Secuestro: La trata de niños (2/3) - Diario La Tribuna

Secuestro: La trata de niños (2/3)

OM
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18 de mayo de 2024
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03:30 am
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Secuestro: La trata de niños (2/3)

 

 

Comentamos en el artículo precedente, que la película “Sonido de libertad”, de Alejandro Monteverde (2023), impacta por su clara denuncia contra la trata de niños. Con el mismo tema traemos hoy un relato todavía más crudo y desgarrador, tal es lo visto en el filme polaco del año 2021, dirigido por Patryk Vega, bajo el título: “Small World” (conocido como “Secuestro: inocencia robada”), que intenta, por un lado, mostrar el lado oscuro del mundo donde se produce la trata de personas, y por otro, subrayar los devastadores efectos que deja a largo plazo en las personas involucradas la ejecución de tan execrables crímenes.

En “Sonido de libertad”, Timothy Ballard (interpretado por Jim Caviezel, el protagonista de “La pasión de Cristo”), es un agente especial en el Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, convertido en activista que intenta rescatar a niños del tráfico sexual. Y en “Small World”, es otro policía, Robert Goc (Piotr Adamczyk), el que se involucra en una trama semejante que terminará por cambiarle la vida, al esforzarse por hacer justicia a una familia devastada por la desaparición forzada de una menor.

 

Todo empieza cuando, en un pequeño pueblo de Polonia, Goc detiene por exceso de velocidad a Marta (Marieta Zukowska), una mujer que está en la desesperada búsqueda de su hija de 4 años, cuyo nombre es Ola (Julia Wieniawa), quien ha sido secuestrada por la mafia rusa. Tal intervención provoca que los secuestradores escapen cruzando la frontera oriental, hacia Rusia y Ucrania. Así, lleno de culpa, Goc toma la arriesgada decisión de participar en una investigación internacional para salvar a la menor.

La frenética búsqueda del policía lo lleva entre otros lugares, a una mansión lúgubre y tenebrosa donde se celebra una fiesta de pedófilos, una suerte de ritual satánico con antifaces y celdas donde los niños están atrapados y son exhibidos como animales. Una surrealista escena que nos hizo recordar un acto memorable del filme “Ojos bien cerrados”, dirigida por Stanley Kubrick en 1999, en el que las fantasías eróticas vuelan libremente entre los asistentes a un fiestón clandestino y secreto. Con el paso de los años, la investigación llevará a Robert a Bangkok, hasta encontrar a una adolescente Ola, que está embarazada de tres meses y se ve obligada a cumplir todos los caprichos de un rico hombre de negocios.

“Y lo que comenzó como una misión de rescate, se torna rápidamente en un descenso hacia los infiernos, la locura y un descubrimiento del que el protagonista no va a regresar nunca más como una persona normal… A partir de ese punto, el director abre la puerta hacia una vorágine de turbios acontecimientos y bajas pasiones donde muestra el horror que atraviesa una menor sumergida en el mundo del tráfico humano en el día a día, y de lo increíblemente bajo, bizarro y asqueroso que pueden ser las personas que recurren de manera ilegal a menores de edad para servicios sexuales”. https://www.infobae.com/. Alejandro Saldaña.

 

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