportajes al jugador del FC Barcelona, Luis Milla en sus vistas a su lugar de origen. Se sumaron colaboraciones con ‘El Punto Deportivo’ y el ‘Diario Equipo’ de Zaragoza.
De Radio Minuto a RNE en Teruel. Bajo la dirección de Julio Zapater, quien también participaba en las retransmisiones, abordó los deportes con una sintonía especial, “Soy minero”, en complicidad con José Ramón, técnico de la emisora. Vicente Merino lo incluyó en su prestigiosa tertulia emitida desde Zaragoza.
La televisión local, otro impulso en la expansión de los medios en esa época, llegó a Teruel por la iniciativa de los empresarios Jesús Durán y Fermín Pérez. Nacía TLT (Televisión Local de Teruel), de la que Catalán llegaría a ser director. Allí realizó las primeras experiencias en retransmisiones deportivas. La complejidad técnica hizo que esos partidos del CD Teruel se emitieran los lunes en diferido. Se sumarían alguna velada de boxeo, partidos de fútbol-sala, baloncesto con el Teruel Sport, gracias al empuje de un equipo valiente presidido por un nombre eterno del Basket en esa ciudad, Pepe Lanzuela, quien sería un hermano para Catalán.
El devenir político aragonés frustró en 1993 el primer intento de televisión autonómica en Aragón con Antena 3 TV, en el que Vicente Catalán, como otros muchos, se encontraba en plena fase de formación antes de verse truncado el camino. Afincado ya en Zaragoza, colaboraba con RNE y el legendario ‘Diario 16 Aragón’, que dirigía Miguel Ángel Liso.
Una llamada de Daniel Llagüerri al tiempo le abrió la puerta de la delegación de Antena 3 TV en Aragón. En ella vivió tres Copas del Rey (Calderón, Olímpico de Sevilla y Montjuic), siendo la primera televisión que grabó imágenes en el vestuario en plena celebración. Narró todas eliminatorias de la Recopa del Real Zaragoza en el 95, ya que Antena 3 TV la ofrecía a nivel nacional. El chasco llegó cuando la Final de París y el gol de Nayim lo ofreció La2 de RTVE.
La experiencia amasada le llevó a los deportes de Antena3 TV nacional, entonces bajo la dirección de José María García. Sin dejar Zaragoza, narró torneos de verano como el Gámper o el Teresa Herrera con Jorge D´Alessandro. Cubrió al Real Zaragoza y otros campos, como los del Logroñés o del Osasuna, siendo en este último donde vivió un momento complicado. Su unidad móvil fue volcada por los ultras aunque sin consecuencias físicas para él ni su compañera Merche Julián. Siguió narrando Champions con el Athletic y las competiciones europeas del Betis y el Dépor.
En su dilatada trayectoria, además de un Campeonato del Mundo de balonmano, que consiguió España como anfitriona, se sumaron los Juegos Olímpicos de Barcelona y el Mundial de Corea y Japón, aquel en el que acudió en mayo y volvió en julio, bajo la dirección de J.J. Santos y con José Antonio Luque codo a codo. Sí el del robo del egipcio Al-Ghandour ante Corea del Sur, que vivió a pie de césped.
En 2006, llegó su etapa en la televisión autonómica de Aragón. Bautizó espacios como ‘La Jornada’, el previo a las retransmisiones con ‘Directo deporte’ (sábados) o la ‘Zona Champions’, donde narraba los encuentros. Retransmitió tres finales de Champions: la de Wembley, que ganó el Barça; la del Santiago Bernabéu, en la que venció el Inter -con goles de Diego Milito- y la celebrada en el Allianz Arena, que obtuvo el Chelsea.
Puso la narración a partidos del Real Zaragoza en Primera y Segunda División, recordando, especialmente, aquel gol de cabeza de Cristian Álvarez, que narró a los sones del himno blanquillo, algo no preparado y de enorme repercusión. Compartió micrófono con comentaristas como César Láinez, Petón, Víctor Fernández y Juan Esnáider, una relación muy estrecha la que conserva con Gardel. En su recta final en Aragón TV fue editor de ‘El Avispero’ y, durante cuatro años, el coordinador de Deportes de los fines de semana.
Al margen del deporte, otras coberturas le llevaron a tres puntos de difícil digestión. Los 10 días seguidos en que vivió la tragedia del camping de Biescas y el atentado de Manolo Giménez Abad, en la cobertura de aquel triste Zaragoza-Numancia. Además, el trágico accidente en La Muela de un autobús de jubilados. Hechos que marcaron sin duda los episodios más duros de esa vida profesional de cuatro décadas que, ahora, ya descansa en el archivo del pasado.
