Aliseda acelera el desagüe y pone a la venta miles de pisos ocupados de Blackstone
Aliseda acelera el desagüe y pone a la venta miles de pisos ocupados de Blackstone
CARTERAS QUASAR Y ANTICIPA

Aliseda acelera el desagüe y pone a la venta miles de pisos ocupados de Blackstone

Aliseda ha pulsado el botón rojo y ha activado la venta de las viviendas más complicadas que tiene Blackstone en las carteras de Quasar (Banco Popular) y Anticipa (Catalunya Caixa)

Foto: Sede de Aliseda (Aliseda)
Sede de Aliseda (Aliseda)
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Blackstone ha pulsado el botón rojo y ha activado la venta de las viviendas más complicadas que tiene en las carteras de Quasar, formada por los activos tóxicos que compró del desaparecido Banco Popular, y Anticipa, heredera de la antigua Catalunya Caixa.

Se trata de pisos y casas sin posesión, categoría bajo la que se enmarcan todas las situaciones especiales por las cuales el fondo no puede entregar las llaves de la vivienda al comprador, ya que el inmueble está habitado por un tercero, en la inmensa mayoría de las veces, de manera irregular.

En todos los casos, al ser casas cuya posesión no se puede garantizar, se venden con importantes descuentos frente al precio de mercado. Una rebaja creciente cuanto más difícil sea poder recuperar el uso de la vivienda por parte de su nuevo propietario, y cuanto peor sea el estado del inmueble.

La mitad de la cartera, algo más de un millar de viviendas, son lo que se podría definir como casas okupadas con k, mientras que la otra mitad se reparte, fundamentalmente, entre inquilinos que han dejado de pagar el alquiler o hipotecados cuyos préstamos han sido ejecutados por impago, pero continúan viviendo en la casa.

Foto: El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos. (EFE)

Bajo la definición de vivienda sin posesión también entran los pisos que se venden con inquilino al corriente de pago y contrato en vigor. En estos casos, el comprador está obligado a respetar la permanencia del arrendatario hasta que venza el alquiler. Una casuística minoritaria en la cartera que ha lanzado al mercado Blackstone.

El fondo ha sacado a la venta estas casas a través de su servicer, Aliseda, y aunque la ofensiva alcance a más de 2.000 hogares, no se trata de una venta en bloque, sino que las operaciones son individuales, piso a piso.

placeholder Logo de Blackstone. (Reuters)
Logo de Blackstone. (Reuters)

El inversor estadounidense tomó la decisión de acelerar la venta de sus inmuebles más conflictivos apenas unas semanas antes de que el Gobierno aprobara lo que era un secreto a voces: la prórroga del escudo antidesahucios hasta el año 2028, iniciativa que recibió la luz verde este martes.

Para hacerse una idea del alcance de esta cifra, basta señalar que Aliseda comercializa actualmente 3.493 viviendas sin situaciones especiales, muchas de ellas propiedad de particulares. Dicho con otras palabras, en torno al 40% de la cartera de pisos actualmente en venta en Aliseda son sin posesión u ocupados.

El comprador natural de estas viviendas son fondos especializados en adquirir con descuento activos complicados, aunque Aliseda ha lanzado la campaña en su canal minorista, por lo que está abierto a cualquier interesado.

Gran peso de Barcelona

La mitad de las viviendas a la venta se ubican en la provincia de Barcelona, mientras que en Madrid apenas hay 136 inmuebles, en Málaga 74, en Valencia 54 y en Sevilla 52. Si se amplía el foco al resto de la comunidad autónoma catalana, se comprueba que el impacto de la ocupación es mucho menor, con 123 pisos en Gerona, otro centenar en Tarragona y apenas 15 en Lérida.

La decisión de Blackstone de sacar ahora al mercado estos 2.000 inmuebles responde a su interés por acelerar el desagüe, una estrategia en la que lleva inmerso más de seis años con diferentes estrategias.

La mitad de toda la cartera de viviendas ocupadas o sin posesión, un millar de hogares, se ubica en la provincia de Barcelona

En el pasado, por ejemplo, ha puesto en marcha iniciativas similares, a través de Aliseda, pero con suelos o activos a medio construir (lo que se conoce en la jerga del sector como Work in Progress, WIP).

Desde la aprobación de la Ley de Vivienda, el fondo ha doblado esfuerzos tanto en la venta de sus diferentes carteras, como en su gran filial de vivienda en alquiler, Testa Homes. Esta se ha sumado también a esta estrategia de ventas y ha decidido desprenderse de los pisos que tiene en edificios donde no controla la propiedad de todo el inmueble.

Blackstone ha pulsado el botón rojo y ha activado la venta de las viviendas más complicadas que tiene en las carteras de Quasar, formada por los activos tóxicos que compró del desaparecido Banco Popular, y Anticipa, heredera de la antigua Catalunya Caixa.

Blackstone Aliseda Okupas
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