Rescatado con vida un hombre que llevaba secuestrado 27 años en el sótano de su vecino

Omar Bin Omran, un hombre argelino que había desaparecido durante la guerra civil en Argelia en 1997, fue encontrado vivo el 12 de mayo de 2024. Omar, ahora de 44 años, fue hallado en el sótano de su vecino en la localidad de El Guedid, a solo 200 metros de su hogar familiar.

Omar Bin Omran, que entonces tenía 17 años, desapareció en 1997 mientras se dirigía a la escuela, en medio de la devastadora guerra civil argelina, un conflicto que se prolongó durante una década entre el gobierno y grupos islamistas. Su familia, como muchas otras, había asumido que Omar estaba entre los numerosos muertos y desaparecidos del conflicto. A pesar de intensas búsquedas, no se había encontrado ningún rastro de él hasta ahora.

El increíble descubrimiento se produjo después de que una disputa por una herencia llevara al hermano del captor de Omar a revelar su paradero en redes sociales. Esta revelación motivó a la familia de Omar a asaltar la casa del vecino, donde finalmente lo encontraron en el sótano. Las autoridades, actuando bajo las órdenes del fiscal general, realizaron una investigación formal que confirmó el hallazgo. El sospechoso, identificado como BA, de 61 años, intentó huir pero fue detenido y arrestado rápidamente.

Según el diario local El Khabar, el perro de la familia de Omar, que solía olfatear cerca del lugar donde él estaba retenido, fue envenenado para evitar que siguiera su rastro, lo que sugiere un intento deliberado de ocultar su paradero. Durante su cautiverio, Omar informó a las autoridades que había visto a su familia en varias ocasiones, pero no pudo pedir ayuda porque su captor lo había convencido de que estaba bajo un "hechizo mágico".

Las condiciones en las que Omar vivió durante estos años han sido calificadas como "atroces" por la fiscalía. Actualmente, Omar está recibiendo atención médica y psicológica para ayudarlo a recuperarse del trauma de su prolongado cautiverio. Tristemente, su madre falleció en 2013 sin llegar a saber que su hijo estaba vivo.