Las escuelas de Reino Unido no deben enseñar a los niños sobre la identidad de género, según un nuevo borrador de directrices del gobierno. Según el documento —que llega en medio de un intenso debate en el Reino Unido sobre el género y los derechos de las personas trans—, los profesores deberán abstenerse de enseñar sobre el concepto de identidad de género. “Es importante que las escuelas adopten un enfoque cauteloso a la hora de enseñar sobre este delicado tema, y no utilicen ningún material que presente puntos de vista controvertidos como hechos, incluida la opinión de que el género es un espectro”, dice la directiva. Las normas se someterán a una consulta de nueve semanas antes de su finalización.

Las nuevas directrices también podrían prohibir a los colegios ingleses introducir cualquier tipo de material de educación sexual antes del quinto curso, cuando los alumnos cumplen nueve años. En los últimos años, el gobierno conservador británico se ha inclinado cada vez más por el debate en torno al género, y anteriormente ordenó a los colegios que informaran a los padres si sus hijos querían cambiar de género.

La ministra de Igualdad, Kemi Badenoch, también ha anunciado una ley que obligaría a los restaurantes, oficinas y algunos otros espacios públicos de nueva construcción a tener baños separados para hombres y mujeres, en un esfuerzo por acabar con los de género neutro. La diputada conservadora Miriam Cates ha liderado la campaña para replantear la educación sexual en las escuelas. Interrogada el jueves sobre las nuevas medidas para las escuelas, la Secretaria de Educación, Gillian Keegan, declaró a la BBC que “el sexo biológico es la base de la educación sobre relaciones, sexo y salud, no estos puntos de vista controvertidos”. Keegan dijo que había habido “algunas pruebas de algunas personas” de que a los alumnos se les estaba enseñando que podía haber “72 géneros”.

Preguntado sobre esta afirmación, Keegan dijo: “Obviamente, ha habido montones de noticias en los periódicos, algunos padres nos han dicho que no podían acceder a los materiales y hemos visto materiales de grupos de campaña o grupos de presión; algunas personas dicen que los han visto en las escuelas, otras que no los hemos tenido en nuestra escuela”. Los sindicatos de profesores acogieron el nuevo plan con frialdad el jueves. Daniel Kebede, del Sindicato Nacional de Educación, dijo que los profesores ya consideraban la educación sexual de una manera apropiada para la edad. “El gobierno parece estar sembrando dudas sobre si esto no se está haciendo ya y si no se está pensando cuidadosamente por parte de los líderes escolares y los profesores de todo el país”, añadió. “Esto es más ruido de guerra cultural de un gobierno mal informado y fuera de onda”.

Los críticos de la medida han comparado los planes con la muy criticada política de la Sección 28 de la era Thatcher, que prohibía “la promoción de la homosexualidad” por parte de las autoridades locales, incluso en las escuelas. La diputada del partido Verde, Caroline Lucas, acusó al gobierno de “politizar la educación sexual”, lo que calificó de “imperdonable, peligroso y reaccionario”. En declaraciones a PinkNews, dijo: “Parece que no hay profundidades en lo bajo que este Gobierno caerá para avivar su temeraria guerra cultural. Siempre es apropiado enseñar a los niños a mantenerse seguros, amables y respetuosos. En lugar de demonizar la información como ‘ideología’, son los propios ministros tories los que tienen que volver a las aulas y aprender mejor”.

Share Twitter Facebook Whatsapp Copy link

Despues de leer, ¿qué te pareció?