Jennifer López y Ben Affleck, en la cuerda floja: todas las veces en las que han roto su relación

Jennifer López y Ben Affleck están viviendo una de las mayores crisis de su relación. Aunque no la única. Fue en el año 2000 cuando el actor y la cantante quisieron darle una primera oportunidad al amor, pero lo suyo no funcionó. Ambos estaban en momentos personales y profesionales distintos; sus carreras comenzaban a crecer en Hollywood y decidieron priorizar esos nuevos proyectos. Es por eso que casi 20 años después volvieron a reencontrarse, aunque esta vez con una familia ya formada y con los corazones totalmente libres. Ahora, parece ser que están viviendo un bache en su amor, o al menos eso es lo que asegura la prensa americana.

Tanto es así que, desde los medios de comunicación estadounidenses, se afirma que ambos están haciendo todo lo posible para reflotar lo suyo y, por eso, acuden a terapia de pareja. Y, además, marcan un momento como el antes y el después en relación a los rumores; la MET Gala. Una de las invitadas fue la actriz y cantante, pero allí no hubo ni rastro de su marido, algo sorprendente, ya que, en la mayoría de actos públicos suelen aparecer de la mano. Es por eso que han sido yo casi dos meses en los que no se ve a la pareja en un photocall, lo que ha hecho disparar todos los rumores.

El primer matrimonio de Ben Affleck y Jennifer López

Como ya hemos comentado, Affleck y López le dieron su primera oportunidad al amor a comienzos de los 2000. En ese momento, hasta llegaron a comprometerse, pero la boda, finalmente, no se celebró. Se apuntó, además, a infidelidades por parte del actor que nunca fueron confirmadas. Fue en el año 2002 cuando se vieron por primera vez en el rodaje de la película Gigli. Por aquel entonces, ella estaba casada con el bailarín Cris Judd. Aunque eso sí, unos meses más tarde se separaron y la puertorriqueña comenzó una relación con Ben Affleck que fue muy intensa.

Lo suyo iba tan en serio que Ben no lo dudó un momento y decidió pedirle matrimonio con un impresionante anillo de diamantes. A lo que ella no tuvo ninguna duda y dijo que sí. En esa época, se convirtieron en una de las parejas del momento, lo que hizo que toda la atención se centrara en ellos y su relación. Esta presión mediática provocó que pospusieran su boda y, en 2004, anunciaron que habían roto definitivamente. Después de cortar, Jennifer comenzó a salir con el cantante Marc Anthony, con quien tuvo dos mellizos; Emme y Max. En el caso de Ben, este empezó una relación con Jennifer Garner, con quien fue padre de Violet, Seraphina y Samuel.

Ambos matrimonio duraron en el tiempo pero terminaron por romper. Tras esto, Affleck rehizo su vida sentimental de la mano de Ana de Armas, mientras que López encontró el amor junto al cantante Álex Rodríguez. En todo momento, tanto la cantante como el actor estuvieron en contacto y nunca perdieron esa amistad que había comenzado una relación. Aunque eso sí, los rumores de que lo suyo había ido a más fueron constantes a principios de 2021 y se confirmaron cuando fueron pillados en una escapada a Montana. Fue ese mismo año cuando Jennifer lo confirmó a través de una publicación de Instagram.

Su ruptura

En abril de 2022 ambos decidieron comprometerse y no fue hasta unos meses más tarde cuando celebraron una íntima boda en Las Vegas. Luego, hicieron lo mismo en otro enlace en Georgia. Lo cierto es que, en todo este tiempo, tanto Jennifer como Ben se han mostrado muy enamorados, por lo que sorprende las contadas ocasiones que se han mostrado en público en las últimas semanas. Además, sus cinco hijos siempre se han mostrado muy unidos y, en esta ocasión, parece ser que la presión pública no ha sido un problema. Juntos han acudido a un sinfín de lugares como los Premios Óscar o los galardones del cine que se entregan en la ciudad de Venecia.

Los motivos de su crisis

En los últimos días, se ha visto a López en un viaje a París junto a una amiga y, también, por las calles de Los Ángeles en compañía de su hija. Pero en ninguno de estos dos momentos ha estado presente Affleck, lo que ha hecho que sonara con más fuerza que nunca los rumores de una posible crisis. Una persona, muy cercana a la pareja, ha confirmado a la revista In Touch: «Ben ya se mudó y probablemente tendrán que vender la casa de sus sueños que estuvieron buscando durante dos años. Nunca dejarán de amarse, pero ella no puede controlarlo y él no puede cambiarla. No hay forma de que hubiera durado».

También, desde el mismo medio, han confirmado que ha sido la propia Jennifer quien ha propuesto que fueran a terapia de pareja para poder arreglar lo suyo. Aún así, ambos siguen manteniendo su residencia en Beverly Hills, una mansión de 60 millones de dólares, con más de 3.000 metros cuadrados, 12 dormitorios y 24 baños. Sí que es cierto que, en sus últimas imágenes, Jennifer sigue llevando su anillo de casada.