Santoral

¿Qué santos se celebran hoy, sábado 11 de mayo de 2024?

San Francisco de Jerónimo es uno de los santos que se celebran en este 11 de mayo

santos 11 mayo
San Francisco de Jerónimo
Blanca Espada

¿Qué santos se celebran hoy, sábado 11 de mayo de 2024? La Iglesia católica dedica cada día a la conmemoración de varios santos, aquellos que con su vida y obra han dejado una huella imborrable en la fe de millones. Hoy, sábado 11 de mayo de 2024, no es la excepción. Este día se viste de festividad espiritual, en el que fieles de diversas partes del mundo elevan sus oraciones y celebran las vidas de los santos que la Iglesia ha decidido honrar en esta fecha. Entre ellos destaca San Francisco de Jerónimo, jesuita del reino de Nápoles y San Ignacio de Láconi que fue un sacerdote italiano.

Junto a los mencionados, en este día se celebra a otros muchos santos que destacan por su historia única y su compromiso devoto. Para los fieles, estas historias son fuente de fortaleza y consuelo en momentos de duda o dificultad. Además, el reconocimiento de estos santos de forma diaria proporciona un ritmo al año litúrgico que ayuda a enriquecer la práctica de la fe por lo que os ofrecemos la información de los que se celebran el 11 de mayo.

San Francisco de Jerónimo

San Francisco de Jerónimo, conocido como «el apóstol de Nápoles», nació en Grottaglie, cerca de Taranto, en el año 1642. Desde temprana edad, mostró un celo ilimitado por la conversión de los pecadores y un profundo amor por los pobres, los enfermos y los oprimidos. A los 24 años, en 1666, fue ordenado sacerdote y durante los siguientes cinco años enseñó en el «Collegio dei Nobili» de los jesuitas en Nápoles.

A los 28 años, San Francisco ingresó a la Compañía de Jesús y dedicó su vida al trabajo misional. Durante el periodo de 1671 a 1674, colaboró con el reconocido predicador Agnello Bruno. Una vez concluidos sus estudios de teología, fue nombrado predicador en la Iglesia del Gesú Nuovo, donde se destacó por convertir al menos a 400 pecadores al año.

Su labor evangelizadora lo llevó a visitar prisiones, hospitales y otros lugares, donde en ocasiones fue brutalmente maltratado. Sin embargo, su compromiso con la fe y su entrega a los demás nunca menguaron. San Francisco falleció a la edad de 74 años y fue sepultado en la Iglesia de los jesuitas de Nápoles.

En 1839, San Francisco de Jerónimo fue canonizado, reconociendo así su incansable labor en pro de la fe y su dedicación a los más necesitados. Su legado perdura como ejemplo de entrega y servicio a los demás, recordándonos la importancia de la compasión y el amor al prójimo. San Francisco de Jerónimo es un referente de devoción y entrega, cuya vida continúa inspirando a generaciones a seguir su ejemplo de servicio desinteresado y amor al prójimo.

 San Ignacio de Láconi

Cuando San Francisco estableció la orden de los frailes menores, su enfoque no era crear una comunidad de eruditos, sino más bien de hombres que vivieran y predicaran el Evangelio en completa pobreza, obediencia y humildad. Este enfoque se conoce como la conversión del corazón a la perfección evangélica, renunciando al pecado, a la riqueza y a cualquier posesión terrenal. San Francisco exigía a sus discípulos despojarse por completo de sus bienes y servir a los leprosos como condiciones para ser admitidos en la orden.

Un ejemplo vivo de esta devoción a la pobreza y al servicio desinteresado fue Ignacio de Láconi, un fraile capuchino que vivió en el siglo XVIII. Conocido como el «padre santo» por los habitantes de Cagliari, Ignacio era un mendicante humilde que ganó la veneración de sus compatriotas a través de sus milagros. Nacido en Láconi, Cerdeña, en 1701, Ignacio fue educado por padres pobres en bienes materiales pero ricos en valores humanos y cristianos.

Desde temprana edad, Ignacio practicaba estrictas mortificaciones y, a los 20 años, se unió a la orden capuchina en Cagliari después de escapar de peligros mortales. Durante su vida, se dedicó al servicio de los pobres y necesitados, siendo un ejemplo vivo de pobreza y disponibilidad hacia aquellos que sufrían. A pesar de quedar ciego dos años antes de su muerte en 1781, Ignacio continuó observando las reglas del convento con escrupulosa devoción.

Durante su vida, Ignacio fue conocido por sus extraordinarios dones espirituales, y después de su muerte, su reputación como taumaturgo creció a medida que se repetían los milagros atribuidos a su intercesión. En 1940, fue beatificado por Pío XII y canonizado el 21 de octubre de 1951.

Otros santos que se celebran el 11 de mayo

Junto a los mencionados, en este 11 de mayo se celebra también a estos otros santos:

  • San Antimo de Roma
  • San Evelio, mártir
  • San Gangulfo de Varennes
  • San Gualterio de Esterp
  • San Iluminado de San Severino
  • San Iluminado, monje
  • San Mamerto de Vienne
  • San Mateo Lê Van Gâm
  • San Mayolo de Cluny
  • San Mayulo de Bizacena
  • San Mocio de Bizancio
  • Beato Gregorio Celli
  • Beato Domingo Iturrate, religioso trinitario
  • Santa Estela

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