Cuando alguien lleva viendo y compartiendo mucho tiempo con las personas más jóvenes durante todos los días de su vida, sabe analizar mejor que nadie cómo son y sus valores. Por eso los profesores son capaces de analizar la evolución de la sociedad y cómo son los jóvenes. Si no, que se lo digan a Carmen Iglesias, a la que conocemos reciente por haber sido profesora de Felipe VI y que ha sabido valorar a la hija del rey, Leonor. 

"Era un alumno estupendo, sereno, fuerte, amable". Así definió la historiadora Carmen Iglesias a Felipe VI en un reciente acto en su honor en el que recibió la Medalla de Honor de Madrid. Con gran cercanía y simpatía, la que fue profesora del rey agradece esta medalla que le conceden por su labor de docencia, divulgación e investigación, y contaba a los medios también algunas de sus anécdotas a lo largo de su historia vital. Pero no solamente habló del Rey, y el cariño que profesa hacia él, sino que también se atrevió a definir a Leonor y su papel actual como heredera. 

La faceta más personal 

Carmen Iglesias ha tenido la oportunidad de conocer personalmente a Leonor, con la que ha compartido varios momentos. Y por ello, y gracias a su sabiduría como docente y a su buen ojo con los más jóvenes, ha sido capaz de definir perfectamente a la Princesa de Asturias. "Encantadora, muy cariñosa y muy empática", estos son los tres adjetivos que Iglesias ha elegido para definirla, demostrando cómo la parte natural y humana de Leonor es lo que más destaca en la heredera del trono. 

Carmen Iglesias
Gtres

Es una definición muy personal de Leonor, que, aunque siempre ha tenido un carácter y una personalidad bastante reservada y algo tímida, al menos a la hora de mostrarse en público y con la prensa, parece que en las distancias cortas y en la intimidad es imposible no caer rendidos ante sus encantos y está llena de naturalidad. Todas las personas que han dejado entrever la parte más personal de la heredera al trono, la Princesa de Asturias, como algunos de sus compañeros en la Academia Militar de Zaragoza, o que han coincidido con ella en diferentes eventos oficiales donde la infanta estaba presente, concuerdan en lo mismo: su naturalidad y cercanía es excepcional. 

También halagos para la infanta Sofía

A lo largo de sus declaraciones, también ha tenido tiempo para incluir a la pequeña de la Familia Real, la infanta Sofía, a la que tilda de “maravillosa”. Aunque Sofía se encuentra fuera de España, terminando su curso de formación en el UWC Atlantic College de Gales, siempre está muy presente, al menos en  alma, en la mayoría de eventos relacionados con la Casa Real y sus integrantes, demostrando que también es uno de los miembros más queridos de la Familia Real. La actitud y personalidad de Sofía, más alegre y dicharachera, hace que sea uno de los miembros de la familia real más divertidos y que estamos deseando conocer más y mejor a medida que va creciendo. 

No se muestra tan alegre con Letizia

Ha llamado la atención de los medios de comunicación cómo  tras hablar tan distendidamente sobre Felipe VI, Leonor e incluso Sofía, al preguntar a la profesora sobre la imagen de Letizia, esta respondía más seria y cauta, respondiendo únicamente que “cumple con su papel". Quizá sea porque la relación de Cristina Iglesias con la reina es mucho más limitada que con el resto de la familia y no la conoce lo suficiente como para poder opinar de su faceta más personal y por eso la define de forma mucho más profesional y lejana. 

La “pequeña” Familia Real.

La profesora también ha valorado cómo se encuentra en estos momentos la Familia real. Desde que Felipe VI llegó al trono, la organización oficial de la Familia Real se limitó a los reyes Felipe y Letizia y sus hijas, Leonor y Sofía. Aunque se indica un lugar especial para la reina emérita, Doña Sofía, y hay un “vacío” sobre el rey emérito, Don Juan Carlos, desde que abandonó el país para residir en Abu Dabi, si se eliminó de la familia real a las Infantas Elena y Cristina y todos sus descendientes. Es por ello que Cristina Iglesias la define así “un poquito pequeña, pero muy selecta y de primera".

Esta fue una de las primeras decisiones de Felipe VI cuando llegó al trono, Al comprender que la institución se encontraba algo tocada por algunos comportamientos poco ejemplares por parte de algunos de sus miembros, y el desapego que sentía la sociedad española hacia la Monarquía Española, definió tomar el control y limitar la Familia Real a su familia, marcando distancia y demostrando que son él, y su hija, la heredera al trono Leonor, los únicos encargados de seguir adelante con esta institución.