Bangui, 12 may (EFE).- Al menos nueve personas murieron este domingo en un ataque del grupo rebelde Coalición de Patriotas por el Cambio (CPC), ligado al expresidente François Bozizé, contra una mina de oro controlada por una empresa china EN el centro de la República Centroafricana (RCA), informaron a EFE autoridades locales.
“En este momento la población está en shock y la información nos está llegando a cuentagotas. Condenamos este acto odioso”, aseguró a EFE el diputado de la subprefectura de Yaloké-Bossembele (donde ocurrió el incidente), Auguste Boukanga.
Así, Boukanga indicó que la cifra de muertos podría crecer durante los próximos días.
“Los rebeldes atacaron de madrugada, pero encontraron resistencia por parte del Ejército centroafricano”, señaló a EFE un líder de la sociedad civil de la zona, Junior Kango.
"Hubo también numerosos heridos que han sido trasladados a (las localidades de) Gaga y Yaloké para recibir atención médica. Pero los hospitales están saturados y algunos pacientes serán traslados a Bangui", la capital del país, añadió.
El médico jefe del hospital de Yaloké, Henri Bengué, confirmó la llegada de numerosos heridos.
Bozizé, que presidió la RCA desde 2003 hasta 2013, fundó en diciembre de 2020 la alianza de rebeldes CPC con el objetivo de impedir unas elecciones presidenciales en las que no pudo concurrir, después de que las autoridades centroafricanas invalidasen su candidatura.
los rebeldes de su alianza llegaron en enero de 2021 a las puertas de Bangui, pero el Ejército consiguió hacerles retroceder con la cooperación de las tropas de la misión de paz de la ONU en el país (Minusca).
Esa derrota militar obligó a Bozize a huir al exilio, primero a la vecina Chad y después a Guinea-Bisáu.
La justicia centroafricana ha condenado a Bozizé ha trabajos forzados de por vida y emitió una orden de detención internacional en su contra por crímenes contra la humanidad.
La RCA sufre una violencia sistémica desde finales de 2012, cuando una coalición de grupos rebeldes de mayoría musulmana -los Séléka- tomó la capital y derrocó a Bozizé, dando inicio a una guerra civil.
Como resistencia a los ataques de los Séléka se formaron milicias cristianas anti-Balaka que, como el primer grupo, terminaron divididos en varias facciones armadas.
Todavía dos tercios del país -rico en diamantes, uranio y oro- están controlados por milicias y, según la ONU, cerca de 500.000 personas están desplazadas internamente. EFE
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