Opinión

El próximo más domingo 19 de mayo el deber nos llama, porque hoy, más que nunca, el destino de nuestra nación está en manos de las mujeres del pueblo, de esas que han sido ignoradas, de aquellas que han padecido en carne propia la muerte de un ser querido a causa de la delincuencia o de un sistema de salud que ya no funciona. Su voz, su voto, son la clave para forjar un futuro digno para nuestras familias y para nuestra amada patria.

Cuando depositamos nuestra confianza en las urnas, no solo estamos ejerciendo un derecho, estamos tomando una decisión trascendental. Es el momento de recordar que el amor por nuestros hijos, por sus sueños y por su seguridad, nos impulsa a actuar con determinación.

Nos han prometido cambios, pero ¿qué cambio es aquel que nos aleja de la prosperidad y nos sumerge en la incertidumbre y el temor? Es hora de alzar la voz y decir ¡basta ya! ¡No más retrocesos, no más violencia que enluta nuestros hogares y desgarra el tejido de nuestra sociedad!

En cada esquina de nuestra patria, el miedo se ha instalado, y nos estremece pensar en el simple acto de salir a estudiar, a trabajar o a divertirnos. ¿Acaso este es el legado que queremos dejar a nuestras futuras generaciones? Es tiempo de reflexionar, de unirnos en la lucha contra la injusticia y la opresión.

Recordemos que la libertad no es un regalo, es un derecho que debemos defender con esmero. Cada préstamo mal invertido, cada recurso desviado, nos ata a las cadenas de la pobreza y la desigualdad. Digámosle no a un destino marcado por la precariedad y la resignación.

El progreso debe ser para todos, no solo para unos pocos privilegiados. Es hora de que nuestras voces se alcen con fuerza en las urnas, para reclamar un futuro digno, donde cada familia pueda vivir con seguridad y prosperidad.

Dominicanas valientes, trabajadoras y dignas, en sus manos está el legado de nuestros patriotas, aquellos valientes hombres y mujeres que lucharon por una patria libre y justa. Sigamos su ejemplo, convirtámonos en heroínas de la patria, alzando nuestra voz y nuestro voto por un mañana mejor.

Este domingo, votemos temprano en las elecciones presidenciales y congresuales por la salud, por la seguridad, por una vida digna para todas y para cada dominicano. Votemos para que nuestras familias permanezcan unidas, para que el amor y la solidaridad sean los pilares de nuestra sociedad.

Que el eco de nuestro voto resuene en cada rincón de nuestra República Dominicana. Que sea un grito de fe por un mejor mañana, de unidad y de progreso. Porque juntas, somos imparables. Porque juntas, podemos construir un futuro lleno de luz y de esperanza.

Votemos, votemos por lo que amamos, votemos porque la República Dominicana vuelva a ser ejemplo de estabilidad, crecimiento y tranquilidad.
Porque solo el poder transformador de las mujeres puede decidir el futuro de nuestra Patria.

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El voto de las mujeres decidirá el destino del país.

Por Alexandra Maldonado

Si amas a tus hijos, si te preocupa su futuro, si no quieres que «la vuelta por México» sea la opción para su progreso, es el momento de tomar una decisión. Si te prometieron un cambio y tu vida retrocedió y la de tu familia retrocedió, es tiempo de decir ¡ya no más! Si te angustia que tu esposo, hijo o hija salgan a estudiar o a divertirse en cualquier lugar de tu comunidad, pueblo o ciudad, porque temes que no volverán, es tiempo de reflexionar sobre la violencia, los atracos y asesinatos que han enlutado a cientos de familias y tomar una decisión por el bien de los tuyos, de tus hermanas y hermanos dominicanos, por la paz de tu país. Si amas tu Patria y tu libertad, piensa en que los préstamos que no se invierten en el desarrollo del pueblo te encadenan y te condenan a la pobreza perpetua. Si crees que el progreso debe ser para todos, y no para unos pocos que ya tienen riquezas demás, entonces exprésate en las urnas y decide tu futuro, el futuro de tu familia y el futuro de tu país, porque la República Dominicana nos pertenece a todos y votar con conciencia es convertirte en una heroína de la Patria.

Vota por tu salud, por no salir con miedo a las calles; por una alimentación de calidad para ti y los tuyos. Vota para que tu familia permanezca unida y no la separe la precariedad impuesta por un gobierno indiferente, insensible y mentiroso. Vota para que tu salario te vuelva a alcanzar para enfrentar el costo de la vida y tú y los tuyos puedan vivir con dignidad. Mujer, dominicana, en tus manos está el futuro de esta República que con tanto esfuerzo construyeron nuestros Padres de la Patria Duarte, Sánchez y Mella, junto a las heroínas María Trinidad Sánchez, Manuela Diez, Rosa Duarte, Concepción Bona, Josefa Antonia (Chepita) Pérez de la Paz, Ana Valverde, Salomé Ureña, Ercilia Pepin, Mamá Tingó y las Hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, entre otras mujeres que lo largo de la historia han entregado sus vidas por la paz y la justicia y la libertad de todos los dominicanos.