Meses antes del comienzo del Mundial de Argentina 1978, el periodista corresponsal Eduardo Ulrich es tentado por el gobierno para espiar a un médico brasileño exiliado. Lo que se verá después es el desarrollo de un derrotero personal que funciona como metáfora de un colectivo profesional que tuvo más de 100 desaparecidos pero que al mismo tiempo resultó un engranaje fundamental para el éxito político, militar, económico y cultural de la dictadura argentina en particular, y las latinoamericanas en general: el periodismo y los medios de comunicación.

“Cuando hice el documental Operación Cóndor con (la ex detenida desaparecida) Andrea Bello (fallecida en 2019) la flasheé”, rememora los orígenes de la muy buena Corresponsal el director Emiliano Serra, que se estrena comercialmente el 16 mayo y que se exhibió en el reciente Bafici. 

“Siempre me quedaron rebotando un montón de historias porque leí mucho estos Archivos del terror.” Así se conocieron a los documentos que en diciembre de 1992 fueron encontrados en la ciudad de Lambaré, Paraguay, que confirmaron plenamente la organicidad de la Operación Cóndor, el plan mediante el que las dictaduras del Cono Sur coordinaron su accionar durante la década de 1970 y 1980 para espiar, perseguir y eventualmente desaparecer a militantes de otros países de los que habían huido. “El documental tuvo la colaboración fundamental de la periodista Stella Calloni, y ahí vi cómo los medios hegemónicos manejaban todo. Corresponsal se empezó a disparar a partir de un espía que venía siguiendo a uno y había fotos e informes relocos, con detalles de lo que compraron el almacén y otras cosas. Eso nos hizo pensar con Santiago (Hadida, el coguionista) en el mundo este de los espías, mientras estábamos tras la prensa, viviendo un momento muy raro de lo que está pasando y pasaba en ese momento, que era plena pandemia: nos inspiramos en ciertos periodistas tan malos que hay ahí en los medios actuales. Ahí nos empezó a encontrar este personaje y lo empezamos a linkear con otras historias, porque todas las historias de la película tienen una pincelada de realidad. Empezó a crecer, y me gustó.”

Serra y el casting

Gabriel Rosas pasó de detrás a delante de cámara para darle vida a Ulrich, y enseguida todos quedaron más que contentos. “Él había estado al cargo del casting de mis otras películas y en esta dijimos: ‘me parece que la tenés que hacer vos’. Y así empezamos en pandemia a hablar por teléfono (él vive en Uruguay) y por suerte la pudimos empezar a firmar apenas se salió de la pandemia.” Serra no vio Zona de interés ni La conferencia, ambas sobre las cuestiones burocráticas que hicieron a la persecusión y matanza de judíos durante el nazismo; y no son mayoría los que ven en Oppenhaimer el dilema que para la misma época atravesó el vasto mundo laboral aunque hasta entonces no era visto de esa manera: la figura del colaborador. A Ulrich parece guiarlo la lógica de que si yo no lo hago otro lo hará, y además puedo hacer carrera en mi profesión.

“Sin duda queríamos buscar ese mundo de los periodistas y bueno, del otro, Jorge Prado, que viene a ser algo así como un Aníbal Gordon también metido en la burocracia del periodismo. Él ante estos barones se siente muy cómodo y es manso, y con las mujeres se envalentona. En todos estos pequeños rasgos empezamos a encontrarle al personaje las posibilidades de que pase de este lado al otro.” Ulrich es un gran ejemplo de la capacidad humana para no poder decir no: “Es una capacidad humana terrible. Incluso a lo último parece que va a decir que no y vuelve a decir que sí, agarra el sobre y vuelve a ir para adelante. Sentimos que hoy mucho periodismo es un poco así y queríamos reflejarlo de alguna manera en nuestro Corresponsal”.


Pero Corresponsal no lograría su gran performance si no fuera por su concepción cinematográfica, todo ese dispositivo técnico narrativo puesto a disposición de la búsqueda de un sentido: puestas, planos, posiciones, música, vestuario dan a este periodista gris un lugar en un mundo al que no pertenece, ni pertenecerá pese a todos sus esfuerzos. “Todos dicen que filmar en equipo es fantástico y ¡yo tengo un equipo increíble! Desde el inicio nos planteamos que no teníamos plata para contar la época y teníamos 19 días de rodaje. Y somos el mismo equipo que Cartero, eso también siento que influyó, porque teníamos muchas ganas de filmar. Entonces desde el día uno ya estábamos a una velocidad de 10 mil  revoluciones por minuto. Es un gran laburo de equipo entre la búsqueda de la locación, la directora de arte, ambientación y fotografía y cámara y vestuario, que se termina de unir un poco en corrección de color de la película, que ganó el premio en el Bafici” (lo hizo Lucila Kesselman, pareja de Serra). Esa idea de “teníamos mucha ganas de filmar” se asemeja mucho a una banda que viene ensayando seguido y le dicen hay estudio, comparación que a Serra le suena muy atinada. “Me muero por filmar era lo que pasaba.”

Algo que el presidente Milei está dispuesto a eliminar. “Con Cartero me había tocado una situación bastante similar porque era previo a la posible reelección de Macri, y la película era claramente contra el grupo privatizador de los ‘90. En las tres proyecciones del Bafici se notó que en Corresponsal ya hay una reescritura distinta de la película. Se reescribe algo que si se hubiera estrenado antes no sé si habría marcado tanto. Ojalá sirva a esta resistencia porque Milei busca la destrucción completa del cine y la cultura toda. Pertenezco a varios colectivos y he estado en reuniones con la presidencia del Incaa, y hoy por hoy sólo se va a financiar un par de películas grandes y después va a haber un recorte que va a hacer prácticamente imposible filmar para todo el resto. Ni hablar en las provincias. Más cuando uno toca temas reales y actuales. Soy montajista y hace seis meses que no filma nadie. Estamos ante un bache histórico.”

La banda entonces podría preguntarse,  ¿y ahora qué? “Para jugar al fútbol no estoy, aunque de a ratos me siento motivado (ríe). Soy un excelente cartero (su película se basa en su experiencia). Así que me imagino luchando para que no sea utópico filmar de cualquier manera, son sectores que necesitan apoyo.”  

Corresponsal

Dirección: Emiliano Serra. Guión: Serra y Santiago Hadida. Con Gabriel Rosas, Edgardo Moreira, Ximena Banús, Gaby Pastor. Agustín Rittano. Jorge Prado. Diego Starosta. Estreno comercial: 16 de mayo.