Si estás de humor para una búsqueda del tesoro extraña esta primavera, estás de suerte. Los entomólogos están preguntando al público para informar sobre avistamientos de cigarras adultas que se han infestado con el parásito Massospora cicadina, también conocido como el hongo de la cigarra zombi. Quienes buscan tendrán una pista fácil: el abdomen de las cigarras infestadas está constantemente lleno de un tapón fúngico parecido a un pudín que eventualmente puede causar que sus traseros y genitales se caigan.
Hay muchos parásitos siniestros en el mundo, pero M. cicadina es definitivamente uno hecho a medida para una película de terror. Infesta ciertas especies de cigarra en la magicada género que tiene ciclos de vida mucho más largos que otros, los llamados cigarras periódicas de América del Norte que sólo emergen en masa del suelo cada 13 o 17 años a la vez, generalmente entre finales de abril y principios de junio. Durante las breves semanas de vida restante en la superficie, estas cigarras se aparean y ponen la próxima generación de huevos que eclosionan y se entierran en el suelo, comenzando el proceso de nuevo. Las cigarras periódicas se agrupan en crías, según su llegada programada, aunque las crías se componen de varias especies.
Este año es una temporada de cigarras especialmente única, ya que han surgido dos crías (de 15 actualmente activas): la cría XIII, de 17 años, concentrada en el Norte de Illinois, y la Brood XIX, de 13 años, que estará mucho más extendida por todo el sureste de Estados Unidos. La llegada de estas cigarras también significa que M. cicadina hará una rara aparición sobre el suelo, brindando una emocionante oportunidad para científicos como Matthew Kasson, profesor de patología forestal y micología en Universidad de Virginia Occidental.
“Nuestro hongo es lo que ellos llaman un biotrofo obligado, lo que significa que necesita una cigarra huésped para sobrevivir. No se pueden criar. “en el laboratorio, porque no se pueden criar cigarras de 17 años en el laboratorio”, le dijo Kasson a Gizmodo por teléfono. Dependemos exclusivamente de la recolección de tapones de hongos de la parte trasera de las cigarras infectadas que se recolectan durante los brotes. Y es fundamental que recopilemos la mayor cantidad posible de hongos. como podemos».
Como sus anfitriones, M. cicadina tiene un ciclo de vida complicado, lleno de sexo y drogas. Algunas cigarras se infectan con la forma de esporas de los hongos cuando comienzan a excavar fuera del suelo hacia la edad adulta. Estas cigarras desarrollan un tipo específico de infección clasificada como etapa I. Las cigarras infectadas en etapa I parecerán normales al principio , pero después de aproximadamente una semana, la parte inferior del abdomen, incluidos los genitales, comienza a desgarrarse, habiendo sido reemplazado por una masa de hongo blanquecino. tejido. Los tapones de hongos están cargados de esporas que pueden infectar a las cigarras sanas.
Los machos tienen más probabilidades que las hembras de perder el abdomen y la basura por completo, pero eso no les impide intentar aparearse, y ahí es cuando las cosas se ponen aún más raras. Aunque ambos sexos contraen infecciones en etapa I que pueden contagiar a otros, los hombres infectados lo intentarán. tener relaciones sexuales con cualquier cigarra alrededor. Además de realizar el habitual llamado de apareamiento de los machos, algunos infectados también comienzan a actuar como hembras, robándoles su ritual de apareamiento de batir de alas para atraer a machos sanos a cortejarlas inútilmente. Estas orgías desenfrenadas no ayudan a las cigarras cualquiera, pero sí alimentan la continua propagación del parásito.
Los científicos todavía no saben exactamente cómo el hongo deforma tan dramáticamente el comportamiento de las cigarras, pero hace varios años Kasson y sus colegas hecho un descubrimiento clave. Una vez dentro de un host, M. cicadina parece producir grandes cantidades de catinona, un tipo de estimulante, que probablemente desempeña un papel importante para mantener a las cigarras impulsadas a aparearse mientras ignoraban cualquier otra distracción, como un trasero perdido. También encontraron que otros masospora Las especies que infectan a las cigarras anuales pueden producir psilocibina, el ingrediente principal de los hongos psicodélicos.
Pero todavía hay tantas cosas sobre las que estamos a oscuras cuando se trata de estos tortuosos parásitos: misterios que requerirán mucha atención. muestras para que investigadores como Kasson las examinen.
Hay una segunda etapa de M. cicadina infección, por ejemplo. Estas infecciones en etapa II todavía ahuecan el abdomen de las cigarras, pero ahora producirán esporas en reposo de paredes más gruesas (Kasson describe Estos tapones de hongos se asemejan a un “pudín cremoso”. Las cigarras macho de etapa II tampoco se convierten más en perros horndogs pansexuales. Las esporas en reposo No están destinados a infectar a las cigarras adultas, pero son bombas de tiempo que sembrarán el suelo y esperarán para infectar a la próxima generación de cigarras. Ninfas que tienen la mala suerte de toparse con ellos entre 13 y 17 años después.
Las infecciones en etapa II se detectan en cigarras adultas infectadas en etapa I y tienden a aparecer más adelante en la temporada. Pero, según Kasson, Los detalles exactos detrás de la transición de las infecciones en etapa I a la etapa II aún no están claros. No se sabe si las cigarras adultas pueden contraer la etapa Las infecciones I de otros adultos infectados si se detectan lo suficientemente temprano en la temporada, por ejemplo, o si una infección en etapa I siempre causará una infección en etapa II.
Otra pregunta persistente se refiere a las crías de cigarras. El análisis anterior del equipo encontró evidencia de que las M. cicadina Los parásitos que infectan a las cigarras de 13 años son ligeramente diferentes a nivel genético de los M. cicadina infectando cigarras de 17 años. Eso deja abierta la posibilidad de que estos dos grupos de parásitos sean en realidad dos especies diferentes. Pero como hay Con muchas menos crías de 13 años en la actualidad (sólo tres de 15), el equipo de Kasson sólo ha tenido muestras limitadas con las que trabajar fecha. La próxima cría de 13 años después de esta no llegará hasta 2027, por lo que los investigadores esperan atrapar tantas como estas cigarras como sea posible antes de final de la temporada.
“Realmente tenemos que ser oportunistas y aprovechar estas emergencias cuando podamos”, señaló Kasson.
En las últimas semanas, Kasson ha realizado un llamar al público a través de las redes sociales. La pregunta es bastante simple: las personas que se encuentren con cigarras probablemente infectadas deben fotografiar y subir sus fotografías. aunque tampoco iNaturalista o el más específico CigarraSafari. También pueden ponerse en contacto con Kasson directamente a través de su mando X/Twitter @imperfectfunguy. Si bien el equipo de Kasson está muy ansioso por recolectar especímenes reales, ninguna observación es demasiado pequeña.
Una cosa que no debes hacer si ves una cigarra infectada por hongos es intentar comer su pudín de tripas, una posibilidad real que Kasson ha tenido que advertir a las personas demasiado curiosas, especialmente a aquellas interesadas en los estimulantes que se encuentran en su interior.
“La catinona que encontramos en las cigarras fue solo uno de los 1,000 compuestos diferentes que encontramos que estaban vinculados específicamente al hongo. si comieras los tapones, podrías encontrar micotoxinas, bacterias, nematodos u otros microbios que podrían ser realmente dañinos, ", dijo. “Así que yo diría que probablemente no vale la pena correr el riesgo”.
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