El Constitucional de Togo ratifica la victoria del partido de Gnassingbé en las elecciones legislativas

El Tribunal Constitucional de Togo ha ratificado los resultados de las elecciones legislativas celebradas en abril, en las que el partido gubernamental, encabezado por el presidente, Faure Gnassingbé, se hizo con una mayoría aplastante en el Parlamento, en medio de las denuncias sobre irregularidades por parte de la oposición. Así, el presidente del Constitucional, Djobo-Babakane Coulibaley, ha destacado que la formación de Gnassingbé, la Unión para la República (UNIR) se hizo con 108 de los 113 escaños en liza, mientras que los otros cinco han ido a parar a manos de diversos partidos opositores. Coulibaley ha explicado que la Alianza de Demócratas para el Desarrollo Integral (ADDI) ha recabado dos escaños, mientras que la Alianza Nacional para el Cambio (ANC), la Dinámica para la Mayoría del pueblo (DMP) y las Fuerzas Democráticas de la República (FDR) han obtenido uno cada uno. En este sentido, ha recalcado que los resultados han sido ratificados tras un "análisis minucioso" de las apelaciones presentadas por la oposición, que ha "declarado nulas", al tiempo que ha agregado que la tasa de participación fue del 61,76 por ciento, según ha recogido la agencia estatal togolesa de noticias, ATOP. La confirmación de los resultados provisionales llega además cerca de una semana después de que Gnassingbé promulgara una controvertida reforma constitucional que cambia el modelo presidencialista por uno parlamentario, pese a las denuncias de la oposición, que sostiene que esto busca permitir al mandatario permanecer al frente del país de forma indefinida. La reforma fue aprobada el 19 de marzo en el Parlamento --dominado por la UNIR-- y ha sido especialmente criticada porque elimina la posibilidad de que los togoleses voten directamente a su presidente, que será elegido por la Asamblea Nacional y tendrá un papel mayormente ceremonial. Asimismo, establece un nuevo cargo ejecutivo, el de presidente del Consejo de Ministros, equivalente al de primer ministro y nombrado igualmente por la Asamblea Nacional para un mandato de seis años que será renovable siempre que cuente con la mayoría parlamentaria, algo abierto como una puerta abierta para Gnassignbé. Gnassingbé es presidente de Togo desde 2005, cuando fue aupado al poder con apoyo del Ejército tras el fallecimiento de su padre, Gnassingbé Eyadéma, quien había estado al frente del país desde 1967, consolidando así una saga familiar al frente del país africano que se extiende desde hace cerca de seis décadas.