Rusia cumple con éxito su operación de propaganda y desinformación en el Sahel
Moscú domina la opinión pública en gran parte de África con una narrativa que criminaliza a Occidente a través una compleja red de medios locales, canales rusos y líderes de opinión.
El pasado 4 de abril, un mando militar chadiano envió una carta al Ministerio de Defensa de EE UU solicitando la suspensión de actividades en la base de Adji Kosseï, marcando un nuevo golpe en el Sahel a la presencia militar occidental. Esta carta llegó a pocos medios, entre ellos destaca el African Initiative, que forma parte de una red diseñada para socavar el apoyo a Occidente y facilitar la influencia rusa en África a través de la propaganda y la desinformación.
Al frente de la compañía aparece el nombre de Artem Kurev Sergevich. Kurev, aparente empresario del mundo de las comunicaciones, ha sido identificado por un tribunal estonio como miembro del FSB ruso (antiguo KGB), en una investigación contra la eurodiputada letona Tatjana Ždanoka por sus lazos con el Kremlin.
African Initiative, registrada apenas en septiembre de 2023, es solo un eslabón en una campaña exitosa que incluye acuerdos políticos y económicos entre el Kremlin y gobiernos africanos, así como la presencia de mercenarios y armamento rusos en países como Malí, Burkina Faso y Níger. Este despliegue, inicialmente a través del grupo Wagner quienes tras la muerte de su fundador, Yevgueni Prigozhin, fueron renombrados y oficializados como Africa Corps, forma parte de una estrategia más amplia para expandir la influencia rusa en el continente.
Según el Africa Center for Strategic Studies, Rusia es el principal actor en la desinformación en África, con un 40% de las operaciones de intoxicación informativa, especialmente en el África Occidental. Desde 2018, Rusia ha llevado a cabo 19 campañas de desinformación dirigidas a países como Malí, Burkina Faso y Níger, contribuyendo a la desestabilización y promoviendo golpes militares.
Expertos como Kevin Limonier, profesor de geopolítica, ven estas operaciones como una extensión de las estrategias rusas en conflictos como el de Ucrania, buscando liderazgo en el sur global a través de una narrativa poscolonial. Estas operaciones se ven facilitadas por el resentimiento local contra antiguas potencias coloniales como Francia, junto con la creciente penetración de internet y las redes sociales en África.
🚨🚨NÍGER: AMÉRICA FUERA RUSIA SE ENTRA
— Dan-i-El (@DanielJ23480098) April 22, 2024
Estados Unidos está dispuesto a retirar sus tropas de Níger a medida que la región del Sahel cambia sus alianzas hacia Rusia.
Unos 1.000 soldados estadounidenses se marcharán tras el giro estratégico de la nación de África occidental, que… pic.twitter.com/XPU3IpQ7RN
Medios como Afrique Media, aliado de la cadena rusa estatal Russia Today (RT) que ha sido sancionada por Europa, y personalidades como la activista Nathalie Yamb, conocida por su apoyo a Rusia, desempeñan un papel importante en la difusión del mensaje ruso en África. Afrique Media se presenta como el primer canal de televisión panafricano y cubre temas como la guerra en Ucrania, África y el Estado francés, promoviendo una visión favorable a Rusia.
El Global Engagement Center ha identificado a Artem Kurev, vinculado a proyectos de propaganda rusa en África, como parte de esta red de influencia. Kurev, junto con otros propagandistas prorrusos como Luc Michel y Kemi Seba, contribuyen a difundir el mensaje ruso y promover el panafricanismo como contrapeso al colonialismo occidental.
El entramado de propaganda rusa en África incluye líderes de opinión, redes sociales, ejércitos de troles (internautas a sueldo de la propaganda rusa), bots (perfiles automatizados), producciones de vídeo y medios de comunicación aliados, respaldados por la inversión rusa en actos culturales y la distribución de banderas rusas en manifestaciones. Esta estrategia, que antes estaba centrada en empresarios como Prigozhin, ahora ha sido centralizada por el Kremlin y sus servicios de inteligencia tras la muerte del apodado chef de Vladimir Putin.
Rusia ha logrado consolidar su influencia en el Sahel a través de una compleja red de propaganda y desinformación, aprovechando resentimientos históricos y conflictos locales para promover sus intereses geopolíticos en África. @mundiario
